El Greco, una factor¨ªa fascinante
La ¨²ltima exposici¨®n dedicada al IV centenario del artista desmenuza la esencia de su obra
En el arte contempor¨¢neo, el concepto de taller o factor¨ªa ligada a un artista (desde Warhol hasta Jeff Koons, por poner dos conocidos ejemplos) no tiene ning¨²n misterio de cara al gran p¨²blico. Ellos deciden, ordenan y controlan las obras ayudados por equipos variables de especialistas. En el mundo del arte antiguo, el concepto de taller como centro de producci¨®n m¨¢s o menos masivo, es menos conocido, aunque se sabe que la mayor parte de los artistas importantes de los siglos XVI y XVII tuvieron un centro de producci¨®n propio en el que se realizaban las r¨¦plicas de las obras m¨¢s demandadas y se ayudaba al pintor en sus trabajos m¨¢s complejos.
En el caso de El Greco (1541-1614), contratado ya en 1577 por el de¨¢n de la catedral de Toledo, Luis de Castilla, por ser ¡°eminente en su arte y oficio¡±, se sabe que en 1585, la demanda de su obra era tal que abri¨® un taller estable para poder ejecutar sus codiciados retablos y sus pinturas devocionales, sobre las que hab¨ªa una fuerte demanda, tanto desde la sociedad eclesi¨¢stica, como la civil.
La exposici¨®n El Greco: Arte y oficio, que hasta el 9 de diciembre se puede ver en el museo de Santa Cruz de Toledo, cuenta a partir de 92 obras cuales son los elementos que hacen ¨²nico a El Greco y cu¨¢l fue el papel de su taller. El recorrido por la exposici¨®n es una profunda reflexi¨®n sobre su concepto de arte y manera de entender su oficio a trav¨¦s de obras esenciales de toda la producci¨®n del Greco en Espa?a. Ejemplo excepcional de personalidad art¨ªstica en continua evoluci¨®n, Leticia Ruiz, comisaria de la exposici¨®n, demuestra que estamos ante un inmenso creador cuya profunda originalidad radica en su capacidad para absorber f¨®rmulas y modelos ajenos y transformarlos hasta convertirse en iconos ¨²nicos e inolvidables.
La suave iluminaci¨®n de las obras colgadas sobre paredes de color burdeos y el sonido de Rediscovering Spain de fondo refuerzan un recorrido en el que los descubrimientos se suceden, se revela qu¨¦ obras le inspiraron y cu¨¢l fue el resultado final. Las detalladas cartelas ofrecen informaci¨®n fundamental para entender una exposici¨®n dividida en cuatro zonas.
Resulta impactante la contemplaci¨®n de ¡®Cristo crucificado¡¯, pintado hacia 1573
De entrada se le cuenta al visitante que a los tres meses de la muerte del Greco, su hijo Jorge Manuel redact¨® el inventario de los bienes paternos que permite imaginar la casa y, sobre todo, el taller del pintor: libros, dibujos, estampas, algunos modelos en yeso, cera o barro y unas 140 pinturas en diferente grado de terminaci¨®n ¡ªaparejadas, bosquejadas, sin concluir o acabadas¡ª que sugieren la secuencia completa de trabajo propia de una factor¨ªa art¨ªstica capaz de producir no s¨®lo pinturas, sino retablos completos con la implicaci¨®n de distintos oficios. Tanto esta relaci¨®n de bienes como el inventario que en 1621 present¨® el hijo del artista con motivo de su matrimonio son fundamentales para entender la din¨¢mica del Greco y su taller.
Se cuenta tambi¨¦n en el comienzo del recorrido de d¨®nde ven¨ªa el artista y cu¨¢l hab¨ªa sido su formaci¨®n. En su Creta natal conoci¨® la elaboraci¨®n de los iconos bizantinos, en Venecia aprendi¨® la t¨¦cnica del ¨®leo y el uso del lienzo como soporte que luego utilizar¨ªa de manera deslumbrante en Toledo; en Roma conoci¨® a fondo el sentido espacial, el paisaje, la perspectiva, la anatom¨ªa de las figuras y el retrato gracias a su virtuoso dominio del dibujo. Todo ello conform¨® un estilo propio que le convirti¨® en un aut¨¦ntico genio. Su visi¨®n de San Francisco, las Anunciaciones (impresionantes la del Thyssen y la del Bellas Artes de Bilbao colgadas una junto a la otra). No menos impactante resulta la contemplaci¨®n de Cristo crucificado (hacia 1573), una composici¨®n que elabor¨® durante sus a?os en Roma basada en un modelo anat¨®mico relacionado con Miguel ?ngel y en el que tambi¨¦n los expertos se?alan elementos pr¨®ximos a Tiziano por la idea de situar la figura en un paisaje muy bajo y dedicar un amplio espacio para un cielo poblado de potentes nubes. De este Cristo pueden verse numerosas versiones m¨¢s o menos similares realizadas por el propio Greco con o sin participaci¨®n del taller e incluso de su hijo. En este primer ¨¢mbito se encuentra una de las joyas de la exposici¨®n: cuatro delicados dibujos de los 250 que figuran en su inventario.
La muestra avanza por sus grandes retablos: historias sagradas realizadas con composiciones muy complejas en medio de las que est¨¢n los santos m¨¢s venerados por los cat¨®licos. La Santa Faz pintada sobre un escudo de madera, prestada por un coleccionista particular y escasamente expuesta, es una de las piezas m¨¢s relevantes de este espacio.
Los apostolados, trece lienzos con la figura de Cristo y sus ap¨®stoles, son las series m¨¢s populares de El Greco. En Toledo, despu¨¦s del concilio de Trento, se asent¨® la tradici¨®n de representar a los ap¨®stoles. Se sabe que realiz¨® un m¨ªnimo de ocho. En Toledo se encuentran habitualmente expuestos dos, en el Museo de El Greco y en la catedral, y para esta ocasi¨®n se ha conseguido traer otros dos: el del Museo de Oviedo (habitualmente en el Museo de Escultura de Valladolid) y el de Almadrones (Guadalajara), disperso desde que en 1946 fuera vendido por el obispado de Guadalajara (cuatro pinturas fueron adquiridas por el Estado para el Museo del Prado y cinco viajaron a Estados Unidos). Los rostros y las telas con las que se visten estos ¡°hombres feos¡±, como se les llamaba entonces, fueron para El Greco una oportunidad ¨²nica para ensayar los colores que consegu¨ªa a base de mezclas ins¨®litas y secretas. Tambi¨¦n requer¨ªan la ayuda plena de los artistas y especialistas de su taller. En una de las obras de esta secci¨®n, Pentecost¨¦s (hacia 1600), entre el grupo de personajes que ocupan la composici¨®n, se cree que a la derecha se encuentra el propio artista y su hijo.
Y como prueba irrefutable de la modernidad de Dom¨¦nikos Theotok¨®poulos, la exposici¨®n El Greco: Arte y oficio concluye con una instalaci¨®n fotogr¨¢fica, Retablo de retablos, firmada por Joaqu¨ªn B¨¦rchez, inspirada en sus planteamientos arquitect¨®nicos, y una creaci¨®n audiovisual sobre las ideas del arte y el oficio del pintor, realizada por Magoga Pi?as y el estudio Sopa de Sobre.
Babelia
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