El espacio art¨ªstico de Palo Alto ser¨¢ m¨¢s p¨²blico que privado
De los casi 7.000 metros cuadrados del complejo de Poblenou, el 55% ser¨¢ de gesti¨®n municipal y el resto de la concesionaria
Hace algo m¨¢s de 20 a?os Ernest Maragall, entonces concejal de Hacienda del Ayuntamiento de Barcelona por el PSC, plasm¨® en un convenio las condiciones de la concesi¨®n privada del complejo Palo Alto a un colectivo de artistas que lideraba Javier Mariscal. Lo que hab¨ªa sido el conjunto de naves de la f¨¢brica textil Ramon Gal y Juan Puigsech, creada en 1875, y que estaba en un estado lamentable tras d¨¦cadas de abandono, fue rehabilitado por iniciativa de una comunidad de artistas, entre ellos Xavier Medina Campeny o Fernando Salas. Mariscal se hab¨ªa instalado en la ¨¦poca preol¨ªmpica a precario antes de que el Ayuntamiento lo expropiara en 1994 con la intenci¨®n de derribarlo dentro del dise?o del Front Mar¨ªtim de Barcelona.
Entonces, Palo Alto estaba en una parte del Poblenou en la que apenas hab¨ªa nada, unas cuantas viviendas, almacenes y solares entre una Diagonal que todav¨ªa no se hab¨ªa abierto y un frente litoral apenas urbanizado. Nada que ver con el panorama actual: un barrio de viviendas, colegios, institutos y centros p¨²blicos y privados vinculados a las industrias creativas. La misma complejidad se ha trasladado al dise?o de la futura etapa de Palo Alto. Si aquel convenio que firm¨® Maragall ten¨ªa apenas tres folios, el documento que se present¨® el pasado mi¨¦rcoles en el plenario de Sant Mart¨ª es m¨¢s prolijo para determinar las bases del concurso que se convocara a finales de a?o para las empresas o entidades interesadas.
El documento Centro de Producci¨®n Art¨ªstica y Cultural Palo Alto entre 2019 y 2033 modifica en algunos puntos la idea inicial del consistorio, decidido a tomar las riendas de un espacio en el que ahora hay instaladas unas 40 empresas, no todas relacionadas con la producci¨®n art¨ªstica y aglutinadas bajo el paraguas de la Fundaci¨®n Palo Alto. De los 7.000 metros cuadrados, el 55% ser¨¢ de gesti¨®n municipal y el restante de la futura concesionaria que lo ser¨¢ por 15 a?os con una pr¨®rroga de cinco m¨¢s. Las condiciones de ese 45% tambi¨¦n se determinan: un 30% (2.100 metros cuadrados) para residencia de empresas art¨ªsticas o de dise?o y un 15% (1.000 metros) a la generaci¨®n de una incubadora empresarial ligada a esos sectores. La duraci¨®n de la residencia de las empresas ser¨ªa de cinco a?os, prorrogables a dos y medio y un m¨¢ximo de 10. Los proyectos seleccionados para la incubadora empresarial tendr¨ªan un alquiler blando por un plazo m¨¢ximo de tres a?os.
Sin casa taller
La delimitaci¨®n del espacio para las empresas que ya funcionan es el objeto de discusi¨®n. ¡°Necesitamos un m¨ªnimo del 50% para asegurar su viabilidad¡±, apunta Toni Clariana, una de las voces de la Fundaci¨®n que ha mantenido contactos con los partidos municipales, afirma que cuenta con el apoyo del PDeCAT, PSC, Ciudadanos y PP. La primera votaci¨®n sobre las bases del concurso se har¨¢ en noviembre dentro de la comisi¨®n de Econom¨ªa del consistorio.
Josep Maria Montaner, regidor del distrito, sostiene la necesidad de preservar las empresas y actividades ya ubicadas en Palo Alto que realmente tienen relaci¨®n con la creatividad: ¡°Con los a?os se han a?adido otras actividades que nada tiene que ver ni con el esp¨ªritu fundacional ni con el futuro que se pretende asegurar¡±. En cuanto a la parte publica, que ocupar¨¢ casi 3.700 metros cuadrados, el 35% se dedicara a proyectos comunitarios de barrio asociados al arte y la cultura, un 10% para los servicios auxiliares y un 10% para futuros usos. El Consistorio ha dejado de lado el proyecto de reservar un 25% del espacio p¨²blico a una casa taller de inclusi¨®n social para personas en situaci¨®n vulnerable: ¡°Esa era la idea inicial pero los vecinos del entorno se oponen y hemos optado por retirarla¡±, precisaba Montaner.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.