?Corre, que te pillo!

Audaz, hipn¨®tica, brillante y en¨¦rgica es la fren¨¦tica carrera en pos de la felicidad, que 22 bailarines del Ballet du Nord realizan en Auguri,la magn¨ªfica coreograf¨ªa del director de la compa?¨ªa, Olivier Dubois. L¨¢stima que este espect¨¢culo ¨²nicamente se ha programado durante tres d¨ªas, una pieza tan bella y original necesitaba ser vista y gozada por m¨¢s espectadores.

Auguri es la ¨²ltima creaci¨®n de este innovador y rebelde artista, y es tambi¨¦n la ¨²ltima parte de su trilog¨ªa, ?tude critique pour un trompe l'oeil. El montaje no ha sido un espect¨¢culo f¨¢cil de realizar, ya que sus int¨¦rpretes, excelentes bailarines de danza contempor¨¢nea, han sido sometidos a las exigencias de un entrenador de deportistas ol¨ªmpicos, Alain Lignier, quien les ha creado una rutina f¨ªsica y una dieta alimenticia para poder correr a un ritmo trepidante durante 60 minutos y no desfallecer.

Para Dubois, sus 22 bailarines son una manada de p¨¢jaros de buen augurio y a los que le gusta observa, manipular y poner a prueba. Al empezar la obra se ve en escena cuatro cub¨ªculos habitados por alguien, a veces un hombre, otras una mujer. Su actitud es t¨ªmida, observan el exterior y reflexionan si vale la pena a salir de su zona de confort. Se plantean si quieren arriesgarse a buscar la anhelada y sobrevalorada felicidad. Finalmente deciden entregarse en cuerpo y alma a esta b¨²squeda, b¨²squeda que presienten agotadora. Y es entonces cuando empieza la din¨¢mica y seductora carrera de estos impetuosos hombres y mujeres. La espontaneidad de su gesto, las melenas al aire de ellas y la energ¨ªa atl¨¦tica de todos ellos se convierte en un apasionante y disciplinado ?corre, corre, que te pillo!

Al final del espect¨¢culo los int¨¦rpretes yacen exhaustos en el tejado de los cub¨ªculos, ya no les interesa el conformismo de su vida anterior.