¡°Quer¨ªa ser Tirone Pover¡±
Con m¨¢s de 80 pel¨ªculas a sus espaldas, Sacrist¨¢n recuerda que de peque?o no quer¨ªa ser actor; solo quer¨ªa salir en los cromos
Reci¨¦n cumplidos los 79, un juvenil Sacrist¨¢n celebra el haber sido elegido el vig¨¦simo mejor actor del mundo en una lista elaborada por el American Film Institute. Su esposa, Amparo, le ha enmarcado la carta que acaba de recibir de David Mamet, del que ahora protagoniza Mu?eca de porcelana. Mamet le felicita por haber tenido noticias, a trav¨¦s de su representante, de que el actor espa?ol ha entendido mejor la obra que el infalible Pacino. Vive un momento de plenitud: se siente querido por los j¨®venes colegas, y aunque diga estar todav¨ªa en 2? de Fern¨¢n G¨®mez, su maestr¨ªa es reconocida por la profesi¨®n. S¨®lo le entristece la actualidad pol¨ªtica, pero se refugia en la sal del recuerdo, un lugar que siente confortable. Y eso le pedimos, que haga memoria¡
¡ªMi primer recuerdo es la difteria a los tres a?os. La sensaci¨®n de asfixia y las cataplasmas que me pon¨ªa mi madre.
¡ªA mi padre lo conoc¨ª con seis a?os. Fui con mi madre a visitarlo al campo de concentraci¨®n de Toledo. Era un se?or con barba que me tom¨® en brazos y me besaba. Yo no pod¨ªa sentir emoci¨®n, sino extra?eza.
¡ªRecuerdo cuando vinimos a vivir a Madrid, a un piso para tres familias. En un cuarto dorm¨ªamos mi abuela, mis padres, mi hermana y yo. Mi padre, un campesino, llegaba de la f¨¢brica y en aquel pisito parec¨ªa un King Kong derrotado.
¡ªCuando estudiaba en la escuela de la Paloma nos preguntaron que quer¨ªamos ser y yo dije que artista. Mi padre, el Venancio, dijo, ?qu¨¦ hago, lo mato? Pero su actitud fue muy a lo John Wayne: mostrar indiferencia ante lo que le parec¨ªa un disparate.
¡ªYo me alimentaba de los pucheros de mi madre pero en igual medida del cine. Me desmay¨¦ viendo?Las mil y una noches. A partir de ah¨ª me diagnosticaron ¡°labilidad emocional¡±. Tengo un alma de portera que no me la merezco.
¡ªMi abuela sol¨ªa decir para prevenirme: ¡°Eres de miel y te van a comer las moscas¡±.
¡ªYo no quer¨ªa ser actor, quer¨ªa ser Tirone Pover (Tyrone Power) y salir en una colecci¨®n de cromos. Y lo consegu¨ª, en los a?os 70 fui cromo.
¡ªEl cine se ha desacralizado. Toda la vida del barrio estaba all¨ª. Yo observaba el mundo desde el gallinero.
¡ªAntes me corto un brazo que renegar de las pel¨ªculas que hice con los directores cercanos al R¨¦gimen. Ozores era un bendito. Y me trataron de puta madre. Aprend¨ª mi oficio, yo por mi cuenta le¨ªa a Stanislavski y a Brecht.
¡ªNo ha habido para m¨ª autor que me marcara m¨¢s que Camus.
¡ªGracias a Garci me convert¨ª en correa de transmisi¨®n del espa?ol normal: ni alto, ni bajo, ni guapo, ni feo, ni listo, ni tonto. He sido eso, un buen transmisor.
¡ªEn?Pierna creciente, falda menguante conoc¨ª a una bell¨ªsima Emma Cohen y ella me condujo a Fern¨¢n G¨®mez. Con Fernando no cab¨ªa la impostura, ten¨ªas que ser tal cual eras.
¡ªCuando me eligi¨® para?El viaje a ninguna parte, me dijo: ¡°Quiero que est¨¦s dos horas delante de la c¨¢mara y que no se te vea¡±. Y lo hice tan bien que ese a?o nadie reconoci¨® mi trabajo.
¡ªEl d¨ªa que muri¨® Franco estaba rodando El largo verano del 36. Lo celebramos a lo grande.
¡ªLa noche de la victoria de los socialistas, mi padre, el Venancio, un comunista que siempre hab¨ªa renegado de ellos, llor¨®.
¡ªNo quiero subirme a la tribuna, pero ante la impunidad de la derecha, observas d¨®nde est¨¢ ahora la izquierda y es desolador. El personaje de Mamet lo dice: ¡°El mundo est¨¢ lleno de gilipollas y muchos de ellos con derecho al voto¡±. ?Qu¨¦ necesitamos? Autocr¨ªtica.
David Mamet escribi¨® Pepe en la direcci¨®n de la carta que le envi¨®. El t¨ªo Pepe, porque de abuelo, aunque lo es, no tiene pinta.
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