La revancha de las novatas

Dando la nota (2012), primer largometraje de Jason Moore, se inspiraba libremente en un libro de no ficci¨®n sobre las competiciones estudiantiles de canto a cappella ¨CPitch Perfect: The Quest for Collegiate A Cappella Glory del periodista Mickey Rapkin- para proponer una eficaz s¨ªntesis de comedia adolescente de trazo grueso y relato de ¨¦pica pseudo-deportiva. La f¨®rmula funcion¨® a la perfecci¨®n, en buena medida gracias a un punto de vista distanciado e irreverente, pero, sobre, todo por la qu¨ªmica grupal de un elenco con muy buena qu¨ªmica, que ten¨ªa en Anna Kendrick ¨Cuna actriz que parece mejorar a cada paso que da- a su centro de gravedad, en Rebel Wilson a su particular barril de nitroglicerina c¨®mica y en Hana Mae Lee a su contrapunto de minimalista gracejo extraterrestre. Con tal precedente, una secuela quiz¨¢ no era s¨®lo inevitable, sino tambi¨¦n deseable, aunque esta Dando la nota: a¨²n m¨¢s alto prefiera mantenerse en el margen de seguridad de una mera repetici¨®n de la jugada que arriesgarse a ampliar el campo de posibilidades de su premisa.

La actriz Elizabeth Banks, que en la saga se encarga de interpretar a la locutora especializada en retransmisiones de competiciones a cappella Gail, asume ahora la direcci¨®n, sin otras credenciales previas que dos cortometrajes y el segmento que dirigi¨® para el trabajo colectivo de humor pol¨ªticamente incorrecto Movie 43 (2013). Su labor no logra ir m¨¢s all¨¢ de la correcci¨®n: una escena como la de la declaraci¨®n de amor cantada del personaje de Rebel Wilson, si bien h¨¢bilmente fracturada por un gag distanciador muy bien colocado, quiz¨¢ hubiese requerido un mayor sentido de la ¨¦pica y una mejor modulaci¨®n de la intensidad formal.

Precisamente la pareja c¨®mica que forman el personaje de Banks y su compa?ero de micro, encarnado con gran precisi¨®n por John Michael Higgins, aporta, en una de sus intervenciones, una clave para contextualizar la pel¨ªcula: las competiciones de canto a cappella, afirma Higgins en una de sus intervenciones tan causales como inopinadamente ofensivas, son refugio y oportunidad de autoestima para aquellos estudiantes que no tienen ni el f¨ªsico, ni la fortaleza para ser o bien cheerleaders o jugadores. Bajo ese prisma, Dando la nota: a¨²n m¨¢s alto puede ser considerada nieta lejana de ese temprano manifiesto nerd que fue La revancha de los novatos (1984).

El principal problema de Dando la nota: a¨²n m¨¢s alto es que se le transparenta demasiado la f¨®rmula, su mec¨¢nica y su estructura de peque?as sub-tramas ligadas al marco de la competici¨®n general que tendr¨¢ que redimir al grupo. Todo est¨¢ demasiado a la vista, como si contempl¨¢ramos un pez gato de cristal cerca de las costas tailandesas. Eso s¨ª, la capacidad de reciclar la extrema competencia profesional de los antagonistas en efecto c¨®mico es de aplauso.