Mala suma

En el cine sumar uno m¨¢s uno no siempre da como resultado dos. Y Caminando entre dinosaurios es una muestra. Un director especializado en animaci¨®n, Barry Cook, creador de Mulan, junto a un experimentado documentalista especializado en naturaleza, Neil Nightingale, con decenas de trabajos para la BBC. Un escenario real, en este caso bosques, lagos y r¨ªos, espacios abiertos y espacios cerrados, que enmarcan a una serie de criaturas creadas en animaci¨®n digital. Una tem¨¢tica, la estancia de los dinosaurios sobre la Tierra, tan atractiva para los cr¨ªos como para los adultos acompa?antes. Y sin embargo, cu¨¢nta charla. Tanto realismo animado, tanto esfuerzo t¨¦cnico, tanta verosimilitud, para acabar escribiendo un guion no para ni?os, sino de ni?os, que no superar¨ªa el list¨®n de un mal episodio de una mala serie de televisi¨®n infantil.

Primer problema: el relato en s¨ª no hace m¨¢s que recoger estereotipos de El rey le¨®n y decenas de pel¨ªculas infantiles m¨¢s. Segundo problema: los di¨¢logos se alimentan demasiado de los ya cansinos anacronismos en actos, palabras, costumbres y gracietas, encumbrados gracias a la saga Shrek, y que a fuerza de reiteraci¨®n han perdido todo su impacto. Aunque quiz¨¢ el mayor problema sea el tercero, el que tienen muchas veces las pel¨ªculas protagonizadas por animales (y algunas animadas, como la saga Cars), sobre todo cuando el guion no supera un cierto list¨®n: la paup¨¦rrima expresividad otorgada a los rostros de las criaturas provocan que, en este caso, el texto y el dinosaurio que dice tal texto sean entes no ya paralelos sino perpendiculares. Consecuencia: no se ve al personaje diciendo algo, sino que, en un ejercicio prestidigitador que roza lo metacinematogr¨¢fico, lo que se acaba imaginando es al doblador del personaje diciendo ese algo. As¨ª, buena parte de sus virtudes quedan empeque?ecidas por un mal planteamiento de la narrativa, llevando al extremo lo peor que le puede pasar a una pel¨ªcula que presume de hiperrealista: que la tramoya asome la patita por debajo de su brillantez t¨¦cnica.