Ant¨®nio Guterres: ¡°El mundo no ser¨¢ capaz de utilizar todo el petr¨®leo y el gas que ya est¨¢n descubiertos¡±

El G-7, el grupo de pa¨ªses m¨¢s industrializados del planeta, celebra desde este viernes una importante cumbre de la que se espera que salga un hist¨®rico acuerdo fiscal para fijar un impuesto m¨ªnimo de sociedades. En esta reuni¨®n presencial, que durar¨¢ tres d¨ªas y que se celebrar¨¢ en Cornualles (Reino Unido), participar¨¢ Ant¨®nio Guterres (Lisboa, 72 a?os), secretario general de Naciones Unidas. Guterres quiere trasladar a los l¨ªderes del G-7 ¡ªAlemania, Canad¨¢, Estados Unidos, Francia, Italia, Jap¨®n y Reino Unido¡ª dos mensajes claros: la necesidad de que se garantice la vacunaci¨®n contra la covid-19 a todos los habitantes del planeta y la obligaci¨®n que tienen los pa¨ªses m¨¢s desarrollados de cumplir con sus promesas econ¨®micas para que las regiones m¨¢s pobres puedan combatir los efectos del calentamiento global.

¡°Es una cuesti¨®n de justicia¡±, sostiene sobre esa ayuda clim¨¢tica que deben prestar los pa¨ªses desarrollados. ¡°Si miramos los impactos actuales del cambio clim¨¢tico, ya son los pa¨ªses en desarrollo, los pa¨ªses africanos, las peque?as islas Estado, los que est¨¢n pagando un precio m¨¢s elevado¡±, se?ala en una entrevista por videoconferencia concedida a EL PA?S, el diario brit¨¢nico The Guardian y la cadena estadounidense NBC News dentro del proyecto Covering Climate Now, un consorcio de medios internacionales creado para impulsar la informaci¨®n sobre cambio clim¨¢tico en el mundo. ¡°Es justo que haya una compensaci¨®n por los impactos que ya existen y que son dram¨¢ticos¡±, a?ade sobre un problema cuyos responsables hist¨®ricos son los pa¨ªses m¨¢s ricos.

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Esas promesas de ayuda a las zonas en desarrollo estaban incluidas en el Acuerdo de Par¨ªs, firmado en diciembre de 2015, que no solo busca que el ya irreversible aumento de la temperatura se quede dentro de los m¨¢rgenes menos catastr¨®ficos. Tambi¨¦n persigue que los Estados m¨¢s ricos ayuden a los m¨¢s pobres a reducir sus emisiones y adaptarse a los impactos del calentamiento. El compromiso era que desde los pa¨ªses con m¨¢s recursos se movilizaran anualmente 100.000 millones de d¨®lares a partir de 2020. ¡°Eso no ha sucedido¡±, sostiene Guterres. ¡°A¨²n tenemos necesidad de incrementar los compromisos de financiaci¨®n de los pa¨ªses desarrollados en la parte p¨²blica, sin hablar de la privada, en entre 20.000 y 30.000 millones de d¨®lares¡±, asegura el secretario general de la ONU.

Averiguar el nivel de financiaci¨®n al que se ha llegado es realmente complicado y genera mucho debate. La OCDE, que representa los intereses de los pa¨ªses donantes, difundi¨® un estudio a finales de 2020 en el que aseguraba que en 2018 se hab¨ªan alcanzado los 78.900 millones de d¨®lares de financiaci¨®n clim¨¢tica; para conocer el balance de 2020 esta organizaci¨®n dijo que habr¨ªa que esperar hasta 2023. Pero en esa cantidad se incluyen ayudas p¨²blicas directas, pr¨¦stamos de todo tipo, inversiones privadas... Y un informe de la ONG Oxfam tambi¨¦n de finales del pasado a?o rebajaba mucho el valor real de estas ayudas ¡ªhasta los 20.000 millones de d¨®lares¡ª si se tiene en cuenta solo las subvenciones directas y se eliminan los pr¨¦stamos de ese balance.

¡°El problema est¨¢ en la clarificaci¨®n de c¨®mo es la contribuci¨®n de la parte privada, pero el informe de la OCDE, que es una instituci¨®n cre¨ªble, aunque es un club de los pa¨ªses ricos, demuestra que estamos a¨²n lejos de cumplir lo que ha sido prometido y que es necesario clarificar la forma en la que el compromiso de Par¨ªs ser¨¢ cumplido¡±, sostiene Guterres. Eso es exactamente lo que reclamar¨¢ a los l¨ªderes del G-7: que aclaren ¡°la forma en la que se van a movilizar los 100.000 millones de d¨®lares al a?o para mitigaci¨®n y tambi¨¦n para la adaptaci¨®n¡±.

¡°Los pa¨ªses en desarrollo son los que est¨¢n pagando un precio m¨¢s elevado por el cambio clim¨¢tico¡±

Que lleguen los fondos prometidos es una cuesti¨®n de ¡°justicia¡±, pero tambi¨¦n es una v¨ªa para ¡°restablecer la confianza entre los pa¨ªses desarrollados y las econom¨ªas emergentes¡±. ¡°No es suficiente con que los pa¨ªses desarrollados se comprometan a alcanzar las emisiones netas cero [que se emita solo el CO? que pueden capturar los sumideros, como los bosques] en 2050, como lo est¨¢n haciendo. Es necesario que las econom¨ªas emergentes tambi¨¦n lo hagan. Pero para hacerlo es absolutamente esencial restablecer la confianza con esas econom¨ªas emergentes y demostrar que el mundo desarrollado va a cumplir sus compromisos financieros¡±. Y a?ade: ¡°Sin el restablecimiento de esta confianza no ser¨¢ f¨¢cil para las econom¨ªas emergentes comprometerse a lograr las emisiones netas cero y ese compromiso es esencial. Sin China, sin India, sin Brasil, sin Sud¨¢frica, sin Indonesia, sin estos pa¨ªses no lograremos la neutralidad de carbono en 2050¡å.

El secretario general de la ONU aplaude la vuelta de Estados Unidos a la lucha clim¨¢tica y las nuevas metas de ese pa¨ªs de reducci¨®n de sus emisiones. ¡°Representan un desarrollo extremadamente importante porque ahora tenemos alrededor del 70% de las emisiones globales cubiertas por compromisos de emisiones cero netas¡±. Pero sostiene que EE UU debe hacer un esfuerzo mayor, precisamente, en financiaci¨®n clim¨¢tica: ¡°Necesita ir claramente por encima, yo dir¨ªa, m¨¢s del doble de los compromisos que ya ha asumido¡±.

Precio al CO? y financiaci¨®n del carb¨®n

Guterres cree que el pacto fiscal que se prev¨¦ que se cierre en esta cumbre ¡°es un paso en la buena direcci¨®n¡±. ¡°Es inaceptable verificar que algunas de las grandes empresas multinacionales, sobre todo en las ¨¢reas tecnol¨®gicas, pr¨¢cticamente no pagan impuestos cuando sus beneficios han subido de una forma brutal con la pandemia¡±, a?ade el m¨¢ximo responsable de la ONU. Pero, adem¨¢s, cree que este pacto puede abrir la puerta para que se fije un precio al di¨®xido de carbono internacional, es decir, un instrumento que grave las emisiones. ¡°Espero que sea posible un acuerdo internacional antes de la COP26 en Glasgow [la cumbre clim¨¢tica que se celebra en noviembre en la ciudad escocesa]. Y que en la COP26 sea posible un acuerdo sobre el art¨ªculo 6 del Acuerdo de Par¨ªs para permitir la creaci¨®n global de un mercado de carbono¡±, algo que no se consigui¨® en la cumbre de Madrid en 2019.

Guterres aboga por poner en marcha medidas para que ese ¡°precio al carbono e incluso un impuesto sobre el carbono¡± sean ¡°fiscalmente neutros¡±. ¡°Es necesario crear un impuesto para el carbono pero tambi¨¦n reducir sobre todo los impuestos sobre la renta que tienen que ver con el trabajo, con los salarios. Si las dos cosas se hacen al mismo tiempo, es posible que haya una aceptaci¨®n por parte de la sociedad. Si uno solo grava el carbono, puede haber rechazo, es necesario ser inteligente. Gravar el carbono no debe hacerse para aumentar los ingresos p¨²blicos¡±. ¡°Si ponemos el precio al carbono y detenemos los subsidios a los combustibles f¨®siles, muchas de las inversiones que a¨²n se est¨¢n realizando con una perspectiva de recuperaci¨®n vinculada a los combustibles f¨®siles, obviamente, no ser¨¢n rentables¡±, considera.

¡°El carb¨®n sigue siendo el peor problema al que nos enfrentamos. Y muchos pa¨ªses siguen siendo adictos al carb¨®n¡±

De la cumbre del G-7 se espera que salga el compromiso de estas siete potencias de dejar de financiar con fondos p¨²blicos proyectos de generaci¨®n de electricidad con carb¨®n para finales de este a?o tanto dentro como fuera de sus fronteras, seg¨²n lo que pactaron los ministros de Medio Ambiente en mayo. ¡°El carb¨®n sigue siendo el peor problema al que nos enfrentamos. Y muchos pa¨ªses siguen siendo adictos al carb¨®n; tenemos que crear las condiciones para una transici¨®n del carb¨®n a las energ¨ªas renovables¡±, sostiene Guterres. ¡°Nosotros apelamos a que la eliminaci¨®n sea completa en 2030 para los pa¨ªses de la OCDE y en 2040 en el resto del mundo¡±.

Pero, como reconoce Guterres, con eso no ser¨¢ suficiente y se necesita tambi¨¦n poner en el punto de mira al petr¨®leo y el gas natural, fuentes tambi¨¦n de emisiones de gases de efecto invernadero. ¡°Estoy convencido de que el mundo no ser¨¢ capaz de utilizar todo el petr¨®leo y todo el gas que ya est¨¢n descubiertos. Continuar explotando nuevos proyectos, en mi opini¨®n, no tiene ning¨²n sentido¡±, sostiene sobre un reciente informe de la Agencia Internacional de la Energ¨ªa que abogaba por que los gobiernos no autoricen nuevas explotaciones de petr¨®leo y gas para poder cumplir el Acuerdo de Par¨ªs.

Guterres tambi¨¦n observa con satisfacci¨®n algunos recientes movimientos en empresas muy emisoras de gases de efecto invernadero, como las petroleras. Y cita el ejemplo de Exxon, en cuya asamblea de hace un par de semanas se produjo una rebeli¨®n que acab¨® con el nombramiento de tres consejeros a propuesta de un fondo activista contra el cambio clim¨¢tico. ¡°Fueron los accionistas, los peque?os inversores, los que se han movilizado para garantizar que haya una representaci¨®n de la visi¨®n verde del futuro en la administraci¨®n de la empresa. Hay hoy una conciencia que est¨¢ en la sociedad civil, que est¨¢ en las ciudades, que est¨¢ cada vez m¨¢s en el mundo empresarial y en el mundo financiero, que en mi opini¨®n tiene que movilizar tambi¨¦n a los gobiernos¡±. Porque, en opini¨®n de Guterres, ¡°probablemente el sector privado est¨¢ avanzando con m¨¢s fuerza que los gobiernos.

Informaci¨®n sobre cambio clim¨¢tico

Esta entrevista forma parte del proyecto Covering Climate Now, un consorcio global de m¨¢s de 400 medios de comunicaci¨®n creado para fortalecer la cobertura de la informaci¨®n clim¨¢tica.

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