El vertido de los dos petroleros rusos se extiende sin control por el Mar Negro un mes despu¨¦s

El desastre ecol¨®gico provocado por los naufragios de dos petroleros rusos el pasado 15 de diciembre sigue fuera de control un mes despu¨¦s. Miles de animales han muerto desde entonces y cada d¨ªa aparecen m¨¢s manchas de fuel en nuevas playas del Mar Negro. Sin embargo, el Kremlin no tom¨® medidas dr¨¢sticas hasta esta semana. La lenta reacci¨®n de sus escalafones inferiores y sus cruces de acusaciones han amenazado con provocar una cat¨¢strofe medioambiental mayor que enfangue tambi¨¦n al Kremlin, y el presidente Vlad¨ªmir Putin ha ordenado, finalmente, la creaci¨®n de una comisi¨®n que coordine los esfuerzos de limpieza que, hasta la fecha, ha cargado sobre sus hombros un ej¨¦rcito de voluntarios.

El descubrimiento de un nuevo vertido oblig¨® al primer ministro, Mija¨ªl Mishustin, a crear un mando ad hoc el pasado lunes. Un mes antes, el 15 de diciembre, una tormenta en el estrecho de Kerch parti¨® en dos al petrolero Volgoneft-212 e hizo encallar al Volganeft-239, dos viejos nav¨ªos sovi¨¦ticos de una flota que ya hab¨ªa sido tildada de anticuada y peligrosa la d¨¦cada pasada.

Las autoridades intentan levantar ahora un camino con excavadoras hasta el barco encallado, de cuya popa brot¨® un nuevo vertido el 10 de enero. El objetivo es poder acceder a sus tanques antes de que viertan m¨¢s contaminantes y bombear su contenido. Sin este paso previo, cualquier soldadura puede ser peligrosa.

Son obras a contrarreloj. Ambos barcos transportaban en total unas 9.200 toneladas de fueloil antes de naufragar. Un d¨ªa antes de este ¨²ltimo vertido, el 9 de enero, el Ministerio de Transporte estimaba que solo unas 2.000 toneladas de productos petrol¨ªferos se hab¨ªan derramado al mar desde cuatro tanques perforados. ¡°Debemos hacer todo lo posible para detener las fugas¡±, advirti¨® Putin a su Gobierno aquel d¨ªa, la jornada en la que finalmente decretaron la emergencia nacional.

Sin embargo, la cat¨¢strofe ha sido mucho peor de lo esperado. En el fondo del Mar Negro yacen unas 5.000 toneladas de fueloil, ¡°una especie de masa gelatinosa que no se mueve a ninguna parte¡±, seg¨²n ha declarado este fin de semana el gobernador de la regi¨®n de Krasnodar, Veniam¨ªn Kondr¨¢tiev. Los servicios de emergencia y los voluntarios han retirado hasta ahora unas 155.000 toneladas de arena y fueloil en aquella provincia, a las que se suman otras 43.000 toneladas de la anexionada Crimea.

Las primeras manchas de hidrocarburos aparecieron a mediados de diciembre en los alrededores del estrecho de Kerch, incluida la tur¨ªstica ciudad de Anapa, que de momento respira aliviada porque la cat¨¢strofe no se ha producido en ¨¦poca estival ¡ªmiles de rusos han cambiado sus vacaciones en el extranjero por esa zona de playas debido a las sanciones impuestas por la invasi¨®n de Ucrania¡ª.

Pero los efectos de los vertidos han llegado ya a lugares que distan por m¨¢s de 300 kil¨®metros de costa. Las autoridades impuestas por Rusia en Crimea anunciaron este domingo la aparici¨®n de m¨¢s marea negra a lo ancho de toda la pen¨ªnsula, desde Eupatoria, en la zona occidental, a Feodosia, en el margen oriental de la pen¨ªnsula, y en la hist¨®rica ciudad de Yalta, en el sur.

Incluso en un pueblo de Georgia, en el extremo oriental del Mar Negro, han hallado un ave con restos de fueloil. ¡°Es necesario restaurar lo antes posible el ecosistema ¨²nico de la costa del Mar Negro, de Krasnodar y de la Rep¨²blica de Crimea¡±, proclam¨® el primer ministro ruso al anunciar la creaci¨®n de esta comisi¨®n. ¡°Debemos hacer todo lo necesario para evitar nuevas fugas de fueloil¡±, agreg¨® Mishustin.

Putin propuso en los primeros d¨ªas de la cat¨¢strofe que solo se reforzase el Ministerio de Emergencias con un nuevo grupo operativo. Un mes despu¨¦s, termin¨® ordenando la creaci¨®n de la comisi¨®n encabezada por el vice primer ministro Vitali Sav¨¦lyev y el ministro de Emergencias, Alex¨¢nder K¨²renkov. Para el presidente ruso es fundamental que Crimea, s¨ªmbolo de su presidencia, no sea asociada con el fango negro.

¡°Es importante mantener el alto ritmo de desarrollo de Crimea y Sebastopol [...] y resolver los problemas que planteen sus vecinos. Esto se aplica plenamente a los trabajos para eliminar las consecuencias del accidente de los petroleros¡±, advirti¨® Putin este martes en una videoconferencia publicada por el Kremlin. ¡°Espero acciones activas en este sentido por parte de la comisi¨®n gubernamental¡±, enfatiz¨®.

Los voluntarios asumen el trabajo de las autoridades

El Kremlin ha descargado la responsabilidad de este caos en las autoridades locales. El jefe del Comit¨¦ de Investigaci¨®n de Rusia, Alex¨¢nder Bastrykin, anunci¨® la apertura de un caso penal contra los responsables de la mala gesti¨®n el pasado 24 de diciembre, aunque no aclar¨® qui¨¦nes son. No obstante, esto le sirvi¨® a Mosc¨² para exponer un informe con quejas de los vecinos.

¡°La limpieza solo la llevan a cabo ciudadanos desinteresados, no se ha asignado ning¨²n equipamiento especial para el trabajo ni se ha organizado la eliminaci¨®n de residuos¡±, recog¨ªa el documento, que adem¨¢s denunciaba que ¡°incluso los contenedores con productos petrol¨ªferos almacenados en las playas acabaron de nuevo en el mar por un temporal¡±.

Los rusos se han organizado a trav¨¦s de varios canales de Telegram para arreglar en lo posible esta cat¨¢strofe medioambiental. Uno es Anapa, voluntarios del mar, con 23.478 miembros. En ellos no solo se incluyen desde tutoriales sobre c¨®mo limpiar a las aves a ayuda con el alojamiento para los voluntarios reci¨¦n llegados, sino que tambi¨¦n promueven algunas de las pocas formas de protestar todav¨ªa permitidas hoy en Rusia: una carta a la fiscal¨ªa a la que ha tenido acceso este peri¨®dico ¡°para exigir una investigaci¨®n y que los culpables respondan de sus actos conforme a la ley¡±.

Entre otros ejemplos, el grupo cita una reuni¨®n del alcalde de Anapa, Vasili Shvets, con miembros de Salvamento Mar¨ªtimo el 5 de enero. Los representantes de este organismo ¡°informaron de que no encontraron manchas de contaminaci¨®n, pero Shvets declar¨® que esta informaci¨®n era absolutamente falsa: Hab¨ªa manchas de 10 por tres kil¨®metros de ancho¡±.

Adem¨¢s, el grupo pide en su misiva ¡°atraer tantas fuerzas como sea posible de las autoridades, cient¨ªficos, ecologistas, ornit¨®logos, veterinarios y servicios de rescate para eliminar el derrame de fueloil¡±. En juego est¨¢n las vidas de miles de animales.

El centro para la protecci¨®n de los delfines Delfa ha encontrado al menos 58 de estos mam¨ªferos muertos en la costa hasta el momento, pero su cifra puede incrementarse todav¨ªa m¨¢s porque se est¨¢n habituando a cruzar los vertidos.

¡°Los delfines mulares y los delfines de Azov nadan entre pel¨ªculas de petr¨®leo y peque?as fracciones de fueloil para nuestro pesar. En las salidas anteriores no observamos este fen¨®meno. Todos parecen alegres y bien alimentados, pero ahora hemos detectado manchas negras en alguno¡±, advierte el centro a trav¨¦s de Telegram. Adem¨¢s, lamenta que poco se puede hacer salvo mantener limpio el mar.

¡°Lamentablemente, no hay manera de alejarlos porque las zonas de fueloil son demasiado grandes, y capturarlos es inviable porque el estr¨¦s puede matarlos y no hay un solo lugar en Rusia para transportarles¡±, se?ala Delfa.

Por su parte, miles de aves tambi¨¦n corren peligro. Seg¨²n un centro de rehabilitaci¨®n de estos animales de Stavropol, Pelican, solo el 17% de las 1.051 aves que han atendido ha sobrevivido. El problema es que est¨¢n envenen¨¢ndose lentamente despu¨¦s de dos semanas bebiendo agua y alimentarse de otros animales contaminados. ¡°Los animales experimentaron da?os en el sistema nervioso central, p¨¦rdida de coordinaci¨®n, convulsiones y diarrea sanguinolenta¡±, son algunos de los s¨ªntomas.

En una entrevista concedida al canal Crimea 24, el director del parque Taig¨¢n, Oleg Zubkov, ha reconocido que les llegan miles de aves, ya no solo de Kerch, sino desde el otro extremo de la pen¨ªnsula del Mar Negro, y no dan abasto: ¡°Hay muchos p¨¢jaros y no se vislumbra un final¡±.