¡°Adoro lo que hizo este se?or¡±
El actor Willem Dafoe habla de su admiraci¨®n por Pier Paolo Pasolini, al que interpreta en la ¨²ltima pel¨ªcula de Abel Ferrara
La cita con Willem Dafoe (Wisconsin, 1955) es en un club privado del barrio de Chelsea de Nueva York. En la sala en la que los periodistas esperan su turno para la entrevista hay sillones de cuero negro, libros antiguos, cuadros de se?oras en ropa interior y con gafas de sol cuelgan de paredes gris¨¢ceas y l¨¢mparas negras como ¨¢rboles secos caen del techo. Es el lugar escogido para charlar sobre sus dos ¨²ltimas y muy distintas pel¨ªculas: Pasolini, de Abel Ferrara, que estrena en el Festival de Venecia; y El hombre m¨¢s buscado, tercer filme del fot¨®grafo Anton Corbijn y ¨²ltimo de Philip Seymour Hoffman, que llega a las carteleras espa?olas el pr¨®ximo 12 de septiembre.
Es, desde luego, el lugar m¨¢s apropiado para encontrarse con el actor de rostro m¨¢s peculiar del cine, el que m¨¢s asociamos a personajes extravagantes, raros y hasta perversos. Del peligroso falsificador de Vivir y morir en Los ?ngeles que lanz¨® su carrera en 1985, a Jopling, el esbirro en moto de El gran hotel Budapest, el ¨²ltimo malo que ha interpretado para Wes Anderson. ¡°Yo s¨®lo me fijo en el conjunto del proyecto¡±, dir¨¢ despu¨¦s. ¡°Me gusta mezclar, ir de un personaje a otro. No s¨¦ si busco ese tipo de personajes o me encuentran ellos¡±.
Al principio de su carrera sinti¨® que el cine quer¨ªa encasillarle en esos papeles extra?os (hasta que Scorsese vio en ¨¦l la cara de Jes¨²s en La ¨²ltima tentaci¨®n de Cristo) y por eso buscaba una salida en los escenarios con el grupo neoyorquino de teatro alternativo que cofund¨®, Wooster. Sobre las tablas se desfoga porque trabaja desde el cuerpo y el movimiento, dice, la mejor herramienta que tiene como actor. Una semana antes de este encuentro recib¨ªa excelentes cr¨ªticas por la obra The old woman, teatro del absurdo que protagoniz¨® junto al bailar¨ªn Mikhail Baryshnikov. ?Algo diferente para ¨¦l? ¡°No¡±, dice ri¨¦ndose y encogi¨¦ndose de hombros. ¡°Ya hab¨ªa trabajado con Bob Wilson. Y despu¨¦s de todos mis a?os con Wooster, aunque era algo distinto, Bob siempre fue una gran influencia para nosotros¡±.
Tras tres d¨¦cadas de dedicaci¨®n a la interpretaci¨®n, parece dif¨ªcil que un guion o un personaje sorprendan a Willem Dafoe. ¡°Bueno, a veces¡±, vuelve a decir entre risas. Lejos de la imagen que da por el cine, es agradable, divertido y muy ir¨®nico en persona. ¡°Quiz¨¢ es que me enga?e a m¨ª mismo, pero creo que siempre encuentro a algo diferente en cada proyecto. A veces me interesa mucho y otras digo: ¡®Dios m¨ªo, no hay nada que hacer aqu¨ª, he tocado fondo¡¯. Pero bueno, a veces tambi¨¦n lo haces por cebarte, y puede ser saludable¡±.
Eso explicar¨ªa por qu¨¦ a¨²n, a pesar de haber reflexionado tanto sobre su oficio y haber interpretado todo tipo de g¨¦neros, es uno de los actores m¨¢s activos. Sin problemas para pasar del cine independiente de autor (Anticristo, Adam resucitado) a las grandes producciones de Hollywood (Spider-Man, John Carter). ¡°Si sigo en Hollywood es por comprobar c¨®mo evoluciona el entretenimiento, por probar y comparar con otras pel¨ªculas¡±, dice con sorna. ¡°Es una forma de verlo, ?no? O quiz¨¢ una excusa. Al final son todos hermanos, algunos m¨¢s feos que otros, algunos m¨¢s listos que otros¡±, se r¨ªe a carcajadas, pero sin poner nombre a los feos.
El hombre m¨¢s buscado es de los hermanos listos. De esta adaptaci¨®n de la novela de John Le Carr¨¦ le atrajo volver a trabajar con Corbijn, a quien hab¨ªa conocido como fot¨®grafo. ¡°Tiene una gran sensibilidad, es muy intuitivo y paciente, pero cuando encuentra su ¨¢ngulo es preciso y determinado¡±, dice. ¡°Adem¨¢s, mi personaje era ligeramente diferente a lo que he hecho. Es un tipo muy rico, con buen coraz¨®n, un poco corrupto, pero que quiere hacer lo correcto. Y es ingl¨¦s. Tan pocas veces nos dejan a los actores norteamericanos hacer de ingleses, siempre es al rev¨¦s. Era mi momento de suerte¡±, se r¨ªe.
¡°No he visto la pel¨ªcula desde que Philip muri¨®¡±, recuerda ya m¨¢s serio del actor que falleci¨® en febrero. ¡°La vi la ¨²ltima vez en Sundance con ¨¦l. Y creo que ser¨ªa dif¨ªcil volver a verla. Puedes imaginar o asumes sobre c¨®mo muri¨®, o lo que sabemos de c¨®mo muri¨®, que estaba sufriendo, y su personaje en la pel¨ªcula sufre tambi¨¦n. Es f¨¢cil proyectar su vida real en ese personaje¡±.
Es el riesgo y el genio de la interpretaci¨®n: a veces no es f¨¢cil para los actores separar la realidad de la pantalla. ¡°Te usas a ti mismo y lo que te est¨¢ pasando, incluso cuando es un personaje lejano a ti se convierte en parte de tu vida¡±, explica Dafoe. ¡°Mucha gente encuentra su arte en el dolor. El m¨ªo viene del dolor y del placer. Porque lo que m¨¢s me motiva es la belleza ¨Cpiensa¨C. Creo que entonces viene m¨¢s del placer que del dolor¡±. Y de estar al servicio de la pel¨ªcula y del director, ser una marioneta, servir a la historia. ¡°Un actor no puede ser egoc¨¦ntrico, no puede serlo¡±, dice exaltado. ¡°Porque no tendr¨¢ espacio para ser algo m¨¢s, para aprender o comprometerse de verdad¡±.
Como le ha pasado a ¨¦l con Pasolini, la pel¨ªcula que cuenta las ¨²ltimas horas en la vida del director italiano antes de que fuera asesinado en noviembre de 1975. ¡°Fue muy bonito¡±, dice de nuevo con la cara iluminada por su pasi¨®n por el realizador de su pa¨ªs de adopci¨®n, Italia, donde vive un tiempo al a?o desde que se cas¨® en 2005 con la directora Giada Colagrande. ¡°Fue muy bonito, porque tuve tanta ayuda, su vida est¨¢ tan bien documentada: entrevistas, sus escritos, su poes¨ªa, sus obras, gente que le conoci¨®, me dejaron hasta su ropa. Adem¨¢s, empatizo mucho con ¨¦l. Es muy diferente a m¨ª, pero es tan inteligente, adoro todo lo que hizo. Hubo muchas cosas que me permitieron sentarme en ese mundo y tener el derecho de fingir. Y eso es lo que busco¡±.
La pel¨ªcula, una de las aspirantes m¨¢s fuertes al Le¨®n de Oro en Venecia, es uno de los proyectos m¨¢s longevos de Abel Ferrara. ¡°Es nuestra cuarta pel¨ªcula juntos. Y cada vez es mejor¡±, dice Dafoe. ¡°No es ning¨²n secreto que su vida ha cambiado mucho: ya no es un drogadicto. Pero ¨¦l no ha cambiado salvo que ya no reza a ese dios de la droga y se concentra m¨¢s. Si acaso se enfada m¨¢s, es m¨¢s energ¨¦tico, un poco m¨¢s loco¡ Pero est¨¢ comprometido, ya no est¨¢ distra¨ªdo por una extra?a forma de ansia, culpa, b¨²squeda¡¡±.
?Y Dafoe ha cambiado? ¡°Me hago mayor¡±, responde Dafoe ri¨¦ndose. ¡°Necesito menos y soy m¨¢s flexible, m¨¢s curioso. Hay algo hermoso cuando eres m¨¢s joven e intentas descubrir qui¨¦n eres, quieres esto y esto, y yo, yo, yo¡ Despu¨¦s de un tiempo, ves que esas estrategias fracasan tan a menudo que dices ¡®que les den¡¯ y encuentras el placer en otras cosas. Te enfocas en emplear tus energ¨ªas de una forma m¨¢s inteligente¡±.
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