Colau reelegida alcaldesa en una tensa investidura con los votos de PSC y Valls

Ada Colau fue reelegida este s¨¢bado alcaldesa de Barcelona gracias a un pacto con el PSC y tres votos de la candidatura de Manuel Valls. En un pleno agrio, plagado de duros reproches entre partidos, y con protestas independentistas en la calle, con semblante muy serio Colau reconoci¨® que no fue la forma en la que le hubiera gustado llegar la alcald¨ªa. Prometi¨® m¨¢s di¨¢logo ¡°para restablecer puentes cuando la pol¨ªtica est¨¢ dividida en bloques¡± y asegur¨® que no ser¨¢ ¡°la alcaldesa de los independentistas ni la de los antindependentistas¡±.

La sesi¨®n estuvo protagonizada por tres factores: el hecho de que Colau haya conseguido revalidar la alcald¨ªa gracias a los votos del ex primer ministro franc¨¦s; el malestar de los independentistas por no conseguir gobernar la capital catalana; y la presencia del ex consejero de Interior Joaquim Forn, en prisi¨®n preventiva su participaci¨®n en la consulta del 1 de octubre. En la calle, miles de personas se concentraron unos para pedir la libertad de Forn, otros para apoyar a Colau y otros para reprocharle los apoyos que la han convertido de nuevo en alcaldesa.

En el Sal¨®n de Cent, el momento m¨¢s tenso fue el recuento de votos de la investidura. Colau logr¨® 21, la mayor¨ªa absoluta. Son los 10 de Barcelona en com¨², 8 del PSC y el de Valls y dos de sus compa?eros, Celestino Corbacho y Eva Parera. Los otros tres ediles de Barcelona pel Canvi - Ciudadanos, optaron por votar en blanco. En 26-M Colau y el candidato de ERC, Ernest Maragall, obtuvieron 10 ediles cada uno, pero los republicanos ganaron por 4.833 votos. El republicano Ernest Maragall logr¨® 15 votos ¡ªlos 10 suyos y los cinco de Junts per Barcelona¡ª mientras los dos ediles del PP votaron a Josep Bou, presidente de su grupo. El 26-M, Colau y Maragall obtuvieron 10 ediles cada uno, pero los republicanos ganaron por 4.833 votos.

M¨¢s all¨¢ de la alcaldesa, el protagonista del Sal¨® de Cent del Ayuntamiento fue el ex consejero de Interior y ahora concejal del consistorio Joaquim Forn, en prisi¨®n preventiva por su participaci¨®n en el refer¨¦ndum del 1 de octubre, declarado ilegal por el Tribunal Constitucional. La entrada y salida de Forn del sal¨®n, as¨ª como su discurso como l¨ªder del grupo municipal de Junts per Barcelona, y todas las alusiones del resto de concejales fueron aplaudidas y acompa?adas de gritos de ¡°libertad¡±. Antes de ser consejero, Forn hab¨ªa sido 17 a?os concejal de CiU.

En su primer discurso como alcaldesa, con semblante muy serio y un hilo de voz, Colau agradeci¨® al PSC el acuerdo de Gobierno y a Valls sus votos. ¡°Que no hemos buscado y hemos reconocido que nos incomodaban¡±. Insisti¨® en abrir las puertas a un gobierno tambi¨¦n con ERC y prometi¨® ¡°cuatro a?os m¨¢s de consolidar las pol¨ªticas valientes y que el cambio se instale en la agenda pol¨ªtica¡±. La alcaldesa asegur¨® que seguir¨¢ ¡°necesitando a la ciudadan¨ªa¡± exigente y asegur¨® que ocupa la alcald¨ªa ¡°con orgullo, firmeza y sin pedir permiso, porque las mujeres hemos venido a mandar y ocupar espacios de poder¡±.

Las intervenciones de los grupos pol¨ªticos evidenciaron la excepcionalidad de la pol¨ªtica en Catalu?a y la complejidad de la f¨®rmula que finalmente ha dado la alcald¨ªa a Colau. Hubo fuego cruzado entre los presidentes de los partidos. Uno de los m¨¢s contundentes fue Forn. Felicit¨® a Colau pero le advirti¨®: ¡°Creo que se ha equivocado al no respetar la lista m¨¢s votada. Todo el mundo sabe c¨®mo ha conseguido los 21 votos de un partido que situaba lo primero que Barcelona no fuera una ciudad independentista. Ha sido una operaci¨®n pol¨ªtica dirigida por los que usted llama los poderosos¡±.

Y quien la noche del 26 de mayo pensaba que iba a ser el alcalde de la ciudad, Ernest Maragall, tambi¨¦n fue dur¨ªsimo: ¡°Ahora ya es una realidad aritm¨¦tica; 21 votos pesan m¨¢s que las convicciones republicanas. Tomamos nota. Solo pedimos que ahora nadie nos diga cu¨¢l debe ser nuestro rol. No necesitamos caricias y no seremos aliados d¨®ciles¡±, advirti¨®. ¡°Que nadie presuma de progresismo si al mismo tiempo no lucha por recuperar la libertad de los presos¡±, a?adi¨®.

Quien ser¨¢ socio de Colau, el socialista Jaume Collboni insisti¨® en que la alianza conseguir¨¢ uno de sus objetivos: ¡°No subordinar la ciudad al proc¨¦s¡±. Tambi¨¦n se refiri¨® a la excepcionalidad pol¨ªtica: ¡°Ninguno de los que estamos aqu¨ª dese¨¢bamos llegar a este punto. Solo desde el respeto mutuo, a las leyes y a la neutralidad de las instituciones podremos salir¡±. Valls, por su parte, justific¨® sus apoyos a Colau: ¡°Hab¨ªa que evitar un alcalde independentista con un candidato que ya lo hab¨ªa anunciado y por eso la hemos votado sin condiciones. Sin nuestra decisi¨®n y el apoyo de Collboni usted no estar¨ªa aqu¨ª¡±, le espet¨®. Tras el pleno, y en la visita protocolaria de todos los concejales a la Generalitat, Valls neg¨® el saludo al president Quim Torra. ¡°Su discurso en el Parlament hablando de m¨ª como una casta fue un esc¨¢ndalo¡±, dijo despu¨¦s.