Una comedia perdida de Shakes¡, digo de Lope
Lope da voz a dos grupos sociales desfavorecidos y se burla de la autoridad en una obra que recuerda a ¡®El perro del hortelano¡¯
?Recuerdan el revuelo que caus¨® hace cinco a?os el supuesto descubrimiento de que Eduardo III es una obra de Shakespeare, atribuci¨®n apoyada a la postre en el deseo de hacer caja o de ganar fama m¨¢s que en datos fehacientes? Todav¨ªa m¨¢s peregrina resulta la hip¨®tesis que atribuye al Bardo la autor¨ªa de Tom¨¢s Moro, tragedia escrita probablemente por Thomas Munday, y sin embargo no ha faltado quien la represente como original de Shakespeare, con el ¨¦xito escaso que era de prever, dada la deficiente calidad dram¨¢tica del texto.
Distinto es el caso de Mujeres y criados, comedia perdida de Lope de Vega que Alejandro Garc¨ªa-Reidy, profesor de la Universidad de Siracusa (EE. UU.), ha identificado con un manuscrito an¨®nimo conservado en la Biblioteca Nacional de Espa?a, y cuya autor¨ªa ha documentado minuciosamente en un trabajo de investigaci¨®n detectivesco que recuerda al que ha llevado a Alfredo Rodr¨ªguez-L¨®pez V¨¢zquez, catedr¨¢tico de la Universidad de La Coru?a, a atribuir con fundamento la paternidad de El Burlador de Sevilla a Andr¨¦s de Claramonte, en vez de a Tirso.
Mujeres y criados
Autor: Lope. Direcci¨®n: Rodrigo Arribas y Laurence Boswell. Madrid, Teatro Espa?ol. Hasta el 24 de mayo.
El t¨ªtulo Mujeres y criados aparece en un poder otorgado por Pedro de Vald¨¦s, autor de comedias (palabra que en el siglo XVII no era sin¨®nimo de dramaturgo, sino de director y productor), a un tercero para que denunciara a quien representare obras que su compa?¨ªa ten¨ªa en exclusiva. Tambi¨¦n figura en la lista de comedias propias que Lope incluy¨® en el pr¨®logo de El peregrino en su patria. Garc¨ªa-Reidy descubri¨® que en un cat¨¢logo decimon¨®nico de la Biblioteca Nacional figura un manuscrito an¨®nimo con dicho t¨ªtulo; consult¨® la base de datos Manos Teatrales, donde Margaret R. Greer cataloga la letra de los principales copistas de la ¨¦poca; cotejando, encontr¨® una comedia de P¨¦rez Montalb¨¢n cuya caligraf¨ªa coincide con la de Mujeres y criados, y vio que, por suerte, al final el copista estampaba su firma: Pedro de Vald¨¦s. Luego el copista de ambas era el autor que ten¨ªa los derechos de explotaci¨®n de la primera. Hallado este indicio, el an¨¢lisis m¨¦trico del manuscrito desvel¨® que la versificaci¨®n se corresponde exactamente con los usos de Lope en el per¨ªodo 1613-14, en el que escribi¨® El perro del hortelano, comedia basada, como Mujeres y criados, en un relato del Decamer¨®n.
Como en aquella, en esta Lope viene a predicar que el talento no guarda relaci¨®n con la clase social, que el amor no tiene porqu¨¦ ser entre iguales y que los de abajo (mujeres y criados) pueden volver las cosas del rev¨¦s, si se lo proponen. Pieza feminista avant-la-lettre, son ellas quienes toman las riendas de la situaci¨®n con inteligencia. Ana Villa y Luc¨ªa Quintana le imprimen encanto y pasi¨®n a las hermanas resolutas, Jos¨¦ Ram¨®n Iglesias consigue sin esfuerzo algo tan dif¨ªcil como que el gracioso lo sea de veras, Jes¨²s Fuente transmite el sentido del verso a placer y Jorge Gurpegui le da empaque a un personaje breve, en una obra coral. Karmen Abarca, la escen¨®grafa, hace un bonito gui?o al juego de puertas y cortinas de los corrales de comedias, tras las cuales los personajes aparecen y se desvanecen cual ayudantes de mago. La direcci¨®n de Rodrigo Arribas tiene momentos inspirados, y en la escena del acero hay una autoparodia que contiene el embri¨®n de lo que har¨¢ Mu?oz Seca siglos despu¨¦s.
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