Ngugi wa Thiong¡¯o: ¡°Cada lengua es un tesoro de belleza¡±
El c¨¦lebre escritor keniata presenta en el CCCB su cuento ¡®La revoluci¨®n vertical¡¯, traducido a 83 idiomas
Ha regresado Ngugi wa Thiong'o, el gran escritor keniata (Kamirithu, 1938), recurrente candidato al Nobel de Literatura, voz de la ?frica real, de sus gentes, sus culturas, sus lenguas y sus vidas. El reivindicador de la ?frica castigada y silenciada por el colonialismo y el neocolonialismo, el intelectual que no ha dudado en denunciar a los poderosos ¡ªpag¨¢ndolo con la persecuci¨®n, el exilio y la c¨¢rcel¡ª y a muchos prestigiosos personajes de la cultura occidental (Isak Dinesen, Rider Haggard, Nicholas Monsarrat, Elspeth Huxley), que, considera, han denigrado la africanidad y a los africanos. Ngugi ha vuelto a Barcelona (ha visitado la ciudad en varias ocasiones anteriormente) con un libro bajo el brazo, La revoluci¨®n vertical,?un cuento, y para participar en un hermoso acto en el CCCB en el que convers¨® con la editora Laura Huerga, ley¨® fragmentos de su obra y tuvo lugar la actuaci¨®n del coro The Beating Souls que interpret¨® una canci¨®n inspirada por el libro.
La revoluci¨®n vertical, con ilustraciones de Agust¨ªn Comotto, se publica ahora a la vez en seis lenguas del Estado espa?ol, castellano, catal¨¢n y asturiano (por Rayo Verde), euskera (Txalaparta), gallego (Editorial Galaxia) y aran¨¦s (Pag¨¨s editors): una polifon¨ªa que ha hecho las delicias de Ngugi. El libro incluye la versi¨®n original en kikuyu (o gikuyu), la lengua que se ha esforzado en reivindicar el escritor.
El autor de grandes ensayos fundamentales en la reflexi¨®n contempor¨¢nea como Descolonizar la mente (Debolsillo, 2015) y Desplazar el centro (Rayo Verde, 2017), novelas como Un grano de trigo (Debolsillo, 2017) y las maravillosas memorias que arrancan con Sue?os en tiempos de guerra (Rayo Verde, 2016), sus recuerdos de infancia en medio de la cruel guerra de independencia mantenida por el Mau Mau (Ej¨¦rcito Keniano de la Tierra y la Libertad) y Gran Breta?a, habl¨® ayer antes del acto de sus ideas y se reafirm¨® en su amor por las lenguas. tambi¨¦n dijo que el Tirant lo Blanc que alguien le regal¨® en Olot le ha inspirado para escribir su nueva obra ¨¦pica.
¡°Creer que hay una jerarqu¨ªa de las lenguas es como pensar que tu Dios es m¨¢s Dios que el de los otros y eso es muy poco piadoso y muy poco reverente¡±
¡°Hace unos a?os firmamos en esta ciudad la Declaraci¨®n de Barcelona de derechos ling¨¹¨ªsticos, un acontecimiento de eco mundial¡±, record¨®. ¡°Se propugnaba la igualdad de todas las lenguas, grandes y peque?as. Cada persona tiene el derecho a hablar su propia lengua y cada lengua, aunque la hablen muy pocos, tiene derecho a existir. Cada lengua es un tesoro de belleza, historia, conocimiento y posibilidades¡±, recalc¨® Ngugi. ¡°No hay lenguas grandes y peque?as, las lenguas son como instrumentos musicales: el piano no es m¨¢s importante que la flauta. Cada uno tiene su sonoridad ¨²nica y juntos crean una orquesta. Si no conservas tu lengua materna aunque conozcas todas las otras lenguas del mundo vives en una esclavitud. Si las conoces empezando por la tuya eso es empoderamiento¡±.
Ngugi abog¨® por una red de lenguas sin jerarqu¨ªa ni ¡°parasitismo¡±. ¡°Creer que hay una jerarqu¨ªa de las lenguas es como pensar que tu Dios es m¨¢s Dios que el de los otros y eso es muy poco piadoso y muy poco reverente¡±. El escritor record¨® su idea de que ¡°el monoling¨¹ismo es el di¨®xido de carbono de la cultura, y el multiling¨¹ismo el ox¨ªgeno¡±. Dijo que La revoluci¨®n vertical lo escribi¨® como regalo de navidad para su hija. ¡°En mi familia intercambiamos historias y cuentos¡±, se?al¨® y expres¨® su satisfacci¨®n de que ahora ese cuento est¨¦ traducido ya a 83 lenguas y haya dado pie incluso a una exposici¨®n de obras basadas en ¨¦l, y tambi¨¦n a m¨²sica.
Preguntado por si imaginaba que regresar¨ªa ¡°a una Catalu?a con presos pol¨ªticos¡±, no entr¨® al trapo. Dijo que quiere un mundo sin prisiones pero que ¡°no he acabado de entender la situaci¨®n aqu¨ª. Estoy confuso¡±.
¡°La visi¨®n de ?frica de Karen Blixen es racista¡±
Ngugi wa Thiong'o se neg¨® a transigir ni un pelo al preguntarle este diario si no estaba dispuesto a reconsiderar su opini¨®n sobre Isak Dinesen (nom de plume de Karen Blixen), la autora de la tan bella y emotiva Lejos de ?frica. "No niego que amara ?frica y a los africanos, pero a estos los amaba como se ama a animales de compa?¨ªa. Es una magn¨ªfica escritora, no hay duda, pero su visi¨®n de los africanos es racista. Pensaba que los africanos son inferiores. En Sombras de hierba?incluso dice directamente que los africanos tiene el desarrollo mental de un un ni?o europeo de diez a?os. Concede que algunos, los somal¨ªes son un poco mejores que el resto: como adolescentes europeos de 17 a?os. Comprender¨¢n que para m¨ª sea muy dif¨ªcil pensar en Karen Blixen como en una santita". Del hecho de que algunos vean la inmigraci¨®n africana en Europa hoy como una invasi¨®n dijo que es parad¨®jico dado que "los europeos han invadido y ocupado m¨¢s tierras que nadie en el mundo. Si comparamos, el n¨²mero de africanos hoy en Europa es nada" Se?al¨® que "el racismo ciega" y que se olvida que "la modernidad europea se bas¨® en la mano de obra africana". Denunci¨® que Europa consume el 90 % de los recursos de ?frica "y las migajas es lo que se denomina ayuda".
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