Josep Bros: ¡°Las precipitaciones no son buenas en la ¨®pera¡±

El 9 de noviembre de 1992 recibi¨® una llamada de la entonces directora art¨ªstica adjunta del Liceo de Barcelona, Chiristina Scheppelmann, para pedirle que sustituyera al tenor Fernando de la Mora en la funci¨®n de esa misma noche en el rol de Percy en Anna Bolena, de Gaetano Donizetti. El tenor catal¨¢n Josep Bros (Barcelona, 1965) iba a debutar en el segundo cast de esa obra pero la indisposici¨®n de De la Mora forz¨® a adelantar su bautismo al lado, ni m¨¢s ni menos, que de la soprano Edita Gruberova, que ya era una figura de la l¨ªrica. Un joven Bros, ten¨ªa entonces 27 a?os, que ¡°encant¨®¡± a Gruberova ¡ªen palabras de Scheppelmann, actual directora del Liceo¡ª y con la que ha compartido m¨¢s escenas y grabaciones de discos en sus 25 a?os de carrera.

Dos d¨¦cadas y media que le dan una amplia perspectiva, la suficiente para sostener que el momento actual es bueno: ¡°hay excelentes cantantes, pero tambi¨¦n mucha precipitaci¨®n y eso no es bueno para la ¨®pera. Las prisas, la rapidez. Coger un avi¨®n y al d¨ªa siguiente cantar en la otra parte del mundo, como ocurre ahora..... No creo en la superficialidad de la ¨®pera. Hace falta un tiempo para ensayar, para prepararse. Pienso que por esas mismas prisas hoy en d¨ªa las carreras no duran lo que deber¨ªan durar¡±. Bros hace un s¨ªmil entre los profesionales de la l¨ªrica y los deportistas de ¨¦lite: ¡°la t¨¦cnica, el entreno, el ensayo puede considerarse similar pero el esfuerzo en la ¨®pera es mayor por el factor emocional, que es muy importante¡±.

Opina desde la propia experiencia, la de un tenor que ha ido evolucionando y madurando con el tiempo. La de un joven que sin antecedentes familiares musicales ¡ª¡±solo eran aficionados¡±¡ª curs¨® estudios con un maestro particular y se examinaba en el Conservatorio de M¨²sica. ¡°Estudi¨¦ piano y hasta los 16 ¨® 17 a?os no sent¨ª nada especial por la l¨ªrica. Tal vez el detonante fue el gusto por las romanzas y escuchar a Jos¨¦ Carreras y Jaume Aragall¡±, recuerda Bros que se centr¨® en los estudios de ¨®pera a partir de los 18 a?os.

Bros ha interpretado m¨¢s de 60 personajes, desde el bel canto al repertorio de Verdi y Puccini en el que dice que se siente c¨®modo. El Liceo ha sido testigo de ese enriquecimiento porque ya han sido 21 producciones las que ha realizado desde aquel 1992. Algunas representaciones ¡°memorables¡±, subraya Scheppelmann, como la que interpret¨® en Lucia di Lammermoor con June Anderson en la temporada 1999/2000 o La Favorite con la mezzosoprano Dolora Zajick en la temporada 2002/2003. Otro momento destacable fue su debut en el papel de Gabriel Adorno en Simon Boccanegra hace dos temporadas tambi¨¦n en una situaci¨®n extrema por la cancelaci¨®n del tenor programado.

El teatro de La Rambla, junto con el Real de Madrid, el de Oviedo y el de M¨²nich son los escenarios donde la presencia de Bros ha sido m¨¢s regular. Tambi¨¦n ha actuado en las salas de la Scala de Mil¨¢n, el Covent Garden de Londres, la Vienna Staatsoper o en Los ?ngeles y San Francisco, entre otros.

Bastantes a?os de carrera y bastantes partenaires: ¡°No puedo negar que hubo muy buena conexi¨®n con Gruberova desde aquella primera funci¨®n de Anna Bolena y despu¨¦s hemos compartido m¨¢s escenarios, otra vez en el Liceo en 2001 con I Puritani. Tengo que decir que en mis 25 a?os de carrera he tenido muy buena suerte¡±, explica Bros para quien el respeto y el buen entendimiento en el escenario es b¨¢sico.

Recital en el Liceo

El tenor y el Liceo quieren celebrar esa larga relaci¨®n de medio siglo con un recital, el pr¨®ximo domingo, con algunos de los temas m¨¢s brillantes de su repertorio de la ¨®pera que incluye arias de Luisa Miller, Werther, L'elisir d'amore hasta fragmentos de zarzuela como La tabernera del Puerto o El hu¨¦sped del sevillano.

Bros opina que los montajes en las producciones de ¨®pera deben ser muy transparentes: ¡°da igual donde se sit¨²a la acci¨®n. Lo que cuenta es que se entienda¡±. Tambi¨¦n se felicita del enriquecimiento del montaje esc¨¦nico de los ¨²ltimos a?os, especialmente por lo que aporta la tecnolog¨ªa audiovisual: ¡°aunque lo que enamora m¨¢s es la voz¡±, subraya. Conocedor del p¨²blico del Liceo, lo define como ¡°entendido, respetuoso y entregado¡± y no oculta que los aplausos en medio de la funci¨®n adem¨¢s de reconfortar porque son un reconocimiento espont¨¢neo, ¡°tambi¨¦n son bienvenidos porque representan un descanso de unos segundos que van muy bien cuando est¨¢s all¨ª arriba. Yo, cuando estoy como p¨²blico, tambi¨¦n aplaudo despu¨¦s de las arias porque s¨¦ lo bien que va¡±.