"La gente necesita los mitos porque se sienten frustrados"

A Juan Jos¨¦ Sebreli (Buenos Aires, 1930) le gusta atacar los tab¨²es, los prejuicios, las supersticiones. Aquello de lo que otros no quieren o no les gusta hablar a ¨¦l le divierte. Lo ha hecho durante su m¨¢s de medio siglo de vida literaria. Y este escritor y fil¨®sofo argentino lo ha vuelto a demostrar con su ¨²ltima obra, Comediantes y m¨¢rtires, un ensayo contra los mitos, ganador del I Premio Debate-Casa Am¨¦rica, que present¨® ayer en Madrid. Una per¨ªfrasis de Sartre (San Genet, comediante y m¨¢rtir) que ha tomado prestada para criticar a las cuatro figuras, con permiso de Borges, m¨¢s conocidas de su pa¨ªs: Gardel, Evita, Che Guevara y Maradona.

Los mitos han estado siempre presentes en la obra de Sebreli. Por eso se extra?a cuando se le pregunta el porqu¨¦ de su nueva obra. "Mis libros son temas con variaciones; siempre me comparo con Monet, que pintaba el mismo nen¨²far pero siempre era distinto", explica el pensador argentino, durante la entrevista mantenida con EL PA?S ayer en la Casa de Am¨¦rica de Madrid.

El ensayista parte en su libro de que "todo personaje es susceptible de ser transformado en mito". Las cuatro figuras que analiza "estaban decididos ya desde la infancia a ser gente distinta". Pero no todos sab¨ªan c¨®mo ni en qu¨¦ iban a destacar. "En el caso de Evita, su idea era ser actriz y acab¨® como l¨ªder pol¨ªtico; Che Guevara no sab¨ªa qu¨¦ ser, si escritor, m¨¦dico, antrop¨®logo...", explica Sebreli, que reivindica el azar como uno de los factores que influyen en la creaci¨®n de un mito. "?Qu¨¦ hubiera sido de Evita sin el encuentro con Per¨®n? O el Che, que 15 d¨ªas antes de su encuentro con Fidel Castro estaba proyectando conseguir una beca para irse a Par¨ªs", razona Sebreli.

Pero no s¨®lo el destino influye. A partir de una situaci¨®n azarosa, se pone en marcha una maquinaria en la que juega un papel protagonista la iconograf¨ªa y la imagen. "Gardel fue el primero que tuvo la sensaci¨®n de que con la voz no bastaba; Evita tuvo su propio equipo de fot¨®grafos".

Pero si en alguien la imagen fue trascendental fue en el ¨²nico de los cuatro que quiz¨¢s no la busc¨®. El rostro del Che Guevara fotografiado por Korta se ha covertido en la se?a del revolucionario argentino. Pero tambi¨¦n ah¨ª el azar estuvo presente. "?l ni siquiera particip¨® en aquella ceremonia; se asom¨® s¨®lo un instante, un instante que le inmortaliz¨® para la eternidad". Lo mismo que le ocurri¨® despu¨¦s de su asesinato en Bolivia. "El verdadero Che muerto era una figura desastrosa, con la barba crecida, una cosa desagradable. As¨ª que la CIA y el Gobierno boliviano pensaron que nadie se creer¨ªa que fuese a ser ¨¦l. Lo limpiaron, lo afeitaron y lo convirtieron en un bello muerto", explica el autor.

La muerte contribuye enormemente a la creaci¨®n de un mito. Pero no es necesario morir para ser un h¨¦roe. Diego Armando Maradona, el flamante nuevo seleccionador argentino, es el ¨²nico de los cuatro iconos que sigue vivo. En el caso de que no le fuese bien en esta nueva etapa de su vida, ?podr¨ªa un mito volver a ser humano? Sebreli es categ¨®rico: "Todas las etapas de Maradona, desde que dej¨® de jugar al f¨²tbol, salieron mal. Lo m¨¢s probable es que ¨¦sta vuelva a ser un fracaso. Pero mientras los eventos en los que aparezca sigan generando fortunas, ¨¦l seguir¨¢ presente".

Vivos o muertos, algo irrefutable es que las masas necesitan de los mitos. "Mucha gente los necesita porque se sienten frustrados en sus propias vidas. Necesitan proyectarse en alguien que ha triunfado". Aunque todos los pa¨ªses necesitan de sus h¨¦roes, Argentina particularmente acude a ellos. "En el siglo XIX casi todo el mundo era inmigrante; hab¨ªa un culto a los pr¨®ceres. Eso predispuso a que, cien a?os despu¨¦s, se transformase en una adoraci¨®n a los ¨ªdolos populares".

La voz pausada y la apariencia sosegada de Sebreli contrasta con su afilado verbo. En su nueva obra desmonta a los cuatro iconos argentinos. Una cr¨ªtica que tuvo su r¨¦plica en la presidenta argentina, Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner. Al poco de salir a la venta el libro, Fern¨¢ndez decidi¨® que las cuatro im¨¢genes de Argentina para la feria del libro de Frankfurt en 2010, en la que es el pa¨ªs invitado, fuesen las mismas que cuestiona Sebreli. Con un matiz: la presidenta las exalta. "No tengo ninguna prueba, pero yo creo que quer¨ªa replicar a mi libro. Pod¨ªa haber escogido cinco personajes, o tres; incluso a Per¨®n en vez de Evita. Pero no, fueron los mismos".

Controversia aparte -Sebreli reconoce que la disputa le ha venido bien a las ventas del libro-, la pregunta que surge es si Gardel, Evita, el Che o Maradona son las figuras m¨¢s apropiadas para representar a Argentina, el pa¨ªs de Borges o Cort¨¢zar, en una feria del libro. "En absoluto, lo que ocurre es que ellos no saben muy bien qu¨¦ es una feria del libro. Deben pensar que es una especie de feria regional para exhibir productos de la tierra".