Catalu?a activa un plan de choque ante la presencia de menores migrantes en la calle

La presencia de j¨®venes migrantes sin v¨ªnculos familiares durmiendo y malviviendo en las calles de Barcelona ha desbordado a la Administraci¨®n catalana. La Generalitat ha desplegado un plan de choque para atender a los centenares de chavales que viven en esta situaci¨®n. Al complejo abordaje del fen¨®meno se une un aumento de la inseguridad en Barcelona y los actos violentos protagonizados ¡ªseg¨²n el Govern¡ª por grupos de extrema derecha contra los migrantes. El Defensor del Pueblo catal¨¢n exigi¨® ayer a la Generalitat una actuaci¨®n urgente.

Decenas de muchachos duermen a diario en el centro de Barcelona y en las monta?as de Montju?c y Collserola. La Generalitat asegura que desde 2016 han llegado a Catalu?a 6.500 menores extranjeros no acompa?ados. Ahora el Departamento de Asuntos Sociales tiene monitorizados dentro del sistema de protecci¨®n a 4.203 j¨®venes, de los que 501 residen en Barcelona. La administraci¨®n catalana admite que no tiene datos de los que viven en la calle y que no est¨¢n dentro del sistema.

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La c¨¦ntrica iglesia barcelonesa de Santa Anna lleva a?os convertida en un observatorio de las personas sin hogar. Su p¨¢rroco, Peio S¨¢nchez, abre las puertas del templo las noches m¨¢s g¨¦lidas del invierno para que los m¨¢s necesitados duerman en los bancos de la iglesia. En verano las abre de 8.00 a 20.00 para todo aquel que necesite ¡°comer, descansar, cargar el m¨®vil, limpiarse o cortase el pelo¡±. Ese ha sido siempre el horario hasta esta semana. ¡°Ahora abriremos a las 8.00 y cerraremos a las 14.00 porque es imposible mantener el control. Siempre hemos acogido a personas sin hogar, pero cada vez son m¨¢s j¨®venes¡±, destaca.

La semana pasada, solo en esta parroquia acogieron a 250 personas de los que m¨¢s de un centenar eran j¨®venes migrantes. ¡°Ahora cerramos antes porque vienen en un estado deplorable. Enseguida recurren a la violencia, viven con adicciones a sustancias tan insalubres como la cola. No estamos preparados para atender casos tan extremos¡±, asegura S¨¢nchez. Es casi la hora de cerrar y cuatro j¨®venes est¨¢n durmiendo sobre bancos de la iglesia de Santa Anna. ¡°Nosotros no podemos hacer gran cosa, somos un observatorio de lo que pasa en esta parte de la ciudad. La soluci¨®n tiene que venir de una respuesta coordinada de las administraciones¡±, asegura el sacerdote. ¡°Son j¨®venes, sin familias que sobreviven trapicheando con droga, robando m¨®viles a turistas¡­ incluso con prostituci¨®n masculina¡±, lamenta.

El n¨²mero de menores en esa situaci¨®n es tan elevado que el Govern puso en marcha ayer un dispositivo para abordar el problema. Entre las medidas acordadas est¨¢ un incremento de horas de los equipos de ¡°psiquiatr¨ªa de calle¡± para que atiendan a j¨®venes ¡°de forma proactiva¡±. Una vez detectados los ¡°ni?os y j¨®venes¡± con problemas de ¡°abuso de t¨®xico y / o mentales¡±, se atender¨¢n en las unidades de agudos de psiquiatr¨ªa adolescente. Por ¨²ltimo, la administraci¨®n mantendr¨¢ reuniones para abordar la situaci¨®n de extrema vulnerabilidad de los menores.