Visitar el P¨®rtico costar¨¢ 10 euros
Desde el 1 de diciembre habr¨¢ que reservar y comprar entrada, con tarifas reducidas para jubilados o escolares y sesiones gratis para siete grupos de peregrinos y dos de compostelanos a la semana
"Nosotros vivimos de las limosnas; y las colectas, no s¨¦ por qu¨¦, bajaron mucho", ha comentado esta ma?ana el de¨¢n de la Catedral de Santiago, Segundo P¨¦rez, a la prensa durante la rueda en la que se han anunciado las tarifas que a partir del 1 de diciembre habr¨¢ que pagar para visitar el P¨®rtico de la Gloria. La entrada ordinaria costar¨¢ 10 euros, que quedar¨¢n reducidos a 8 en el caso de jubilados, parados y estudiantes, e incluso a 2 euros, si son grupos organizados de escolares. El cabildo catedralicio y la Fundaci¨®n Catedral (el organismo encargado de las obras, restauraciones y gesti¨®n de la bas¨ªlica) preve¨ªan revelar los precios en octubre. Pero acabaron adelantando la fecha ante la pol¨¦mica suscitada por el anuncio, hace ya un par de semanas, de que el P¨®rtico, esa obra cumbre del rom¨¢nico unida irremediablemente al interior de un templo de peregrinaci¨®n de acceso gratuito, iba a tener taquilla y cobrar la entrada.
Visiblemente molestos, el de¨¢n, y en especial el director de la Fundaci¨®n Catedral, el can¨®nigo fabriquero Daniel Lorenzo, han desgranado durante m¨¢s de una hora los gastos que a la Iglesia le suponen las obras, el personal, la seguridad, las visitas guiadas y sobre todo el mantenimiento futuro de la obra de Mateo. "Para conservar la situaci¨®n maravillosa en la que se encuentra vamos a necesitar un cuidado constante", ha recordado Lorenzo, "no se puede jugar con un elemento patrimonial que sigue en un estado de equilibrio inestable y que lo seguir¨¢ estando para siempre". Solo la conservaci¨®n de este conjunto escult¨®rico con una piedra y una policrom¨ªa altamente vulnerables a la acci¨®n de la humedad ambiente y la temperatura, seg¨²n ¨¦l, costar¨¢ al menos 200.000 euros anuales.
Los ¨²nicos que podr¨¢n ver gratis el P¨®rtico completo y de frente (porque el llamado "Santo dos Croques" en el que supuestamente se quiso representar el Maestro Mateo y varias figuras de las columnas seguir¨¢n siendo visibles, las ¨²ltimas de soslayo, desde la nave central de la catedral) van a ser un grupo de 25 peregrinos al d¨ªa, de lunes a domingo, y dos de compostelanos los domingos por la tarde. Los vecinos de Santiago que quieran conseguir una de estas invitaciones deber¨¢n reservar con d¨ªas de antelaci¨®n, y los romeros a Compostela que entren en el cupo ser¨¢n designados directamente por la Oficina del Peregrino a su llegada. Aparte de estos grupos, tienen entrada libre los Amigos de la Catedral, un programa de donaciones particulares como el que existe en muchos museos que sin embargo solo cuenta en su lista con 20 personas que residan en la capital de Galicia.
Cuando se le ha preguntado si esta nueva pol¨ªtica de tarifas no acabar¨¢ extendi¨¦ndose a todo el conjunto de una catedral inmersa en obras de rehabilitaci¨®n cuyos representantes siempre dijeron que seguir¨ªa "abierta" a todos por su vocaci¨®n peregrina, el de¨¢n ha asegurado que el actual arzobispo se niega a cobrar por entrar en el templo. "Nunca se puede decir que nada vaya a durar para siempre, salvo la vida eterna", ha puesto por delante, "pero don Juli¨¢n Barrio dijo que la catedral no puede cobrar, y va a seguir siendo arzobispo hasta 2022".
"El templo est¨¢ abierto y va a seguir abierto de forma gratuita de 7 a 21 horas", ha remarcado Segundo P¨¦rez. Y ha negado adem¨¢s que la catedral sea un inmueble privado, como propiedad que es de la Iglesia: "Es un edificio p¨²blico. De m¨¢s utilidad p¨²blica no lo hay". No obstante, el P¨®rtico cobrar¨¢ las visitas y se librar¨¢ del requisito de los BIC (Bien de Inter¨¦s Cultural) de abrir cuatro d¨ªas al mes de forma gratuita porque, seg¨²n Lorenzo, la ley especifica que los elementos que formen parte de un "espacio musealizado" quedan exentos de esta obligaci¨®n. Adem¨¢s del plan de acceso al P¨®rtico en exclusiva, la Iglesia tambi¨¦n establecer¨¢ entradas de 12 euros (10, reducida; 3, escolares) que cubrir¨¢n una visita "combinada" al P¨®rtico, el Museo Catedral y la Colexiata do Sar. El primer a?o ser¨¢ de prueba y la Iglesia ya avanza que las tarifas pueden cambiar despu¨¦s.
"Yo nunca cobr¨¦ una misa, ni un funeral", ha dicho el de¨¢n. "Aqu¨ª vivimos de las colectas, de los peregrinos, y sobre todo de los peregrinos extranjeros, que son generosos, como los holandeses, y tambi¨¦n los alemanes", ha vuelto a repetir m¨¢s adelante el jefe del cabildo, en una rueda de prensa en la que los religiosos, hablando de n¨²meros, no disimulaban su enfado con algunas noticias, o con llamadas y cartas de protesta que han recibido estos d¨ªas de algunos ciudadanos. La semana pasada, la Catedral difundi¨® un comunicado en el que negaba cismas en el gobierno de la bas¨ªlica y respaldaba la gesti¨®n de Daniel Lorenzo al frente de la fundaci¨®n, las cuentas, las obras y la b¨²squeda de v¨ªas de financiaci¨®n.
El de¨¢n y el can¨®nigo fabriquero, ahora miembro de la Real Academia Galega de Bellas Artes, han afirmado que aunque la Fundaci¨®n Barri¨¦ cumpli¨® con el convenio y pag¨® todo lo comprometido para la restauraci¨®n, hubo apartados que corrieron por cuenta de la catedral y desde que la obra acab¨® toda la responsabilidad sobre el mantenimiento recae en la bas¨ªlica. Los religiosos han enumerado un sinf¨ªn de gastos para justificar el cobro de entradas, y han asegurado que todo lo que se recaude se destinar¨¢ a mantener el sistema de visitas guiadas, con su personal, su tecnolog¨ªa y su sistema de taquilla electr¨®nica y centro de llamadas de 24 horas. El dinero que sobre, han dicho, se emplear¨¢ en conservar el conjunto escult¨®rico m¨¢s importante del arte medieval en Europa.
Para demostrar el galopante deterioro que amenaza el P¨®rtico de la Gloria han ense?ado fotograf¨ªas de 1912, 1992 y 2008. La figura de San Juan Evangelista mostraba a principio de siglo XX un estado casi perfecto, una policrom¨ªa muy da?ada 80 a?os despu¨¦s y un aspecto alarmante al final. Por el camino perdi¨® varios rizos de piedra. Las fotos de 1992 se tomaron justo antes de la restauraci¨®n (limpieza y consolidaci¨®n parcial) que pag¨® la Xunta de Galicia en 1993 para que el P¨®rtico recobrase algo de su esplendor en aquel Xacobeo que marc¨® el inicio del bum de las peregrinaciones. Las im¨¢genes de 2008 son tambi¨¦n previas al comienzo de los trabajos que pag¨® la Barri¨¦ y que se extendieron hasta este a?o bajo la direcci¨®n de dos restauradoras del Instituto de Patrimonio Cultural de Espa?a. Las fotos sugieren la relaci¨®n entre la velocidad en que se degrada la obra y la avalancha peregrina y tur¨ªstica, que sigue creciendo con la promoci¨®n de los Caminos, los viajes organizados y la proliferaci¨®n de los vuelos. Cuando se empez¨® a restaurar el P¨®rtico, su estado era "calamitoso, terrible", asegura Daniel Lorenzo: "El deterioro era radical. La policrom¨ªa se ven¨ªa abajo, formaba una masa, una carcasa que se despegaba como una c¨¢scara. En poco tiempo se hubiera perdido. Porque nadie, hasta ahora, se atrev¨ªa a poner el cascabel al gato".
"Esta obra genial solo se puede conservar si se establece un control de accesos y de conservaci¨®n exhaustivos", defiende el director de la Fundaci¨®n Catedral, "lo contrario es una bomba de relojer¨ªa". Si ahora en un a?o ordinario peregrinan m¨¢s de 300.000 personas a Santiago, antes de 1993 "no se pasaba de 20.000", ha recordado el can¨®nigo responsable de las obras. Esto provoca una humedad ambiente que en la ola de calor de este verano, cuando los t¨¦cnicos acordaron cerrar el P¨®rtico al p¨²blico por un d¨ªa, super¨® el 90%. Los especialistas que trabajaron en la restauraci¨®n y monitorizaci¨®n advirtieron que no se pod¨ªa "sobrepasar el 75% de humedad relativa". Con el programa de entradas de pago, podr¨¢n contemplar el P¨®rtico 19 grupos guiados al d¨ªa de 25 personas cada uno, es decir, 475 visitantes. Esta cantidad, al a?o, dar¨ªa una cifra muy superior a aquellas 20.000 almas de otros tiempos, aunque con el control de accesos se evitar¨¢ la masificaci¨®n del p¨²blico y se han instalado sistemas de climatizaci¨®n y monitorizaci¨®n para compensar y vigilar las condiciones ambientales en cada momento.
En los pr¨®ximos meses, y durante un a?o, est¨¢ previsto que este conjunto art¨ªstico que conformaba el n¨¢rtex de la catedral en la Edad Media sea "encapsulado" para protegerlo durante las obras de restauraci¨®n que se acometer¨¢n en el resto del edificio. Despu¨¦s, cuando se retire la protecci¨®n provisional, se instalar¨¢ un nuevo sistema para defender el P¨®rtico del flujo de visitantes y los cambios ambientales que provengan de la iglesia. "Est¨¢n ya varios equipos trabajando en ello", ha adelantado hoy Lorenzo, "tenemos que buscar alguna f¨®rmula para instalar unos geotextiles que se puedan descolgar en los d¨ªas de m¨¢s humedad". El can¨®nigo recuerda que durante las restauraci¨®n, recib¨ªa "llamadas a las horas m¨¢s insospechadas" cuando se disparaban los par¨¢metros por encima de todo l¨ªmite: "Tenemos una crisis de condensaci¨®n", le avisaban. Y eso supon¨ªa que "ten¨ªan que volver a retirar las sales" provocadas por el deterioro de los materiales y "volver a empezar".
Desde que la Barri¨¦ acab¨® su cometido en la catedral, seg¨²n Daniel Lorenzo el templo ha invertido ya en el P¨®rtico unos 165.000 euros. Y en obras en toda la bas¨ªlica, "desde la mitad de 2017, lo que va de 2018 y lo comprometido", se suman ya m¨¢s de 1.154.000 euros. A esto, ha seguido especificando, hay que a?adir los gastos habituales de seguridad (600.000); personal ("casi mill¨®n y medio"), suministros (82.600) o auditor¨ªas (126.000). "Yo nunca dir¨¦ que un concierto de la Real Filharmon¨ªa, que es p¨²blica, en el Auditorio de Galicia, que es p¨²blico, tenga que ser gratis", ha protestado el religioso, remarcando cada palabra con un golpe en la mesa.
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