La fuerza acompa?a a ¡®Veranos de la Villa¡¯

Nada m¨¢s arrancar los primeros acordes, un suspiro de emoci¨®n invadi¨® al p¨²blico sentado en una loma del parque de Tierno Galv¨¢n. La reconocible banda sonora de Star Wars ¡ªuna selecci¨®n con temas como La marcha imperial o el Princess Leia?s theme¡ª fue la melod¨ªa elegida este a?o para despedir Veranos de la Villa con su ya tradicional Anochecer en el parque, actividad en la que una selecci¨®n de fuegos artificiales danzan y estallan al ritmo de la m¨²sica. Un trabajo que desarrollan la core¨®grafa Cuqui Jerez y el pirot¨¦cnico Jos¨¦ Luis Gim¨¦nez, de Pirotecnia Vulcano.

¡°Ha sido el mejor a?o de todos¡±, resume Maral Kekejian, directora de la cita desde 2016, ¡°se ha afianzado mucho el proyecto no solo con respecto a los n¨²meros sino tambi¨¦n como concepto¡±. A¨²n no han revelado cifras de asistencia. Pero si el a?o pasado cerraron con 110.000 espectadores, un 30% m¨¢s que en 2017; todo apunta a que la presente edici¨®n ¡ªla 34¡ª va a superar ese dato. Anoche, en el Tierno Galv¨¢n no cab¨ªa un alfiler: el p¨²blico empez¨® a llegar sobre las 20.00, dos horas antes del espect¨¢culo, para coger sitio.

El primer a?o, la composici¨®n que despidi¨® Veranos fue El p¨¢jaro de fuego, de Stravinsky. Continuaron con Romeo y Julieta de Prok¨®fiev y Un americano en Par¨ªs, de Gershwin. En esta ocasi¨®n ha sido una selecci¨®n de la m¨²sica compuesta por John Williams para la saga gal¨¢ctica realizada por Cuqui Jerez. ¡°Es una propuesta muy sexy. Algo totalmente diferente¡±, cuenta Jerez que resalta que ¡°casi todo el mundo conecta con los fuegos¡±.

La velada de ayer cerraba dos meses de m¨²sica, danza, teatro, circo, performance, cine, astronom¨ªa, moda y deportes urbanos. Propuestas tra¨ªdas por artistas y colectivos como: Joan as Police Woman, Kadhja Bonet, Tony Allen & Jeff Mills, Cimafunk, Kevin Johansen, Israel Fern¨¢ndez, Xoel L¨®pez, Philippe Quesne, Kronos Quartet, Hiroaki Umeda, Arc¨¢ngel, Locoplaya y Katia Guerreiro. Un total de 41 citas art¨ªsticas en 35 espacios diferentes y que ha surcado los 21 distritos de la capital. Casi el 90% de las propuestas han sido de acceso libre, que no es lo mismo que gratis: ¡°No queremos fomentar la cultura de lo gratis, sino dar acceso a la cultura¡±, explican desde el festival que ha contado con un presupuesto art¨ªstico de algo m¨¢s de medio mill¨®n de euros. Solo tres espect¨¢culos han sido de pago, con precios que oscilaban entre los 12 y los 15 euros.

¡°La gente se desplaza a los barrios a ver espect¨¢culos; lo perif¨¦rico se ha convertido en el eje de Veranos¡±, explica Kekejian. Desde sus inicios, la cita se ha dispersado por toda la ciudad. ¡°Pero no es solo un tema de espacio¡±, apunta la directora, ¡°sino tambi¨¦n de aspiraci¨®n, concepto y discurso: queremos prestar atenci¨®n a los nuevos lenguajes y a toda esa idea de cultura perif¨¦rica¡±.

Esa periferia cultural va del street art a la Zarzuela. ¡°La combinaci¨®n de propuestas menos visibles ha hecho que el discurso de Veranos sea m¨¢s valioso y que tenga m¨¢s potencia¡±, contin¨²a Kekejian, ¡°de alguna manera, se ha establecido una forma de ver y entender la ciudad vinculada a la creaci¨®n cultural¡±.

Aparte de descentralizar el festival y de incluir propuestas fuera del radar de lo mainstream, Kekejian y su equipo se propusieron acercarse a otra audiencia: ¡°Al ir a los barrios tambi¨¦n busc¨¢bamos un p¨²blico perif¨¦rico, ese que a veces no accede tan f¨¢cil a la cultura. Al final Veranos es un festival de servicio p¨²blico¡±.

El pr¨®ximo 30 de septiembre cumple el contrato de Kekejian. El a?o que viene puede que ella y su equipo organicen el festival, o puede que no. ¡°Lo bonito de Veranos es que es un proyecto que ya es de la ciudad. Lleva m¨¢s de 30 a?os y da igual quien lo habite porque siempre va a ser el festival de verano de Madrid¡±, dice Kekejian. Y agrega: ¡°Veranos es un proyecto que hace ciudad y que desarrolla el arte de estar juntos: Veranos es encontrarse¡±.