Absuelto el exdirector del Cervantes de Atenas
Eusebi Ayensa fue acusado de prevaricaci¨®n y falsedad. El origen del caso est¨¢ en el contrato de alquiler de la sede del instituto
El exdirector y el exadministrador del Instituto Cervantes en Atenas (Gracia), Eusebi Ayensa y Adri¨¢n Bautista pueden respirar aliviados. La Sala de lo Penal del Supremo acaba de confirmar el sobreseimiento libre de ambos, confirmando el auto dictado por la Secci¨®n Tercera de la Audiencia Nacional, en contra del criterio del Abogado del Estado y del fiscal. Ayensa y Bautista estaban acusados de los delitos de falsedad de documento p¨²blico y prevaricaci¨®n y el juez de la Audiencia Nacional Javier G¨®mez Berm¨²dez hab¨ªa dictado incluso el auto de apertura de juicio oral, que ahora ha quedado anulado.
El origen del caso est¨¢ en el contrato de arrendamiento por 25 a?os que ambos firmaron en julio de 2008 por el inmueble donde se ubica la sede del Instituto Cervantes en la capital griega. En concreto, se compromet¨ªan a abonar una mensualidad de 79.000 euros a partir del 1 de enero de 2009 y se especificaba que las obras de adecuaci¨®n del local, por un importe de 2,9 millones de euros, correr¨ªan por cuenta del arrendador. Sin embargo, un a?o despu¨¦s modificaron tal contrato y se comprometieron a sufragar la mitad del coste de las obras, que se valoraban en 1,6 millones, mientras que el arrendador devolver¨ªa el alquiler ya abonado, 409.220 euros, pues el local a¨²n no hab¨ªa podido ser ocupado.
El fiscal consider¨® que este segundo contrato incurr¨ªa en falsedad, mientras que el abogado del Estado denunciaba la ocultaci¨®n del mismo a los responsables del Instituto Cervantes, que solo tuvieron conocimiento de su existencia tras el relevo del director, en 2012.
El Supremo se pregunta ¡°qu¨¦ dato de los all¨ª descritos [en el contrato] no se acomoda a lo acaecido¡± y alega que, aunque se hubiera incumplido alg¨²n requisito administrativo en su firma, este ser¨ªa f¨¢cilmente subsanable. Pero lo m¨¢s importante es que, como reconoce el propio Abogado del Estado, la modificaci¨®n del contrato no supuso ¡°perjuicio econ¨®mico alguno¡± para el Instituto Cervantes, sino solo un cambio de naturaleza contable, pues la cantidad abonada pas¨® de ser un gasto en arrendamiento a una inversi¨®n en edificio alquilado.
Los acusados sostienen, adem¨¢s, que la demanda ha hecho que el propietario del inmueble ¡ªque fue interrogado a trav¨¦s de una comisi¨®n rogatoria a Grecia¡ª rompiera un acuerdo alcanzado en 2012 para rebajar el precio del alquiler en unos 10.000 euros mensuales.
En todo caso, el Supremo ha condenado al Abogado del Estado, que actuaba en representaci¨®n del Instituo Cervantes, a abonar las costas del proceso.
Tras la presentaci¨®n de la denuncia, Ayensa fue destitutido como director del Instituto Cervantes en Fr¨¢ncfort (Alemania), a donde se fue desde Atenas.
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