Sangre, sudor y l¨¢grimas por la donaci¨®n de sangre en Madrid

En 2013 la Comunidad de Madrid suscribi¨® con Cruz Roja un convenio para externalizar la donaci¨®n de sangre extrahospitalaria, hasta entonces gestionada directamente por el Centro de Transfusi¨®n. Como consecuencia, el Centro perdi¨® parte de sus funciones p¨²blicas, 65 personas vieron afectados sus puestos de trabajo y la Comunidad comenz¨® a pagar a Cruz Roja 67 euros por bolsa de sangre. La medida se adopt¨® en un contexto de crisis econ¨®mica y fiebre privatizadora ¨Cantes de la sangre, fueron los hospitales, la lavander¨ªa hospitalaria central, el euro por receta, etc¨¦tera-, en el convencimiento de que la colaboraci¨®n del sector privado en la prestaci¨®n de los servicios p¨²blicos es un mecanismo eficaz y eficiente, postulados que s¨®lo pueden defenderse leg¨ªtimamente exigiendo un respeto escrupuloso a las exigencias de transparencia y control previo y posterior.

Los resultados de esta externalizaci¨®n han sido decepcionantes: la Comunidad ha pagado 60 millones de euros a una entidad privada por algo que antes hac¨ªa directamente; y, a pesar del coste, ning¨²n a?o se han alcanzado los objetivos. En total, la prestaci¨®n externalizada ha generado un d¨¦ficit de 120.000 unidades de sangre. Aunque rectificar es de sabios, cuando el error afecta a la gesti¨®n p¨²blica es de h¨¦roes, pues casi nadie y casi nunca se enmiendan decisiones que la realidad desacredita.

En 2013 un grupo de profesionales valientes agrupadas en la Asociaci¨®n de Empleados del Cenro de Transfusi¨®n de Madrid decidi¨® defender el modelo p¨²blico de hemodonaci¨®n ¨Cgratuita, an¨®nima, altruista¨C y, con ello, la plenitud competencial del Centro de Transfusi¨®n y de sus puestos de trabajo. Cuestionaron la transparencia del proceso de elaboraci¨®n del convenio; la existencia de justificaci¨®n suficiente y real; la?inependencia e imparcialidad de las autoridades administrativas que intervinieron en el procedimiento; la racionalidad econ¨®mica y procedencia jur¨ªdica del precio por bolsa de sangre donada; la ineficacia e ineficiencia de mantener un convenio que incumple sistem¨¢ticamente sus presupuestos y objetivos¡­ La Comunidad y el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) rechazaron la reclamaci¨®n sin analizar las cuestiones de fondo, simplemente afirmando que la asociaci¨®n no ten¨ªa derecho a impugnar el Convenio.

Seis a?os despu¨¦s, 60 millones de euros m¨¢s y 120.000 bolsas de sangre menos, la Sentencia de 24 de junio de 2019 del Tribunal Supremo declara que s¨®lo por ignorancia injustificable o, peor a¨²n, malicia procesal, pudieron la Comunidad y el TSJM decidir como decidieron, negando un derecho fundamental y generando dilaciones indebidas. Cruz Roja no queda al margen de estas maniobras pues deliberadamente renunci¨® a defender su papel ¨Csu papel¨®n¨C en este asunto.

La batalla jur¨ªdica por el modelo de la donaci¨®n de sangre contin¨²a a pesar de las demoras intencionadas, las trabas y actuaciones injustificables de servidores p¨²blicos en quienes se presume profesionalidad e imparcialidad. La tutela de los derechos choca a veces con muros y parapetos administrativos que, laboriosamente construidos, exigen mucho tiempo y esfuerzo desmontar. Pero en algunas ocasiones, el tama?o del obst¨¢culo es el mayor incentivo para superarlo. ?ste es, sin duda, uno de estos casos.

Jos¨¦ Ignacio Ju¨¢rez Chicote es miembro de Santiago Mediano Abogados.