Mario Vargas Llosa: ¡°Esta realidad puede llegar a ser el infierno¡±
El escritor cree que la falta de transparencia lleva a los j¨®venes al desprecio por lo social
?Qu¨¦ papel adopta cuando habla con j¨®venes? El de un curioso. El abismo generacional es el m¨¢s grande de la historia. Los j¨®venes est¨¢n m¨¢s en las pantallas; ah¨ª su desenvoltura es imbatible. Nosotros seguimos siendo librescos.
?Qu¨¦ m¨¢s cambi¨®? Se hacen adultos muy pronto. Frente al sexo, por ejemplo. Es una libertad que los hace m¨¢s sanos de lo que fuimos nosotros. Los tab¨²es y las prohibiciones hicieron que el sexo fuera traum¨¢tico.
?Qu¨¦ entiende ahora que no hubiera entendido de joven? La igualdad entre el hombre y la mujer. Los j¨®venes ahora son m¨¢s conscientes de eso y nosotros est¨¢bamos bastante ciegos. El sexo los hace m¨¢s libres. Aunque esa libertad les hace perder m¨¢s r¨¢pido esa inocencia que poco a poco iba fomentando el amor y enriqueciendo la relaci¨®n sentimental.
?Cu¨¢ndo perdi¨® usted la inocencia? Entre los diez y los once a?os. Yo no sab¨ªa c¨®mo ven¨ªan los ni?os al mundo; que los trajera la cig¨¹e?a me parec¨ªa algo fantasioso; no sospechaba el tipo de vida sexual que estaba en el origen de la procreaci¨®n.
Los pa¨ªses que vivieron la utop¨ªa demostraron que provocaba m¨¢s injusticias de las que correg¨ªa
?Y qu¨¦ otros descubrimientos naturales lo conmovieron? El amor. Fue fundamental y lo descubr¨ª antes que el sexo. Mi primer amor fue el de una trapecista de circo. Era muy chiquito; en Cochabamba los circos ven¨ªan para el 6 de agosto, d¨ªa de Bolivia. Hab¨ªa una equilibrista vestida de rosado; fue mi primer amor.
?Y el primer beso? A los doce a?os, quiz¨¢. Ten¨ªamos juegos maliciosos entre chicos y chicas. El premio era un beso. El primero fue el de Teresita; ?as¨ª nombr¨¦ a la protagonista de la primera novela!
Abraz¨® la utop¨ªa de joven. ?Cu¨¢ndo se rompi¨® la utop¨ªa? Cuando los pa¨ªses que vivieron la utop¨ªa nos demostraron que ¨¦sta provocaba peores injusticias que las injusticias que nosotros quer¨ªamos corregir con las mediocres democracias.
Esta realidad no est¨¢ para echar cohetes. Esta realidad democr¨¢tica no s¨®lo no es el para¨ªso sino que puede llegar a ser el infierno. Hay corrupci¨®n, falta de transparencia, de vitalidad de las democracias, y eso lleva a los j¨®venes a volcarse en la indiferencia y el desprecio por lo social y lo pol¨ªtico; me parece muy grave. Es una realidad de nuestro tiempo.
?Qu¨¦ le sorprende de lo que habla con los chicos? El enorme desprecio por la pol¨ªtica y el compromiso; piensan que es una p¨¦rdida de tiempo, que todos los pol¨ªticos son corruptos. Esa actitud c¨ªnica a la que llegan tan pronto es peligrosa para el futuro de la democracia, de la libertad, de todo lo que nos ha sacado de la barbarie.
?Los convence de lo contrario? Es dif¨ªcil hacerlo si lo que les ofreces es vivir en sociedades donde no hay trabajo sino para minor¨ªas. La gran revoluci¨®n tecnol¨®gica transforma el mundo y hace desaparecer cada vez m¨¢s oportunidades de trabajo.
?Qu¨¦ no entiende de lo que oye? Hay un engolosinamiento con la tecnolog¨ªa como panacea para resolverlo todo. Una utop¨ªa peligrosa: amenaza la m¨¢s grande conquista de la humanidad, la libertad. Es la pesadilla orwelliana hecha realidad.
Dijo que imaginaba la vejez junto a un gran dan¨¦s, frente al mar. ?Lo ve lejos? ?Ja ja ja! Mi sue?o es poder seguir leyendo y escribiendo hasta el final. Si es as¨ª ser¨¢ una muerte feliz.
Un padre casi de su edad le deja el sitio a alguien que puede ser su hijo, Vargas Llosa. ?Qu¨¦ porvenir le augura al nuevo Rey? Creo que es un joven muy bien preparado para enfrentar un porvenir enormemente incierto y dif¨ªcil. Creo que es un joven muy bien preparado para enfrentar un porvenir enormemente incierto y dif¨ªcil.
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Babelia
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