Las letras catalanas descubren la literatura Queer

En verdad, oficialmente no existe una literatura Queer, pero s¨ª una mirada que incluir¨ªa la literatura feminista, la gay, la transexual y todas las que, grosso modo, cuestionan el imperante discurso heterosexual entre personas que mantienen el sexo con el que nacieron, o que entienden las relaciones solo en categor¨ªa binaria. Ese tipo de literatura transgresora existe en catal¨¢n, claro, pero nunca hab¨ªa sido m¨ªnimamente analizada en p¨²blico. Hasta ahora, puesto que hoy arranca QLit, el primer Festival de Literatura Queer, que hasta el domingo y en espacios como el Palau Al¨°s y el casal Pou de la Figuera (ambos en Sant Pere m¨¦s Baix), o el Instituto Franc¨¦s (para los cinef¨®rums), ha organizado en Barcelona la Associaci¨® d¡¯Escriptors en Llengua Catalana (AELC).

¡°La literatura Queer pone en jaque los c¨®digos restrictivos sobre sexo, g¨¦nero e identidad, o sea, incluye elementos tem¨¢ticos, de cuestionamiento de la normatividad del lenguaje, de visualizaci¨®n de minor¨ªas¡­ Es un tema y una literatura abierta y en constante construcci¨®n¡±, resume el escritor y periodista Ricard Ruiz Garz¨®n, quien junto a Bel Olid, presidenta de la AELC, y Sebasti¨¤ Portell, autores los tres encuadrados en este ¨¢mbito, coordina las jornadas. ¡°Lo que est¨¢ llegando tarde es el reconocimiento en la calle del fen¨®meno, pero no porque este tipo de literatura no est¨¦ funcionando ya¡±, llama la atenci¨®n Ruiz, que cita ejemplos de rabiosa actualidad. ¡°Libros tan distintos como Permagel, de Eva Baltasar, con relaciones l¨¦sbicas cotidianas, o En el cuarto oscuro, de Susan Faludi, donde una hija encaja como puede que su padre, a sus m¨¢s de setenta a?os, cambia de sexo¡­ son asumidos plenamente, pero era necesario decirlo y ponerlo en negro sobre blanco; la mirada Queer se va convirtiendo en un g¨¦nero transversal, como la novela negra¡±.

Invisibles para la cr¨ªtica

Esa producci¨®n, creciente en el sector editorial y entre buena parte de los lectores y analizada desde hace ya unos a?os en la universidad, adolece, seg¨²n Ruiz, de ¡°atenci¨®n cr¨ªtica: no tenemos una cr¨ªtica profesional al d¨ªa y corrientes literarias como ¨¦sta le han pasado por el lado sin percatarse; por no hablar de que es casi invisible en los grandes medios¡±. Y contrapone a todo ello, por ejemplo, el debate en las redes sociales sobre si la escritora juvenil Laura Gallego inclu¨ªa o no personajes desde la perspectiva Queer, ¡°adem¨¢s de que esta mirada se puede hacer desde el teatro, con nombres como los de Guillem Cl¨²a o Marc Rosich, o se hace tambi¨¦n desde las series¡­ El escaso eco hasta ahora no es porque esta manera de entender el mundo no est¨¦ ya ah¨ª bien visible¡±.

Terenci Moix, Esther Tusquets, Biel Mesquida, Llu¨ªs Maria Tod¨®, Flavia Company, David Vilaseca y Elisabeth Riera permiten trazar, entre otros muchos nombres, un hilo conductor en las letras catalanas, que tuvo en Maria-Merc¨¨ Mar?al uno de sus nudos po¨¦ticos. Precisamente su obra, a partir de la escritora Josefa Contijoc y de la bi¨®grafa, Llu?sa Juli¨¤, entre otros, es uno de los ejes de las jornadas. A pesar de ser la primera convocatoria, las jornadas-festival abordar¨¢n de todo: desde las alternativas al mito del amor rom¨¢ntico (con la escritora Baltasar, la editora Carol Paris, que ya lanz¨® hace un tiempo el hoy m¨¢s famoso Teor¨ªa King-Kong de Despentes, o la experta en poliamor Alba Torrent) y el ciberfeminismo (con la profesora Teresa L¨®pez-Pellisa), hasta el peso del feminismo y el movimiento LBTI de lesbianas, gais, transexuales y bisexuales en la literatura infantil (con el director de la revista Faristol, Bernat Cormand). ¡°Ya nadie se escandaliza de las parejas pr¨ªncipe/pr¨ªncipe o de que una princesa rechace una rosa o de un libro juvenil como El arte de ser normal, de Lisa Williamson, donde se plantea di¨¢fanamente la transexualidad¡±, dice Ruiz. En las jornadas, tambi¨¦n habr¨¢ cine (Obscuro barroco; Marvin ou la belle ¨¦ducation), concursos de improvisaciones po¨¦ticas en vivo y hasta un taller, DragQueer: Construir con el cuerpo la identidad, con Pol Galofre.

Arthur Conan Doyle, describiendo en su serie sobre Sherlock Holmes el famoso Club Di¨®genes, afirma: ¡°Es el m¨¢s exc¨¦ntrico [peculiar, seg¨²n otra traducci¨®n] de Londres y Mycroft uno de sus miembros m¨¢s exc¨¦ntricos¡±. Utiliz¨® la palabra ¡°queerest¡±. Hoy quiz¨¢ ya no le funcionar¨ªa.