Los duros tambi¨¦n lloran

No hay ninguna duda de que Josh Brolin es un hombre que impone. De negro riguroso, frot¨¢ndose las manos cuando le preguntan algo que no acaba de convencerle, incluso sentado en un sof¨¢ y con pose relajada, Brolin no es de esos tipos a los que les gusta a?adir palabras a las frases solo por el placer de charlar. El actor, al que muchos comparan con Tommy Lee Jones (¡°Es un honor, pero ¨¦l es un t¨ªo duro y yo solo un aprendiz¡±), ha querido salirse de perfil de personaje con malas pulgas que le acompa?a desde hace una d¨¦cada, para su ¨²ltimo trabajo, Una vida en tres d¨ªas, a las ordenes del realizador Jason Reitman.

¡°Quer¨ªa sentirme vulnerable y Jason me env¨ªo un guion que me gustaba. Hab¨ªa visto Juno y Up in the air y me fascinaron. Me apetec¨ªa acompa?arle en este cambio, porque creo que hasta ahora sus pel¨ªculas hab¨ªan tenido un componente muy intelectual y en esta ¨²ltima, sin renunciar a ello, entra en un campo emocional que hasta ahora, creo, no hab¨ªa explorado¡±.

Brolin (Los ?ngeles, 1968), que se ha pasado los ¨²ltimos a?os dando el callo para realizadores como Oliver Stone, los hermanos Coen, Spike Lee o Ridley Scott en pel¨ªculas como Valor de ley, W u Oldboy, interpreta en Una vida en tres d¨ªas a un convicto que se refugia en casa de una mujer (Kate Winslet) cuya ¨²nica preocupaci¨®n es su hijo. ¡°Ese tipo no tiene nada que ver con ning¨²n personaje que haya hecho hasta ahora. En el rodaje me sent¨ªa inc¨®modo y no voy a decirte que fue una experiencia agradable, pero, al mismo tiempo, ese tipo de sensibilidad es algo que me gustar¨ªa explorar. ?Encasillad? No, es cierto que no me ofrecen muchas comedias aunque creo que he hecho de todo. Lo que s¨ª es verdad, es que encajo en esos hombres lac¨®nicos que se encienden un cigarro con una cerilla que se han pasado por la barbilla [sonr¨ªe]¡±.

)

El int¨¦rprete se hizo un hueco entre la cinefilia por aquella peque?a joya de Richard Donner llamado Los goonies y desde entonces no se ha bajado de la monta?a rusa que es el s¨¦ptimo arte: ¡°No acostumbro a mirar atr¨¢s, intento focalizarme en el presente o el futuro, no sirve de nada repasar mi carrera y pensar todo lo que hubiera podido hacer mejor. Lo he hecho y ya est¨¢. Por supuesto, ha habido momentos en rodajes en que me han entrado ganas de salir corriendo pero soy un profesional y esto es a lo que me dedico. ?Los goonies? [Risas] T¨ªo, podr¨ªa contar con los dedos las entrevistas en los ¨²ltimos a?os en los que alguien no ha acabado mencionando la pel¨ªcula. ?Qu¨¦ puedo decirte? Es un maldito cl¨¢sico, no envejece. Se la pones a tu hijo y tiene exactamente la misma experiencia que tuviste t¨² en su momento. Jam¨¢s renegar¨¦ de esa pel¨ªcula, y antes de que preguntes te dir¨¦ que no, no hay planes para ninguna secuela, jam¨¢s va a hacerse¡± dice el actor, mes¨¢ndose el pelo.

Brolin oye la voz de Winslet, se levanta y la abraza en el pasillo. ¡°Soy un tipo muy cari?oso, ?qu¨¦ se le va a hacer?¡± comenta mientras tuerce el gesto. Luego, de vuelta al sof¨¢, y sin que nadie le pregunte, se confiesa: ¡°Otro de los motivos por los que acept¨¦ hacer esta pel¨ªcula es ella. Es una de las mejores actrices del mundo, punto. Adem¨¢s, aunque se enfadar¨ªa si me oyera decirlo, me recuerda a mi madre, tiene ese punto tejano de mujer que se niega a rendirse, que puede con lo que le echen. Es una bestia¡± explica con una sonrisa.

El actor tiene claro que para ¨¦l no hay atajos, ni amigos, una vez que pone pie en un plat¨®: ¡°Tienes que estar all¨ª a tu hora, con las l¨ªneas aprendidas. Lo dem¨¢s es s¨®lo adorno. Hay directores m¨¢s comprensivos, como los Coen, que pueden llamarte de todo a la cara sin que te ofendas, pero si la pifias con alguien como Oliver [Stone], est¨¢s bien jodido¡±, cuenta el que durante a?os fue la pareja de Diane Lane. Un tema del que deja claro que no quiere hablar, ni de modo tangencial. ¡°Nadie debe entrometerse en mi vida personal. Jam¨¢s he dado carnaza a ese tipo de prensa. No voy a empezar a hacerlo ahora¡±.

Brolin ha sido objeto de muchas bromas (algunas bienintencionadas, otras menos) por la afici¨®n de su personaje en Una vida en tres d¨ªas a las tartas de manzana. ¡°Las malditas tartas de manzana. Cuando acept¨¦ el papel me propuse algunas cosas, y una de ellas fue poder cocinar una buena tarta de manzana. Cocin¨¦ como cien tartas: me las llevaba al rodaje y hac¨ªa que el equipo la probar¨¢. Hasta que un d¨ªa Jason [Reitman] se me acerc¨®, me llev¨® a un rinc¨®n y dijo: ¡°Josh, estamos hartos de tus jodidas tartas de manzana. No podemos m¨¢s [risas]¡±.