Ver¨®nica Figueroa Huencho: ¡°Nuestro programa de educaci¨®n superior est¨¢ atravesado por la plurinacionalidad¡±
La primera mujer mapuche en llegar a la subsecretar¨ªa de Educaci¨®n plantea que las aulas deben reflejar ¡°los conocimientos de las distintas naciones que conviven en Chile¡±
Cuando Ver¨®nica Figueroa Huencho (47 a?os) era una ni?a, suplicaba en su interior que la profesora no mencionara su segundo apellido, de origen mapuche. Acostumbrada a que lo pronunciara mal, la peque?a se preguntaba por qu¨¦ no pod¨ªa apellidarse Mart¨ªnez mientras sus compa?eros se burlaban de ella. La segunda de seis hermanos nunca escuch¨® a sus padres -un obrero metal¨²rgico y una ama de casa-, hablar en profundidad sobre su identidad ind¨ªgena. Como miembro de la tercera generaci¨®n que emigr¨® de la comunidad de Curacaut¨ªn (Araucan¨ªa), el v¨ªnculo con las ra¨ªces estaba pr¨¢cticamente roto. El descubrimiento personal le lleg¨® como alumna de la universidad p¨²blica. Ahora, la ¨²nica de sus hermanos con un t¨ªtulo, es la primera mapuche en ejercer como subsecretar¨ªa de educaci¨®n superior y no perdona que la nombren sin en el Huencho.
¡°Dado que todo el sistema educativo siempre ha estado dise?ado para la homogeneizaci¨®n de la visi¨®n occdiental, para muchas y muchos de los que pertenecemos a pueblos ind¨ªgenas, el proceso educativo puede ser un poco doloroso. Tiene que ver con las aproximaciones, con los ejemplos que se plantean, con las ridiculizaciones de los compa?eros: ¡®el indio¡¯, ¡®la india¡¯, ¡®lo salvaje¡¯, siempre asociar la premodernidad a los pueblos ind¨ªgenas¡ Eso puede provocar la invisibilizaci¨®n¡±, explica Figueroa Huencho, luciendo un trapelacucha de plata en su despacho en la cuarta planta del Ministerio de Educaci¨®n, decorado con telares y artesan¨ªa mapuche.
A pesar de que celebra c¨®mo se le abri¨® la cabeza a ¡°la problem¨¢tica¡± del pueblo mapuche y al feminismo cuando era estudiante de administraci¨®n p¨²blica de la Universidad de Chile, la principal instituci¨®n del Estado en educaci¨®n superior p¨²blica, tambi¨¦n tiene sus reparos: ¡°Llevamos m¨¢s de 200 a?os con un Estado que ha sido para una sola naci¨®n y las universidades han servido a ese proyecto¡±. Antes de incorporarse al gobierno de Gabriel Boric, llevaba dos d¨¦cadas como acad¨¦mica en su casa estudio. Fue ¡°complejo¡±, reconoce, porque siempre tuvo que disputar los espacios ¡°a un conocimiento occidental, homog¨¦neo, a una forma de relaciones jer¨¢rquicas, y muy patriarcal. El mundo de la universidades, en general, sigue anclado en l¨®gicas machistas, que segregan otras formas de pensamientos que no sean las que est¨¢n en el mainstream¡±, lamenta.
Figueroa Huencho es doctora en Ciencias Administrativas de la universidad ESADE-Ram¨®n Lull y postdoctorada del Centro de Estudios Latinoamericano de la Universidad de Stanford. Dej¨® su cargo de acad¨¦mica para sumarse al proyecto de Boric. ¡°Nuestro programa plantea la reconstrucci¨®n de la educaci¨®n superior con ¨¦nfasis en el fortalecimiento de la educaci¨®n p¨²blica, gratuita y de calidad, de la formaci¨®n t¨¦cnico profesional, nuevas pol¨ªticas de acceso y de permanencia en el sistema educativo. Todo eso est¨¢ atravesado por la plurinacionalidad, no solamente por el g¨¦nero¡±, apunta.
De sonrisa f¨¢cil, la exacad¨¦mica no disimula la ilusi¨®n que le produce haber llegado al ministerio de Educaci¨®n. Para cimentar las bases de la transformaci¨®n durante el Gobierno, plantea, por ejemplo, revisar los programas educativos. ¡°Que se lean autores ind¨ªgenas, que cuestionemos la historia desde lo ind¨ªgena. Pero por sobre todo tenemos que avanzar hacia la interculturalidad. Si queremos romper las l¨®gicas coloniales es necesario que el trabajo en el aula refleje que los conocimientos de las distintas naciones que conviven en Chile dialogan en igualdad de condiciones¡±, afirma¡°.
La subsecretar¨ªa de educaci¨®n superior ha llegado al cargo en un momento complejo: alumnos afectados psicol¨®gicamente tras dos a?os de encierro debido a la pandemia, marchas estudiantiles marcadas por episodios violentos y un contexto econ¨®mico complejo para llevar adelante ¡°la reforma del sistema¡±. ¡°Cada una de las medidas que estamos tomando en educaci¨®n superior las analizamos en su contexto, pero no estamos poniendo en juego nuestros compromisos de Gobierno¡±, aclara. ¡°Estamos repensando c¨®mo podemos alcanzarlos de la manera m¨¢s responsable, con la austeridad que corresponde, pero siempre escuchando a la ciudadan¨ªa¡±, agrega.
Uno de los compromisos de campa?a de Boric fue condonar las deudas a los estudiantes que se han endeudado de por vida con la banca para pagar sus carreras. ¡°La condonaci¨®n es parte de un redise?o del sistema de financiamiento de la educaci¨®n superior. Eso se tiene que hacer con ciertos criterios de justicia y progresi¨®n, ya que los deudores tienen realidades distintas¡±, apunta Figueroa Huencho. ¡°Estamos en un contexto de austeridad fiscal. Debemos planificar muy bien c¨®mo vamos a asumir, con responsabilidad, esa condonaci¨®n. En ese dise?o estamos trabajando¡±.
La coautora del libro Wallmapu. Ensayos sobre plurinacionalidad y nueva Constituci¨®n (Pehu¨¦n, 2020) no quiere referirse a si los contenidos que se est¨¢n discutiendo en la Convenci¨®n Constituyente avanzan en la direcci¨®n que propone, pero destaca la importancia de los 17 esca?os reservados a los representantes de los pueblos originarios [de un total de 155; el 13% de la poblaci¨®n se declara ind¨ªgena], lo que ha permitido que expongan sus ¡°principios, derechos, miradas¡±. ¡°Eso es tremendamente esperanzador para los pueblos que hemos estado permanentemente negados a esos espacios¡±, describe.
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