Dentro de los laboratorios de alto secreto que prueban las vacunas contra la covid
El veterinario espa?ol Javier Salguero investiga con monos y otros animales en el complejo militarizado de Porton Down, en el sur de Inglaterra
Desde el imponente monumento prehist¨®rico de Stonehenge, en el sur de Inglaterra, solo hace falta caminar 10 kil¨®metros en l¨ªnea recta para llegar a Porton Down, un complejo cient¨ªfico muy conocido, parad¨®jicamente, por sus experimentos ultrasecretos. Detr¨¢s de sus alambradas se encuentran los laboratorios DSTL del Ministerio de Defensa, creados en 1916 para investigar las nuevas armas qu¨ªmicas ¡ªcomo el gas mostaza¡ª con las que los alemanes intentaban ganar la Gran Guerra. Ya durante la Segunda Guerra Mundial, los cient¨ªficos de Porton Down cruzaron otra l¨ªnea roja y crearon bombas biol¨®gicas con esporas de ¨¢ntrax maligno, hoy prohibidas y jam¨¢s utilizadas en combate. Desde entonces, las investigaciones han sido tan confidenciales que el propio Gobierno brit¨¢nico desmiente en su web las teor¨ªas m¨¢s disparatadas: ¡°Ning¨²n alien¨ªgena, vivo o muerto, ha sido jam¨¢s llevado a Porton Down¡±.
El veterinario espa?ol Javier Salguero (Badajoz, 1974) trabaja desde hace dos a?os en la otra gran instituci¨®n del complejo de alta seguridad de Porton Down: la agencia gubernamental de salud p¨²blica Public Health England, con miles de peque?os animales de experimentaci¨®n y al menos un centenar de monos. ¡°Somos dos entidades diferentes, pero colaboramos con el laboratorio de Defensa en muchos proyectos. Por ejemplo, en vacunas para el ¨¦bola y el ¨¢ntrax, ante posibles casos de bioterrorismo. Y tambi¨¦n est¨¢bamos trabajando con ellos justo antes de la covid con otro coronavirus, el del s¨ªndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS)¡±, explica Salguero, en conversaci¨®n telef¨®nica con este diario.
El programa de armas qu¨ªmicas y biol¨®gicas de Porton Down fue una amenaza para la humanidad hasta su clausura en la d¨¦cada de 1950, pero hoy el complejo ofrece una esperanza de salvaci¨®n ante la peste de la covid. Salguero y sus compa?eros ensayan vacunas y tratamientos experimentales en hurones y monos, a los que infectan con el nuevo coronavirus dentro de laboratorios de alta seguridad biol¨®gica. Embutido en un traje protector con respirador aut¨®nomo, el veterinario disecciona los macacos en busca de la soluci¨®n a la pandemia.
Salguero utiliza una triple capa de guantes de nitrilo y de kevlar anticorte. Todos los trabajadores tienen presente lo que ocurri¨® en Porton Down el 5 de noviembre de 1976. Aquel d¨ªa, el cient¨ªfico Geoffrey Platt estaba trabajando con cobayas infectadas con un nuevo virus letal aislado de muestras de enfermos llegadas de Sud¨¢n. Entorpecido por su traje de protecci¨®n, Platt hizo un movimiento brusco y se pinch¨® el dedo pulgar con una jeringuilla contaminada. A los seis d¨ªas, el investigador empez¨® a tener fiebre y fue trasladado urgentemente a un hospital de Londres con escolta policial. Tras una semana al borde de la muerte, con 40 grados de temperatura corporal y diarreas y v¨®mitos sangrientos, Platt resucit¨®. El virus del accidente de Porton Down era el ¨¦bola. ¡°Siempre analizamos qu¨¦ puede ocurrir y nos ponemos en lo peor. Para cada posible problema siempre tenemos tres soluciones diferentes. Si falla una, sabes que tienes otras dos. Nunca hemos tenido un escape ni nada de eso¡±, afirma Salguero.
Cada animal que entra en Porton Down sale incinerado. ¡°Yo soy veterinario. Cuando haces la carrera, lo que quieres preservar es la vida de los animales. Es muy complicado para m¨ª saber que con la experimentaci¨®n terminas con la vida de algunos de ellos¡±, reflexiona. ¡°Yo no quiero convencer a nadie de lo que es bueno o malo. Es un tema bastante complejo, pero si explicas que, en ciertos ensayos, se han utilizado 50 o 100 animales y has salvado la vida de cinco millones de ni?os, puedes ver un poco el beneficio¡±, argumenta.
Los cient¨ªficos de Porton Down han probado en sus monos vacunas experimentales como la de la Universidad de Oxford, la m¨¢s adelantada de los casi 150 prototipos que hay en el mundo. Los resultados en los macacos han sido inquietantes: los animales vacunados no desarrollaron neumon¨ªa, pero s¨ª ten¨ªan coronavirus en sus v¨ªas respiratorias. La vacuna podr¨ªa frenar la forma m¨¢s grave de la enfermedad, pero no la transmisi¨®n del pat¨®geno de una persona a otra. ¡°Esto ocurre con much¨ªsimas vacunas. Si vacunas a los animales pero luego los inoculas por m¨²ltiples v¨ªas con una dosis alt¨ªsima del virus, es bastante complicado que haya una parada total de la infecci¨®n¡±, tranquiliza Salguero. ¡°La protecci¨®n total en este modelo animal es muy dif¨ªcil de conseguir, pero puede que s¨ª se consiga en humanos. Las personas no se infectan con dosis alt¨ªsimas ni por v¨ªa intratraqueal¡±, subraya. La Universidad de Oxford y la farmac¨¦utica brit¨¢nica AstraZeneca ya han comenzado un ensayo cl¨ªnico para probar la vacuna en m¨¢s de 15.000 personas voluntarias en Reino Unido, Brasil y Sud¨¢frica.
La mayor preocupaci¨®n de Salguero es ¡°evitar a toda costa¡± cualquier efecto t¨®xico de unas vacunas que se van a obtener en tiempo r¨¦cord. ¡°Esto ocurri¨® en las vacunas del virus respiratorio sincitial hace muchos a?os y no queremos que pase nada parecido con esta enfermedad¡±, se?ala. En 1966, dos ni?os fallecieron tras participar en el ensayo de una prometedora vacuna experimental contra el virus respiratorio sincitial, el principal causante de infecciones pulmonares en los beb¨¦s. La vacuna agravaba la enfermedad en vez de impedirla. Y esta paradoja tambi¨¦n se observ¨® en 2012 en ratones con una vacuna experimental contra el virus del s¨ªndrome respiratorio agudo grave (SARS), otro coronavirus hermano del actual. ¡°Estamos estudiando a fondo el hecho de que pueda existir esta posibilidad en la covid-19¡±, recalca Salguero.
Salguero y sus colegas intentan ¡°evitar a toda costa¡± cualquier riesgo de toxicidad de las vacunas experimentales contra la covid
El veterinario espa?ol se especializ¨® en anatom¨ªa patol¨®gica en la Universidad de C¨®rdoba, donde conoci¨® a su hoy esposa en una sala de necropsias repleta de cad¨¢veres de caballos, cerdos y perros. ¡°Son sitios muy interesantes, la gente se relaja mucho y puedes hablar de cualquier cosa. Tambi¨¦n ocurre en los quir¨®fanos¡±, cuenta Salguero. Reci¨¦n terminado el doctorado en 2001, se curti¨® en el Centro de Investigaci¨®n en Sanidad Animal (CISA), un laboratorio gubernamental de alta seguridad biol¨®gica situado en Valdeolmos, a 40 kil¨®metros de Madrid. All¨ª no hay monos, pero est¨¢n acostumbrados a trabajar con grandes especies, como caballos con peste equina y cerdos con peste porcina africana.
Salguero recuerda que, tras los atentados del 11 de septiembre de 2001, empezaron a llegar cartas con esporas de ¨¢ntrax maligno a pol¨ªticos y periodistas de EE UU y tambi¨¦n aparecieron en Espa?a sobres con polvos blancos, que acabaron en sus manos en el laboratorio de Valdeolmos. ¡°Casi todo eran polvos de detergente. Hay gente para todo¡±, recuerda entre risas.
La inexistencia en Espa?a de unas instalaciones como las de Porton Down, con macacos de experimentaci¨®n en laboratorios de alta bioseguridad, es uno de los principales cuellos de botella a los que se enfrentan los cient¨ªficos espa?oles que intentan desarrollar vacunas contra la covid. El vir¨®logo Mariano Esteban, del Centro Nacional de Biotecnolog¨ªa, afirma que en EE UU le han pedido entre medio mill¨®n y un mill¨®n de d¨®lares por 12 monos. ¡°Mantener una colonia de macacos en estos laboratorios es car¨ªsimo. En Espa?a se tom¨® la decisi¨®n hace mucho tiempo de que esto no era prioritario. En otros pa¨ªses, como Francia, Alemania y Holanda, tienen varios centros. En Espa?a no tenemos y es mucho m¨¢s complicado hacer una prueba de vacunas en este modelo animal¡±, lamenta Salguero. En Porton Down hay una cola de meses para poder contratar un estudio con macacos.
Salguero, profesor visitante en la Universidad de Surrey, tambi¨¦n es miembro del grupo de expertos de la OMS en modelos animales para investigar la covid. Desde la primera l¨ªnea de la batalla cient¨ªfica contra la enfermedad, es optimista. ¡°Yo creo que se van a distribuir varias vacunas de diferentes pa¨ªses. Y alguna puede que est¨¦ incluso durante el a?o 2020¡±, opina. ¡°?Es posible que haya una vacuna espa?ola? Pues s¨ª, pero yo creo que la primera vacuna que se va a manufacturar y distribuir a gran escala va a ser china, porque l¨®gicamente est¨¢n haciendo muchos experimentos desde semanas antes que el resto del mundo. Al principio habr¨¢ varias vacunas diferentes y la investigaci¨®n continuar¨¢ durante varios a?os, hasta que al final puede que s¨ª que haya una ¨²nica vacuna magn¨ªfica¡±, predice el veterinario.
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