La cultura boliviana llena el paseo del Prado de Madrid

En el siglo XIX lleg¨® a Bolivia un cargamento de bombines ingleses destinado a cubrir la cabeza de los obreros brit¨¢nicos que all¨ª trabajaban en la construcci¨®n del ferrocarril. Un lamentable error hizo que las tallas fueran muy peque?as para aquellos hombres, as¨ª que los bombines se les ofrecieron a las mujeres bolivianas, que los adoptaron con gusto. Es la versi¨®n m¨¢s popular del porqu¨¦ de los bombines en el atuendo tradicional de las bolivianas. Esta ma?ana, en las celebraciones de la Virgen de Urkupi?a, que ha organizado la Embajada de Bolivia y el Ayuntamiento de Madrid en el paseo del Prado, se ve¨ªan, en efecto, muchos bombines en un verdadero r¨ªo de color donde se mezclaron diferentes tradiciones, bailes y atuendos de todas las esquinas del pa¨ªs latinoamericano.

¡°Estamos en el centro emblem¨¢tico de Madrid demostrando la diversidad cultural que tiene Bolivia¡±, ha dicho el embajador boliviano Jorge Ramiro Tapia. ¡°Se aprecia en las diferentes danzas que se pueden disfrutar en el desfile. Es un evento que quisi¨¦ramos repetir cada a?o: una muestra de la integraci¨®n de los bolivianos en particular y los latinoamericanos en general. Y de la buena recepci¨®n de los hermanos espa?oles¡±, ha a?adido.

En el festejo han participado m¨¢s de 3.500 bailarines bolivianos repartidos en unas 42 fraternidades procedentes de varios lugares de Espa?a y tambi¨¦n de Europa (de Suiza, Suecia, Italia, B¨¦lgica y Francia). En Madrid viven m¨¢s de 15.200 bolivianos (sobre todo en el distrito de Usera), y llegaron a ser 45.000 hace 10 a?os, seg¨²n datos del Ayuntamiento. La crisis econ¨®mica y, seg¨²n apunta el embajador, el buen rumbo de la econom¨ªa boliviana (que ha crecido por encima del 4% en los ¨²ltimos a?os) ha hecho que la inmigraci¨®n haya disminuido. En la Comunidad de Madrid son 21.100 y en Espa?a 99.220, seg¨²n recoge el Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE).

¡°Es la primera vez que se ve esta unificaci¨®n de fraternidades en un evento de esta magnitud, es un lujo¡±, contaba Luis Moscoso, ciudadano boliviano, trabajador del sector de los minerales y radicado en Barcelona, que ha asistido a la celebraci¨®n. ¡°La variedad de folclore que se ve se debe a que Bolivia son muchas: la Bolivia andina o la Bolivia de la selva amaz¨®nica, etc¨¦tera. Esto produce diferentes formas de bailar, y diferentes atuendos: no es lo mismo bailar a 4.000 metros de altura que en las tierras m¨¢s bajas¡±, relataba Moscoso.

As¨ª, por el Paseo del Prado se han visto pasar a los muy en¨¦rgicos Caporales, con sus grandes cascabeles en los gemelos, que representan a los capataces de los esclavos negros, las coloridas danzas Taquirari, del oriente del pa¨ªs, el zapateo del Salay o la danza guerrera del Tinku, todas ellas realizadas con abigarrados atuendos fuertemente pol¨ªcromos. Guido Machaca, natural de La Paz, ha lucido una especie de armadura de drag¨®n con la que ejecuta la danza de la Morenada: ¡°Se llama traje de achachi y es dif¨ªcil bailar con ¨¦l, pesa 25 kilos¡±. ¡°Representa la lucha contra la colonizaci¨®n espa?ola, ese enfado, como muchas de estas danzas¡±, a?ad¨ªa su compatriota Graciela Tapia.

Rub¨¦n Ataucury, director de la banda musical Sariri (que en aimara significa caminante), mostraba una gruesa flauta de origen andino llamada mose?o: ¡°Se toca sobre todo en la festividad de la Candelaria y sobre todo en el valle de Luribay, de donde procede, en La Paz¡±. Tambi¨¦n el tradicional aguayo multicolor, cuyas franjas de colores tienen diferentes significados. ¡°Los utilizamos para transportar cosas, tambi¨¦n para llevar a los ni?os¡±.

¡°El acto de hoy es una manifestaci¨®n de la multiculturalidad¡±, ha dicho por su parte el alcalde en funciones, Nacho Murgui.? ¡°La cultura boliviana tiene que tener su sitio en el centro de Madrid, una ciudad con una enorme diversidad cultural porque madrile?os y madrile?as compartimos Madrid independientemente de d¨®nde vengamos. Todas las culturas y toda la diversidad tienen que tener un lugar central y hoy lo han tenido en el Paseo del Prado¡±.