La EMT toma la Gran V¨ªa en defensa del transporte p¨²blico

Desde la medianoche de ayer todos los empleados de la EMT estaban llamados a la huelga. Se trataba de la segunda convocatoria en dos semanas, tras el paro total del 3 de diciembre. Por la tarde, a las 18.00, estaban llamados a manifestarse por la Gran V¨ªa. ¡°Ha sido un ¨¦xito como la otra vez¡±, resum¨ªa Jos¨¦ Ignacio Gonz¨¢lez, secretario general de CC OO de EMT en la cabecera. Los representantes laborales cifraron el apoyo a la huelga en el 100% de la plantilla, los asistentes a la concentraci¨®n ¡°entre los 8.000 y los 10.000¡±.

¡°Almeida ha bloqueado contrataciones y ascensos. Tambi¨¦n privatizado servicios¡±, explicaba Ra¨²l Lara, trabajador de 45 a?os en mantenimiento de la EMT. Los problemas entre el Ayuntamiento y los trabajadores de EMT han ido de mal en peor. A la paralizaci¨®n de un centenar de contrataciones, ya cerradas por el ejecutivo anterior y que ten¨ªan que haber culminado en verano, se unieron el aumento de las quejas de los usuarios, las faltas de servicios o la amenaza de la privatizaci¨®n: Almeida se mostr¨® proclive a externalizar Telef¨¦rico o Bicimad (ambos servicios prestados por EMT). Despu¨¦s, el delegado de Movilidad y Medioambiente, Borja Carabante privatiz¨® el Naviluz, tambi¨¦n prestado por EMT.

¡°Yo soy Naviluz, Naviluz, Naviluz¡±, coreaban en medio de la Gran V¨ªa los trabajadores de la empresa p¨²blica. A ellos se unieron empleados de Metro ¡ªel sindicato Solidaridad Obrera, uno de los siete que hay en el suburbano tambi¨¦n secund¨® la protesta¡ª; taxistas, de la organizaci¨®n Elite; y ciudadanos. ¡°Soy de Vallecas y he venido a la manifestaci¨®n porque el servicio est¨¢ all¨ª peor que en otros barrios¡±, contaba ?ngela, de 69 a?os.

Horas antes, durante los paros, algunos ciudadanos tambi¨¦n se mostraban comprensivos con los trabajadores de EMT: ¡°Nos fastidia pero entendemos sus razones¡±, contaba Dolores Rodr¨ªguez, de 57 a?os desde una parada en la que la espera superaba los 20 minutos. Otros viajeros aguardaron en torno a una hora a su autob¨²s. ¡°Vengo andando desde varias paradas para ir adelantando¡±, se quejaba una mujer de 45 a?os camino de Nuevos Ministerios: ¡°Hay que pedir las cosas pero los que los sufrimos somos los que tenemos que ir a trabajar¡±.

Tanto Carabante como Almeida describieron las protestas como ¡°pol¨ªticas¡±. Por eso dijeron que iban a sentarse a hablar con los representantes laborales hasta que no cesase el conflicto.

¡°Nos esperan cuatro a?os de lucha, compa?eros si este Ayuntamiento quiere atacar el transporte p¨²blico¡±, avis¨® Jaime Merinero, miembro del Comit¨¦ de Empresa. Hablaba a las puertas del palacio de Cibeles, al final de la concentraci¨®n, rodeado de banderas y de petardos, que fueron resonando durante todo el recorrido.

La manifestaci¨®n de ayer culminaban esta tanda de protestas. Los trabajadores decidieron en la ¨²ltima asamblea ¡°dar un respiro a los usuarios¡± e intentar ¡°favorecer el di¨¢logo¡± con el Consistorio. Por eso no van a convocar m¨¢s paros ni concentraciones. Por el momento. Dan hasta el 6 de enero de plazo al Ayuntamiento para abrir el di¨¢logo.