Paco Ure?a cae herido en una dura corrida de Victorino en Vic-Fezensac

El diestro murciano Paco Ure?a ha resultado herido por su primer toro de la corrida celebrada en la ciudad francesa de Vic-Fezensac, en la que Manuel Escribano ray¨® tambi¨¦n a buen nivel a pesar de los silencios que recibi¨® al t¨¦rmino de sus tres actuaciones.

Con casi lleno, se lidiaron toros de Victorino Mart¨ªn, cinque?os, serios, bravos en los primeros tercios, y duros y exigentes en la muleta.

Manuel Escribano, silencio, silencio y silencio; Paco Ure?a, ovaci¨®n en el ¨²nico que mat¨®, y P¨¦rez Mota, silencio y divisi¨®n de opiniones tras dos avisos.

El diestro Paco Ure?a sufre 'una cornada interna y amplia en la parte baja de la nalga derecha, de trayectoria descendente', ha informado la oficina de prensa del torero.

El percance sobrevino cuando Ure?a toreaba el complicado victorino, de nombre Mecenas, sobre la mano derecha, momento en el que el astado peg¨® un derrote que derrib¨® al torero y, una vez en el suelo, le ech¨® mano, levant¨¢ndolo y teni¨¦ndolo otra vez a merced en el ruedo durante unos segundos.

Visiblemente herido, el torero se mantuvo en el ruedo hasta dar muerte al animal y, a continuaci¨®n, pas¨® por su propio pie a la enfermer¨ªa, donde fue revisado en primera instancia antes de ser trasladado finalmente al hospital de Auch (Francia), donde confirmaron que sufre una ¡®una cornada interna y amplia en la parte baja de la nalga derecha, de trayectoria descendente¡¯.

Ante la necesidad de intervenci¨®n quir¨²rgica, el diestro ha tomado la determinaci¨®n de viajar a Madrid, donde, precisamente, est¨¢ anunciado dentro de seis d¨ªas en el decimos¨¦ptimo festejo de la Feria de San Isidro.

La corrida que cerr¨® la feria de Vic-Fezensac no dej¨® pr¨¢cticamente ning¨²n apunte destacado a causa de la dura corrida de Victorino Mart¨ªn, que propici¨® que la tarde no pasara a la historia, si no llega a ser por la cornada que sufri¨® Paco Ure?a por el segundo.

Este toro fue bravo en el caballo, al que acudi¨® tres veces con fijeza, y, aunque amag¨® cosas buenas en el capote, se orient¨® enseguida en la muleta, corne¨® de mala manera a Ure?a.

De los cinco victorinos restantes, el cuarto, bravo en tres varas de categor¨ªa a cargo de Aitor S¨¢nchez, fue el de mejor condici¨®n para el toreo hasta que perdi¨® el casco de la mano derecha durante el tercio de banderillas. Fue una pena, porque a partir de este momento no pudo desarrollar su buena condici¨®n, lo cual no impidi¨® que Escribano le pudiese sacar muletazos muy buenos, de uno en uno.

Su primero fue una alima?a nada agradecida, y el sexto, muy duro tambi¨¦n, acab¨® entreg¨¢ndose a medias gracias al temple del torero, que traz¨® muletazos limpios de donde s¨®lo hab¨ªa coladas y tornillazos. Gran actuaci¨®n la de Escribano.

Menos acostumbrado a este tipo de embestidas, P¨¦rez Mota no se acopl¨® con ninguno de sus dos toros, ambos duros y muy exigentes.