Los refugiados atendidos por la Cruz Roja aumentan un 81% en Catalu?a

A pesar de la inacci¨®n del Gobierno de Espa?a para cumplir su compromiso europeo de reubicar a los refugiados de pa¨ªses en conflicto, cada a?o llegan cientos de migrantes que piden asilo y que son acogidos por entidades sociales como la Cruz Roja, que tiene en marcha un plan de integraci¨®n. Aunque el programa avanza en su primera fase, que consiste en instalar a las personas migradas en centros de acogida (las plazas de acogida operadas por Cruz Roja han aumentado hasta 258 por semestre), en la segunda fase, la de la integraci¨®n de las personas en la sociedad, se detectan carencias. Cruz Roja alerta de que ya son 3.073 los refugiados atendidos por la ONG hasta octubre, lo que supone un incremento del 81,7% con respecto a 2016.?

"Tenemos que pasar del bienvenidos refugiados a la concreci¨®n del c¨®mo, cu¨¢ndo y d¨®nde: de los mensajes y esl¨®ganes a las pol¨ªticas concretas", ha afirmado este jueves Enric Morist, coordinador de Cruz Roja en Catalu?a, en la presentaci¨®n de la memoria de la entidad. Morist considera que, con m¨¢s de veinte conflictos de guerra abiertos en el mundo, y la situaci¨®n de pobreza extrema de los pa¨ªses de los que provienen, los refugiados no dejar¨¢n de venir, y se tienen que solucionar las deficiencias del sistema de acogida. Seg¨²n Morist, este a?o han aterrizado en el aeropuerto de El Prat 1.400 personas que una vez aqu¨ª han pedido asilo.

Las entidades sociales han podido mejorar la primera fase del programa, ya que se han inaugurado nuevos centros de acogida. Sin embargo, pasados los seis meses que dura la primera fase, los demandantes de asilo tienen que enfrentarse a una realidad en la que ni la vivienda ni el empleo son asequibles f¨¢cilmente. Prueba de ello es que ha crecido un 81,7% el n¨²mero de personas refugiadas que son atendidas por Cruz Roja.

"En muchos sitios, como en Barcelona, la integraci¨®n es m¨¢s complicada porque la vivienda ha subido de precio, pero tenemos muchos municipios en Catalu?a que pueden ayudar a la integraci¨®n", ha asegurado Morist, quien ha reclamado m¨¢s compromiso y eficiencia a los Ayuntamientos y a la sociedad en general. "Si queremos acoger, tenemos que dar una salida digna a las personas que llegan, porque si no crearemos un tap¨®n muy grande para la gente que todav¨ªa tiene que venir", ha a?adido.?

Cronificaci¨®n de la pobreza

De enero a octubre, Cruz Roja ha atendido a 493.936 personas en sus distintos proyectos. Es la primera vez desde antes de la crisis que baja el n¨²mero de personas que pide ayuda, un 7%, aunque los responsables de la ONG no cantan victoria. La entidad alerta de que el trabajo precario, los sueldos bajos o la situaci¨®n de largo desempleo de algunos usuarios est¨¢n creando una situaci¨®n de pobreza cr¨®nica para el 40,6% de los atendidos. En 2016, Cruz Roja atendi¨® a 234.354 personas con programas de cobertura de necesidades b¨¢sicas como alimentos, ropa o suministros, una cifra algo menor que la del a?o anterior, pero todav¨ªa preocupante.

"Ya no podemos medir la pobreza solo con los datos del paro, sino que tenemos que ver otros indicadores", ha enfatizado Morist, en referencia al grado de precariedad del empleo, a las situaciones de pobreza energ¨¦tica (el 81% de los atendidos no puede pagar los recibos de la luz) o a las consecuencias emocionales de tener que pedir ayuda. Adem¨¢s, el 40% de los atendidos por Cruz Roja piden ayuda a pesar de tener un contrato laboral. "Tal como van los datos, tendremos miles de personas desconectadas de la sociedad. Aunque vemos muy positivas iniciativas como la renta garantizada de ciudadan¨ªa, falta mucho por hacer m¨¢s all¨¢ de dar dinero o bienes", ha concluido Morist.

La entidad ha remarcado que la pobreza se ceba m¨¢s con el g¨¦nero femenino: el 60% de los atendidos son mujeres. Adem¨¢s, seg¨²n la ONG, la crisis y la pobreza han tenido efectos negativos en la violencia de g¨¦nero, que ha incrementado. En el programa de teleasistencia para mujeres v¨ªctimas de la violencia de g¨¦nero, Cruz Roja atiende a 2.728 personas que est¨¢n protegidas por una orden de alejamiento dictada por un juez.