El gasto familiar en educaci¨®n creci¨® un 25% durante la crisis

Los recortes que sufri¨® el sistema educativo durante la crisis econ¨®mica pasaron factura a los bolsillos de las familias catalanas. Un estudio de la Fundaci¨®n Jaume Bofill constata que, mientras el presupuesto del Departamento de Ense?anza ca¨ªa alrededor de un 21,7% ¡ªentre 2009 y 2014, la partida p¨²blica se redujo en 1.173 millones de euros¡ª, el gasto familiar en educaci¨®n creci¨® un 25,3%. Esto es, los hogares catalanes gastaron 557,84 euros de media en 2016, 112,50 euros m¨¢s que en 2008.

Los investigadores de la Fundaci¨®n Bofill sostienen que este efecto domin¨® que se gener¨® durante la crisis de reducci¨®n del gasto p¨²blico y aumento del gasto privado en educaci¨®n se debe, en parte, ¡°al incremento del copago de algunos servicios educativos, en buena medida para suplir la aplicaci¨®n de recortes de financiaci¨®n p¨²blica que recib¨ªan antes de la crisis econ¨®mica¡±. ¡°Cuando un territorio recorta la inversi¨®n en educaci¨®n y dice que aun as¨ª son eficientes, esto no es magia. Los que gastan m¨¢s son las familias y esto esconde una desigualdad educativa brutal¡±, reflexiona Ismael Palac¨ªn, director de la Fundaci¨®n Jaume Bofill.

Los expertos que participaron en el estudio (el Anuario 2016 sobre el estado de la educaci¨®n en Catalu?a) utilizaron la Encuesta de Presupuestos Familiares del Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE) para calcular, en t¨¦rminos estad¨ªsticos, el gasto medio de las familias en educaci¨®n. As¨ª, seg¨²n el informe, los hogares catalanes destinaron en 2015 557,84 euros para ense?anza y 1.069 euros por estudiante. Esto supone 168,6 euros m¨¢s en ense?anza y 323 euros m¨¢s por estudiante que las familias espa?olas. Sin embargo, matiza Palac¨ªn, ¡°estos datos sirven para ver la tendencia, pero infravaloran mucho el esfuerzo de las familias¡±. El experto explica, a modo de ejemplo, que las actividades extraescolares y el comedor de una escuela p¨²blica media suponen un desembolso familiar anual de unos 400 euros.

D¨¦ficit de becas

El informe alerta tambi¨¦n de que ¡°contin¨²an existiendo d¨¦ficits estructurales en las pol¨ªticas de becas¡±, como las ayudas para el comedor escolar que, pese a que la Generalitat aument¨® el presupuesto (de 32,7 a 69 millones), todav¨ªa sufren algunas carencias. ¡°Que haya que pagar en toda la red p¨²blica es una anomal¨ªa. Hay familias que no pueden abonar una cuota de 400 euros en una escuela y deciden no optar a ese centro y eso provoca segregaci¨®n. La escuela p¨²blica tiene que ser gratuita y estas son formas de privatizaci¨®n que hay que combatir¡±, sostiene Palac¨ªn.

El Anuario pone de manifiesto tambi¨¦n que los resultados acad¨¦micos no se han visto afectados por la crisis y esto se debe, en buena medida, a la ¡°respuesta resiliente de los profesores¡±, el sector m¨¢s castigado por los recortes, seg¨²n el informe. Adem¨¢s, apunta, el sistema de inmersi¨®n ling¨¹¨ªstica ¡°hace que la lengua no sea un factor de inequidad¡±.

Los expertos advierten, no obstante, de que, pese a que no hay ning¨²n indicador que refleje un empeoramiento de los resultados acad¨¦micos, no hay que bajar la guardia. ¡°Es demasiado pronto para percibir alg¨²n efecto significativo de la crisis sobre los resultados¡±, avisan.

El informe aboga por aprovechar la etapa de recuperaci¨®n econ¨®mica para ¡°reconsiderar los elementos que bloquean la mejora de la calidad y de la equidad del sistema¡±. Para empezar, los investigadores exigen 1.500 millones de euros m¨¢s para situar el gasto p¨²blico en ense?anza al mismo nivel que en Espa?a (el 4,4% del PIB). En este sentido, Palac¨ªn insiste en la necesidad de ¡°garantizar una educaci¨®n de primera infancia de m¨¢xima calidad priorizando los ni?os en riesgo de exclusi¨®n¡±. Entre 2011 y 2015 se redujo en 13.000 ni?os la demanda de alumnos en guarder¨ªas a causa de la bajada de la natalidad y del coste de estos centros. Las subvenciones a las guarder¨ªas fueron las primeras partidas en sufrir los tijeretazos durante la crisis.