La restricci¨®n de coches en Barcelona arrancar¨¢ sin nuevos carriles bus

A falta de tres meses para que se aplique el gran veto a los veh¨ªculos contaminantes en Barcelona, los carriles bus metropolitanos prometidos para facilitar la circulaci¨®n de autobuses que entran a la ciudad ni est¨¢n listos ni se les espera. Hace dos a?os, la Generalitat, el ?rea Metropolitana y el Ayuntamiento explicaron los refuerzos de transporte p¨²blico durante los episodios de contaminaci¨®n o cuando el 1 de enero de 2020 se active la Zona de Bajas Emisiones (ZBE). Por ejemplo, ¡°carriles especiales en las entradas en Barcelona por la B-23 y la Gran Via¡±. A¨²n no hay nada de eso. Solo por la Diagonal entran cada d¨ªa 600 buses.

Ya en esa comparecencia de las administraciones hace un par de a?os se hablaba de un carril bus ¡°provisional¡± de entrada a Barcelona por la congestionada B-23 (en el sur, por la Diagonal, desde el Baix Llobregat), habilitado con conos por el Servicio Catal¨¢n de Tr¨¢fico porque la titularidad de la v¨ªa es del Ministerio de Fomento. Pero el carril no se ha hecho, porque la Generalitat est¨¢ pendiente de firmar un convenio con el Gobierno central para asumir la carretera. De hecho, esta obra ya estaba contemplada en 2011 en el Plan Director de Infraestructuras del Transporte P¨²blico 2011-2020 de la ATM. Seg¨²n este proyecto, las obras deber¨ªan acabar el a?o que viene.

El refuerzo anunciado hace dos a?os tambi¨¦n contemplaba que el ?rea Metropolitana de Barcelona (AMB) impulsara ¡°medidas permanentes para mejorar el carril bus de entrada en Barcelona por la Gran Via¡±, entre Bellvitge y la plaza de Espanya, en la C-31. Pero es una obra de dif¨ªcil soluci¨®n, porque la Gran Via discurre encajonada entre pantallas de cemento.

Adem¨¢s de los 600 autobuses que entran cada d¨ªa por la avenida Diagonal de Barcelona, se hacen otros 400 trayectos por la Gran Via desde el Maresme y 908 m¨¢s procedentes de las comarcas del Vall¨¨s. Sin embargo, en las entradas a Barcelona solo existen dos carriles bus metropolitanos.

Una de estas infraestructuras es la fara¨®nica obra del carril Bus-VAO de la C-58, para el tr¨¢fico que entra desde el Vall¨¨s, que recientemente se complement¨® con un carril exclusivo para buses en la Meridiana. Una obra que cost¨® m¨¢s de 100 millones de euros.

El otro carril bus metropolitano es el de la Gran Via, que permite la entrada r¨¢pida de buses que enlazan con la C-31 norte, desde el Maresme. En este caso, sin embargo, est¨¢ pendiente el tramo entre Barcelona y Montgat, donde en hora punta las retenciones se repiten constantemente.

Atrasos en las obras

El ?rea Metropolitana de Barcelona ha declinado hacer comentarios sobre estos atrasos. Y desde la Generalitat, fuentes de Territorio y Sostenibilidad explican que en el caso de la C-31 norte tienen previsto redactar el proyecto del carril hasta Montgat para iniciar las obras en 2022.

El calendario de la B-23 depende de que haya un Gobierno central con plenas funciones y se firme el convenio del traspaso de la v¨ªa. Aqu¨ª, las colas en hora punta por la ma?ana son de entre 20 y 25 minutos, admiten las mismas fuentes, que apuntan que, en el mejor de los escenarios, la obra de un carril para buses podr¨ªa empezar en 2021.

Desde la Plataforma por el Transporte P¨²blico (PTP), su presidente, Ricard Riol, se muestra indignado: ¡°Estamos hartos de excusas, siempre estamos igual. ?A qu¨¦ se dedica la Generalitat? No entiendo qu¨¦ hacen a diario. Se llenan la boca con buses expr¨¦s, duplican trenes, pero en infraestructura son los ¨²ltimos. ?En serio que no se puede movilizar ni un euro?¡±, pregunta.

Con la Zona de Bajas Emisiones en ciernes y las promesas para reforzar el transporte p¨²blico metropolitano sin materializarse, Riol cuestiona ¡°si es que realmente quien manda es el RACC y el coche¡±. ¡°Ellos piden carriles bus de obra, nosotros decimos que no hay tiempo: no se trata de que no entre la gente que entra; se trata de que compartan veh¨ªculo las mismas personas que ahora entran en coche y, as¨ª, entren en menos veh¨ªculos. No es ideolog¨ªa, es un tema de gesti¨®n¡±, lamenta. El presidente de la Plataforma por el Transporte P¨²blico recuerda, adem¨¢s, que en pa¨ªses como Estados Unidos, los carriles prioritarios para transporte p¨²blico se habilitan sin obra, con c¨¢maras y se?alizaci¨®n.