La irresponsabilidad de imponer un modelo renovable a gran escala
Los autores defienden ir m¨¢s despacio con la planificaci¨®n de los proyectos e¨®licos y fotovoltaicos para evitar que el rechazo social haga fracasar ¡°la necesaria transici¨®n energ¨¦tica¡±
Leyendo la defensa a ultranza de las energ¨ªas renovables a gran escala que hace Xavier Pastor, el exdirector de Greenpeace, en su tribuna del pasado 12 de mayo en esta misma secci¨®n, desde la Alianza Energ¨ªa y Territorio (Aliente) consideramos que la sociedad espa?ola merece un debate profundo, maduro y honesto sobre su futuro energ¨¦tico que, adem¨¢s de las innegables virtudes de las renovables, tenga en cuenta sus limitaciones e impactos, huyendo de discursos simplistas y maniqueos. Sirva esta r¨¦plica para exponer nuestra visi¨®n e iniciar el necesario di¨¢logo.
Quienes reclamamos desde hace d¨¦cadas la sustituci¨®n del carb¨®n, el petr¨®leo y el ¨¢tomo por fuentes m¨¢s limpias como el viento y el sol, compartimos un mismo objetivo que ya ha dejado de ser ut¨®pico. Por fin se dan las circunstancias para crear un nuevo modelo de gesti¨®n energ¨¦tica, m¨¢s completo y ambicioso, que adem¨¢s de cambiar de tecnolog¨ªa de generaci¨®n, considere las particularidades de las fuentes renovables. En este sentido es fundamental analizar los impactos de la red de tendidos el¨¦ctricos y de las plantas energ¨¦ticas a gran escala, la dependencia de recursos no renovables, el reparto de costes y beneficios, o los efectos reales sobre la poblaci¨®n local. Esta mirada m¨¢s amplia obliga a priorizar el ahorro y la eficiencia como pilares del nuevo modelo, tal y como insta la Uni¨®n Europea a trav¨¦s del Paquete de Invierno.
Una de las grandes ventajas de las renovables es que el viento y el sol se dan en todas partes, lo que permite generar energ¨ªa donde se necesita, abriendo el camino a soluciones como el autoconsumo, a pesar de que la planificaci¨®n energ¨¦tica del Ministerio para la Transici¨®n Ecol¨®gica, sorprendentemente, no cuantifica este enorme potencial. Como ejemplo, las ¨²ltimas estimaciones de la Generalitat en Catalu?a establecen que el potencial fotovoltaico de los tejados podr¨ªa cubrir el 50% de la electricidad consumida en su territorio, o las del Observatorio de Sostenibilidad, que cifra este potencial para 2025 en 26 gigavatios (GW) a nivel estatal. Aprovecharlo permitir¨ªa una mayor democratizaci¨®n de la energ¨ªa y la reducci¨®n de las necesidades de la red de tendidos de alta tensi¨®n.
Las renovables nos brindan la gran oportunidad de aplicar el concepto ¡°kil¨®metro cero¡± a un nuevo modelo energ¨¦tico realmente sostenible, eficiente y generador de empleo y riqueza a nivel local. En cambio, la tribuna antes mencionada defiende continuar con un modelo centralizado, a la medida de las grandes empresas del sector y los fondos de inversi¨®n internacionales, en el que s¨®lo cambian el petr¨®leo por renovables a gran escala. Utilizan nuestras emergencias, la clim¨¢tica y la econ¨®mica, como excusa para justificar un negocio, ahora pintado de verde, que adem¨¢s de no solucionar la crisis clim¨¢tica, agudizar¨¢ otros problemas de la crisis global que vivimos, como la p¨¦rdida de biodiversidad y el despoblamiento rural. Larry Fink, consejero delegado de BlackRock, la mayor gestora de fondos del mundo, describe en pocas palabras esta visi¨®n: ¡°La transici¨®n clim¨¢tica es una oportunidad de inversi¨®n hist¨®rica¡±. Con esta declaraci¨®n de intenciones, ?no estaremos entrando en una nueva burbuja especulativa que acabaremos pagando la ciudadan¨ªa?
Por eso, lo ocurrido hace unos d¨ªas en Catalu?a no es una manifestaci¨®n contra las energ¨ªas renovables, sino una defensa de la verdadera oportunidad que representan. Lo que buscan las moratorias temporales ¡ªconsideradas irresponsables por Xavier Pastor¡ª no es frenar ni obstaculizar, sino dedicar un momento a pensar, evaluar y planificar un nuevo modelo realmente transformador. Se trata de evitar que las prisas y la falta de planificaci¨®n por parte de las administraciones se lleven por delante territorios ricos en biodiversidad, suelo cultivable y sectores productivos sostenibles, que ya est¨¢n contribuyendo al desarrollo rural, la lucha contra la despoblaci¨®n y la conservaci¨®n de espacios naturales, ahora amenazados por el despliegue al galope de macroproyectos energ¨¦ticos invasivos, con sus aerogeneradores, paneles solares, pistas de acceso, subestaciones y tendidos el¨¦ctricos.
Quiz¨¢ la irresponsabilidad sea imponer este modelo de renovables a gran escala, lo que va a provocar que la necesaria transici¨®n energ¨¦tica acabe en fracaso. Imponer este modelo, sin planificaci¨®n ni participaci¨®n p¨²blica est¨¢ provocando una tremenda reacci¨®n social, creciente en muchos territorios, que desembocar¨¢ en largos procesos judiciales, debido a la dudosa legalidad de muchos proyectos. Estos procesos retrasar¨¢n la transici¨®n energ¨¦tica mucho m¨¢s tiempo del que llevar¨ªa acordar un nuevo modelo.
Por otra parte, no puede considerarse ¡°temporal¡± el da?o producido durante los 30 a?os de vida ¨²til de un macroparque e¨®lico o fotovoltaico. Muchas especies animales y vegetales ver¨¢n reducidas dr¨¢sticamente sus ¨¢reas de distribuci¨®n y a causa de la mortalidad directa, tambi¨¦n sus poblaciones. Algunos grupos faun¨ªsticos que ya enfrentan situaciones cr¨ªticas no sobrevivir¨¢n. El apoyo un¨¢nime de 271 investigadores al posicionamiento sobre biodiversidad de Aliente respalda claramente la conclusi¨®n de que el da?o ser¨¢ irreversible, sin una planificaci¨®n previa a la instalaci¨®n de plantas renovables.
Desde Aliente, 140 entidades de todo el estado alzamos la voz para que no se desaproveche la oportunidad ¨²nica que representan las renovables. Porque algo estaremos haciendo mal si la transici¨®n energ¨¦tica nos lleva a destruir patrimonio natural y cultural con instalaciones industriales, para s¨®lo conseguir la mitad del objetivo de reducci¨®n de emisiones necesario para evitar un desastre clim¨¢tico irreversible.
Nuestra alternativa es la m¨¢s eficaz para combatir la emergencia clim¨¢tica, porque tiene en cuenta los l¨ªmites del planeta, no necesita el sacrificio de territorios y no deja por el camino ninguna forma de vida. Renovables s¨ª, pero no as¨ª. ?Lo hablamos?
Luis Bolonio, ?lvaro Campos y Delf¨ªn Mart¨ªn pertenecen a la organizaci¨®n Alianza Energ¨ªa y Territorio (Aliente).
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