As¨ª trabaja la secci¨®n de Internacional para cubrir la guerra de Ucrania
El diario tiene?una decena de periodistas informando sobre?el terreno
Contar la guerra de Ucrania cada d¨ªa sobre el terreno es una peque?a misi¨®n diplom¨¢tica. As¨ª lo explica Cristian Segura, uno de la decena de enviados especiales de EL PA?S desplazados desde el inicio de la invasi¨®n rusa. Cuenta que cada peque?o viaje por el pa¨ªs requiere horas previas de llamadas, solicitar infinitud de permisos. Para conseguir los testimonios locales de una historia, es a menudo necesario encontrar un traductor, un lugar donde dormir, un conductor para los desplazamientos. Un trayecto que llevar¨ªa dos horas puede convertirse en cinco, conviene el redactor, que se desplaza por todo el territorio, como sus compa?eros del diario. ¡°Vamos a salto de mata. Lo mismo se circula por la acera, que se va a 150 kil¨®metros por hora por una carretera limitada a 80. A veces te paran cada 10 kil¨®metros. Hay d¨ªas en los que no descansas por las alarmas. Puede ser agotador¡±, explica Segura a trav¨¦s de una llamada de WhatsApp desde Lviv. A un mes desde el inicio de la guerra, los periodistas y fot¨®grafos de EL PA?S hacen una labor esencial desde este territorio y sus fronteras. Son los ojos y narradores de confianza del peri¨®dico, testigos de la cr¨®nica de un pa¨ªs que resiste, pero sufre un alto coste.
Estos d¨ªas, los grupos de Whatsapp de las diferentes secciones de EL PA?S son r¨ªos de informaci¨®n al minuto. La cobertura de la guerra se ha vuelto primordial en el peri¨®dico, y el ritmo es fren¨¦tico, especialmente en la secci¨®n de Internacional, que lleva un mes acaparando portadas y titulares a cuatro y cinco columnas. En web, las noticias de los ataques y refugiados acaparan el espacio m¨¢s relevante en portada, y han aumentado las entrevistas con expertos, los an¨¢lisis y la colaboraci¨®n con el resto de secciones. En cuanto al papel, si la cobertura de Internacional de un domingo cualquiera ocupa de 7 a 9 p¨¢ginas, la de los pasados fines de semana ha llegado a alcanzar las 20.
De coordinar este despliegue informativo se ocupa especialmente la redactora jefa de la secci¨®n, Luc¨ªa Abell¨¢n. ¡°La actualidad siempre es fren¨¦tica, pero desde el d¨ªa de la invasi¨®n, el peri¨®dico ha volcado todos sus esfuerzos en cubrir esto de forma prioritaria¡±, asegura. Internacional ha incrementado su equipo con una decena de redactores, que se unen desde otras secciones del diario. La coordinaci¨®n de la secci¨®n se ha visto reforzada. A Abell¨¢n y al jefe de la secci¨®n, Luis Doncel, se han sumado el redactor jefe de Cultura, Guillermo Altares, y la jefa de secci¨®n de Sociedad, Silvia Blanco ¨Dambos con una gran experiencia en Internacional¨D. Los cuatro se alternan ahora en cuatro turnos ininterrumpidos. Desde las 6 de la ma?ana a las 12 de la noche. El relevo, de madrugada, lo toma la redacci¨®n de EL PA?S M¨¦xico.
?Pero c¨®mo se narra una guerra? ¡°Hay que contar qu¨¦ pasa m¨¢s all¨¢ de las bombas¡±, explica Abell¨¢n. A menudo, la actualidad habla por s¨ª misma, pero tambi¨¦n es necesario buscar las repercusiones, como las respuestas de otros pa¨ªses, dar contexto y recoger las voces de los expertos. El fin de semana el lector busca historias m¨¢s reposadas, aquellas no directamente relacionadas con la acci¨®n b¨¦lica, sino con las consecuencias para la poblaci¨®n y para los diferentes sectores. ¡°En Internacional tenemos dos focos muy claros. Uno es contar el asedio al pueblo ucranio ¨Del basado en objetivos civiles¨D. El otro, narrar el fen¨®meno del ¨¦xodo de los refugiados, que ya suma 3,5 millones de personas en muy poco tiempo. No ve¨ªamos un ¨¦xodo de refugiados desde los Balcanes y, desde esta magnitud, desde la Segunda Guerra Mundial¡±, analiza.
Ser¨ªa dif¨ªcil ofrecer tal cobertura sin los corresponsales y enviados especiales del peri¨®dico, ensalza la redactora jefa: ¡°Son la materia prima de todo nuestro trabajo¡±. Habla de la corresponsal en Rusia y Ucrania, Mar¨ªa Sahuquillo, que lleg¨® desde Mosc¨² a Ucrania un mes antes de estallar el conflicto. Dnipro, Kiev, J¨¢rkov, Zaporiyia¡ semanas narrando el ¨¦xodo de personas que huyen de los ataques. Se refiere tambi¨¦n Abell¨¢n al fotoperiodista y enviado especial Luis de Vega, que se traslad¨® a Kiev tan solo un d¨ªa antes del estallido, el 24 de febrero, que se presenta con frecuencia en las zonas m¨¢s tensionadas y que cubre zonas sensibles con su c¨¢mara mientras suenan las balas.
Estos d¨ªas, Cristian Segura se desplaza y escribe reportajes en profundidad desde Lviv, la llamada ciudad de la retaguardia, y la que cuentan podr¨ªa encabezar la Ucrania libre. A ¨¦l se une el fot¨®grafo Albert Garc¨ªa, que acaba de incorporarse al terreno tras cubrir los testimonios de los refugiados en la frontera de Polonia y Bielorrusia. Le dar¨¢ el relevo a su compa?ero Jaime Villanueva, que llevaba varias semanas con Segura, como antes ya estuvieron los fot¨®grafos Alex Onciu y Massimiliano Minocri y el redactor y colaborador R¨¢ul S¨¢nchez Costa. Desde la frontera, el redactor Antonio Pita cuenta desde Polonia c¨®mo los pa¨ªses colindantes hacen frente al ¨¦xodo de refugiados, en tanto que el c¨¢mara Sa¨²l Ruiz hace lo propio con historias en v¨ªdeo desde Polonia y Ruman¨ªa.
Un trabajo coral
Pero m¨¢s all¨¢ de Internacional, la guerra ha ocupado la actualidad de casi todas las secciones. Econom¨ªa se ha enfocado en el sector energ¨¦tico. V¨ªdeo trabaja en especiales explicativos, como el programa especial que trat¨® este jueves de preguntas y respuestas. La nueva apuesta de EL PA?S Audio, Hoy en EL PA?S, dedica podcasts sobre preguntas destacadas de la guerra. El equipo de ?ltima Hora narra la guerra al minuto. Son los responsables del directo, a menudo, la pieza m¨¢s le¨ªda del d¨ªa por los lectores. ¡°Esta es tambi¨¦n una guerra de redes sociales¡±, aclara Abell¨¢n. ¡°Los ciudadanos con sus m¨®viles se han convertido en periodistas improvisados, pero no todo puede darse sin m¨¢s. Tambi¨¦n actuamos de verificadores, incluso hay un chat muy activo en el que se avalan todas las fuentes. Si hay algo que no tenemos claro, esperamos¡±.
Junto al directo, destaca tambi¨¦n una pieza del equipo de Nuevas Narrativas que coordina su redactor jefe, Mariano Zafra. Se trata del mapa diario de los ataques y bombardeos en el frente, que suele acompa?ar a la noticia del d¨ªa, pero que es tambi¨¦n una cr¨®nica en s¨ª misma. Las nuevas tecnolog¨ªas juegan aqu¨ª un papel esencial. ¡°Hace a?os, de las guerras llegaban dos o tres im¨¢genes por jornada, alg¨²n teletipo y la informaci¨®n del corresponsal. Los mapas no eran tan precisos y estaban basados en cr¨®nicas. Ahora nos basamos en datos georreferenciados¡±, explica Zafra. UNITAR, por ejemplo, un servicio de la ONU, analiza im¨¢genes satelitales de gran resoluci¨®n para contabilizar qu¨¦ edificios han sido atacados.
Hay una frase muy recordada estos d¨ªas de 1917 atribuida al senador estadounidense Hiram Johnson que dice: ¡°Lo primero que muere en una guerra es la verdad¡±. Por eso, cualquier redactor estos d¨ªas se afana especialmente en la verificaci¨®n de toda informaci¨®n, como el equipo de Nuevas Narrativas. Para aportar mayor credibilidad, refuerzan la informaci¨®n de los mapas con pruebas verificadas en forma de v¨ªdeo y fotograf¨ªas. ¡°Se trata de ofrecer al lector todas las pruebas. Si nos dicen que un convoy est¨¢ a 30 kil¨®metros de Kiev, contrastamos. El mayor trabajo es limpiar la maleza. Para eso hay que recurrir a varias fuentes, a las webs relevantes de verificaci¨®n y a los corresponsales que tenemos en el terreno¡±, aclara.
Esta cantidad ingente de informaci¨®n tambi¨¦n ha llegado a las fotograf¨ªas. Si un d¨ªa cualquiera EL PA?S recibe una media de 15.000 im¨¢genes ¨Dentre sus fot¨®grafos y las agencias¨D, solo este ¨²ltimo mes la cifra se ha duplicado por el conflicto. Hay algo nuevo tambi¨¦n en esta guerra que no tuvieron otras, dice el jefe de secci¨®n de Fotograf¨ªa en el peri¨®dico, Carlos Rosillo: ¡°La gran novedad son sin duda las fotos que llegan por sat¨¦lite¡±. Habla del sat¨¦lite Maxar, que ofrece capturas en las que se observan las filas de tanques camino a Kiev a vista de p¨¢jaro.
Desde el terreno, sin embargo, es m¨¢s complejo. Abordar un escenario tan grande como Ucrania, de una extensi¨®n territorial mayor a Espa?a, pero con una poblaci¨®n similar, implica un despliegue como este, sin precedentes. Por eso, como recuerda Rosillo, la misi¨®n del peri¨®dico es muy clara: ¡°Tener a nuestros fot¨®grafos en el terreno nos hace tener una visi¨®n propia, ¨²nica y exclusiva, y tratamos de no autocensurarnos. Queremos que el lector sea consciente¡±.
Desde el inicio de la guerra, EL PA?S ofrece de forma gratuita la ¨²ltima hora del conflicto en Ucrania como servicio p¨²blico. ¡°Que ya haya pasado un mes nos obliga a reflexionar, pero no tenemos grandes certezas¡±, recuerda la redactora jefa de Internacional, Luc¨ªa Abell¨¢n. O como dec¨ªa la corresponsal Mar¨ªa Sahuquillo en el primer podcast de Hoy en EL PA?S: ¡°Nadie sabe muy bien qu¨¦ va a pasar¡±.
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