La exposici¨®n ¡®Im¨¢genes autorizadas¡¯ revela la cara oculta de la ¡®ley mordaza¡¯
Las instant¨¢neas reflejan, seg¨²n el artista Daniel Mayrit, la incongruencia de la norma que entr¨® en vigor hace un a?o
Un acicate para remover conciencias en torno a una de las normas m¨¢s controvertidas aprobadas por el Gobierno de Mariano Rajoy, la Ley de Seguridad Ciudadana, m¨¢s conocida como ley mordaza. Es el objetivo de la?exposici¨®n fotogr¨¢fica?Im¨¢genes autorizadas?del artista Daniel Mayrit (Madrid, 1985).?Un a?o despu¨¦s de su entrada en vigor, Mayrit ha querido mostrar en la galer¨ªa Cero, de Madrid, auspiciada por PHotoEspa?a, su visi¨®n sobre una legislaci¨®n que es "un monstruo de muchas patas", seg¨²n el autor. Reconoce una "enorme dificultad" en retratar "una realidad invisible para el conjunto de la sociedad".
Las cortapisas impuestas por la ley constituyen el hilo conductor: Mayrit ha reelaborado im¨¢genes difundidas por las propias Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (en especial del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa); hacer las suyas propias parec¨ªa tarea casi imposible. "La ley perjudica a los profesionales de la informaci¨®n (ya sean fot¨®grafos, periodistas..), pero tambi¨¦n a ciudadanos normales, de la calle". El artista destaca el alcance de una norma que ha dejado ejemplos controvertidos debido a su "enorme ambig¨¹edad".
En las im¨¢genes retocadas por Mayrit aparecen figuras pol¨ªticas reconocidas, como el presidente Rajoy, el ministro del Interior, Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz, o el director general de la Polic¨ªa, Ignacio Cosid¨®. Todos ellos posan en actos institucionales con agentes de la Polic¨ªa Nacional, debidamente pixelados. El autor quiere dejar claro que su prop¨®sito no es criticar al Cuerpo Nacional de Polic¨ªa, sino m¨¢s bien al poder pol¨ªtico que est¨¢ detr¨¢s de la aprobaci¨®n de la ley. Define su trabajo como "una muestra en la que se mezclan el humor y la cr¨ªtica ¨¢cida".?
La representaci¨®n del poder y su imagen
En la obra de Mayrit abundan las fotograf¨ªas que revelan la imagen entre el poder de la imagen y el nexo con las altas instancias del Estado. "Gracias a la ley mordaza, el Estado ha pasado a monopolizar la representaci¨®n de s¨ª mismo; sin que nadie pueda mostrar otra visi¨®n diferente", explica Mayrit. Para el artista, la polic¨ªa utiliza la norma en su propio inter¨¦s, al publicar im¨¢genes de eventos "montados por ellos mismos", para despu¨¦s difundirlos a la opini¨®n p¨²blica, usando tambi¨¦n los medios de comunicaci¨®n. "Si aplic¨¢ramos el reglamento hasta sus ¨²ltimas consecuencias, ni siquiera esas im¨¢genes podr¨ªan publicarse", arguye con vehemencia.
El artista tambi¨¦n alude al "histrionismo" que, en su opini¨®n, envuelven algunas de las decisiones tomadas por el Ministerio del Interior. La instituci¨®n otorg¨® la Medalla de oro al m¨¦rito policial a la Virgen de Nuestra Se?ora Mar¨ªa Sant¨ªsima del Amor, en 2014. Gracias a esta condecoraci¨®n, esa advocaci¨®n de la Virgen pasar¨ªa a incluirse en el estamento policial. "Por ese motivo, tuvimos tambi¨¦n que retocar la cara de la estatua, porque no pod¨ªa ser representada", apunta. El resultado: una escultura de la figura religiosa con el rostro igualmente pixelado.
A pesar de su juventud, Daniel Mayrit fue galardonado por su anterior trabajo, denominado You haven't seen their faces, en la ¨²ltima edici¨®n del Premio Paris Photo Aperture. La exposici¨®n Im¨¢genes autorizadas podr¨¢ visitarse hasta finales de septiembre.
El 'caso ACAB'
Uno de los casos m¨¢s controvertidos tras la entrada en vigor de la ley mordaza tuvo como protagonista a Bel¨¦n Lobeto, afincada en Madrid, que fue sancionada por la polic¨ªa por llevar las siglas A.C.A.B. (all cats are beautiful o "todos los gatos son bellos", en sus siglas en ingl¨¦s) en su bolso. Los agentes, sin embargo, consideraron que el acr¨®nimo ocultaba un significado que atentaba contra la integridad de la polic¨ªa: "all cops are bastards" ("todos los polic¨ªas son unos cabrones"). Mayrit no comprende c¨®mo puede afectar a la seguridad una situaci¨®n as¨ª. "Por estas cosas, me plante¨¦ esta exposici¨®n. Quer¨ªa llevar al extremo esta ley, hasta dejar sus consecuencias en rid¨ªculo y que cayera por su propio peso a los ojos de cualquiera".
Babelia
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