Doncella del mar y la niebla
El nombre que se le dio al nuevo anf¨ªpodo descubierto en la Fosa de Atacama, ¡®Dulcibella camanchaca,¡¯ es una manera de honrar las alegor¨ªas y misterios de un territorio compartido
¡°Porque el caballero andante sin amores era ¨¢rbol sin hojas y sin fruto y cuerpo sin alma¡±, se convence a s¨ª mismo don Quijote de la Mancha mientras bautiza a su doncella imaginaria como Dulcinea del Toboso, ¡°nombre, a su parecer, m¨²sico y peregrino y significativo¡±. Cual musa, Dulcinea ha inspirado un sinn¨²mero de creaciones art¨ªsticas: piezas musicales, poemas, pinturas, entre otras. Es met¨¢fora de amores on¨ªricos, y su nombre cervantino evoca vida y lozan¨ªa, pero tambi¨¦n lo inalcanzable.
A unos ocho kil¨®metros de profundidad frente a las costas del desierto de Atacama, se ha descubierto una nueva especie de crust¨¢ceo ¡ªun anf¨ªpodo¡ª al que los investigadores han dado el nombre de Dulcibella camanchaca. Inicialmente, el nombre Dulcinea hab¨ªa sido propuesto para este ejemplar hembra, en homenaje al personaje de Cervantes- Sin embargo, un insecto sudafricano ya ostentaba dicho t¨ªtulo. Conservando la esencia de la inspiraci¨®n original, se eligi¨® Dulcibella, evocando el arquetipo de la mujer dulce y bella en la literatura inglesa medieval.
Este habitante de las profundidades, de cuerpo albo, esbelto y ¨¢gil, encarna tanto la idealizaci¨®n de la dama quijotesca como la refinada feminidad de los relatos rom¨¢nticos albi¨®nicos. Sin embargo, sus mand¨ªbulas y ap¨¦ndices frontales, dise?ados para atrapar y desgarrar a sus presas, revelan su naturaleza de depredadora: una vampiresa en la oscuridad hadal.
La segunda parte de su nombre rinde homenaje al entorno de su hallazgo. Aqu¨ª, el viento sur impulsa fr¨ªas aguas desde las profundidades hacia la superficie, en un fen¨®meno conocido como surgencia costera. Estas aguas, al enfrentarse con la intensa radiaci¨®n solar, se transforman en una densa niebla conocida como ¡°camanchaca¡±. Su origen etimol¨®gico es incierto, aunque navegantes antiguos que recalaron en estos territorios lo emplearon para referirse a un grupo humano que habitaba la costa nortina de Chile hasta finales del siglo XIX.
El t¨¦rmino ¡°camanchacas¡± ¡ªpersonas de la niebla¡ª abre nuevas interpretaciones sobre los pueblos originarios de la costa des¨¦rtica, reforzando un sentido de pertenencia a trav¨¦s de un v¨ªnculo simb¨®lico con esta caracter¨ªstica et¨¦rea del territorio que, al ser filtrada por la cordillera de la Costa, genera en sus laderas la presencia de agua dulce, posibilitando la vida humana en la costa del desierto m¨¢s ¨¢rido del mundo.
Desconocemos el origen exacto del t¨¦rmino, pero sabemos que enfrentarse a la camanchaca en el horizonte compartido de pampa y mar es una experiencia est¨¦tica que moldea la subjetividad de quienes habitaron estos territorios hace milenios y de quienes los habitan hoy. Este desierto y su maritorio, llenos de vida e historias, se convierten en un paisaje po¨¦tico, saturado de met¨¢foras y significados.
Nombrar cient¨ªficamente a nuevas especies es una manera de honrar las alegor¨ªas y misterios de un territorio compartido, revelando los secretos que yac¨ªan ocultos tras la bruma, que ahora prestan su nombre a este nuevo anf¨ªpodo de la Fosa de Atacama. Estas historias entrelazadas logran disipar la camanchaca ¡ªt¨¦rmino aimara para ¡°oscuridad¡±¡ª y traer a la luz algunos secretos de ese universo creativo que nos inspira y nos hace m¨¢s humanos. Y aunque Dulcinea del Toboso parece no haber conocido el oc¨¦ano, ?tendieron don Quijote y Sancho la vista por todas partes: vieron el mar, hasta entonces de ellos no visto?. Cervantes narra tambi¨¦n c¨®mo don Quijote se queja de la falta de un caballero que ?con intr¨¦pido coraz¨®n se arroje en ¨¦l, entreg¨¢ndose a las implacables olas del mar profundo, que ya le suben al cielo y ya le bajan al abismo?. Hoy, sin embargo, no s¨®lo caballeros intr¨¦pidos se sumergen en las zonas m¨¢s profundas del planeta: Rocinantes sin jinetes ¡ªveh¨ªculos aut¨®nomos de exploraci¨®n¡ª son enviados en busca de seres desconocidos, para que cient¨ªficos los estudien, describan y nombren. Por ahora, la gran novela de las expresiones de la vida en la Tierra sigue inconclusa.
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