Los cr¨ªmenes de la Australia vac¨ªa

Hay una Australia vac¨ªa, con amplios e inh¨®spitos parajes que disfrutan y sufren al tiempo de un clima extremo, de una naturaleza indomable. Lugares alejados del glamour de Melbourne, de la imagen de ¨¦xito modelo California con la que Australia se muestra al mundo. Lugares claustrof¨®bicos, ahogados por el calor, donde el alcohol, la frustraci¨®n y la violencia son ingredientes del d¨ªa d¨ªa. Este es el escenario elegido por Jane Harper para situar A?os de sequ¨ªa (Salamandra Black, traducci¨®n de Maia Figueroa), un poderoso debut en la ficci¨®n que utiliza la estructura de thriller para ahondar en los grandes problemas de la Australia contempor¨¢nea y con el que la autora acaba de ganar el Gold Dagger Award.

La violencia es distinta en estos ¨¢mbitos rurales, cerrados, que hay igual en Espa?a, en Australia o en Texas

¡°Comunidades donde la gente no se f¨ªa del pr¨®jimo y donde hay odio y resquemor se encuentran en cualquier parte, pero yo quer¨ªa situar la novela en Australia. All¨ª, el clima es esencial y las familias luchan mucho, en un ambiente muy aislado, para salir adelante. Son como la frontera con un mundo inh¨®spito, zonas aisladas, en las que la gente est¨¢ a expensas del clima, donde no hay mucho que hacer¡±, contaba Harper a EL PA?S en el Quais du Polar de Lyon a principios del pasado mes de abril.

Aaron Falk, polic¨ªa de Melbourne dedicado a estafas financieras, vuelve a su pueblo natal en medio de la estepa, un lugar asolado por una sequ¨ªa interminable. All¨ª decide investigar el brutal asesinato del granjero Luke, su mujer y su hijo peque?o e ir m¨¢s all¨¢ de la tesis oficial: que, amargado por la sequ¨ªa y ahogado por la crisis financiera, el que fuera su mejor amigo decidi¨® matar a su familia y quitarse de enmedio. Las pesquisas chocan con el desprecio de los lugare?os hacia quien se fue a triunfar a la ciudad, con los silencios c¨®mplices o amargados del entorno de las v¨ªctimas y con los errores y secretos del pasado del propio protagonista.

Comunidades donde la gente no se f¨ªa del pr¨®jimo y donde hay odio y resquemor se encuentran en cualquier parte

Dos comparaciones surgen de manera inevitable al leer y hablar de A?os de sequ¨ªa. Por un lado el Lejano Oeste americano, del que Harper tampoco es una entusiasta; por otro, los mitos oscuros y violentos de la Espa?a rural, de esa Espa?a vac¨ªa tan en boga y ante la que la autora australiana se muestra fascinada. Y ah¨ª, con una sonrisa que raras veces desaparece de su rostro, Harper reflexiona: ¡°Quiz¨¢s la violencia es distinta en estos ¨¢mbitos rurales, cerrados, que hay igual en Espa?a, en Australia o en Texas. Hay una presi¨®n extra y son lugares en los que no es f¨¢cil hablar de ello, buscar ayuda, y eso crea la tormenta perfecta¡±.

Harper, nacida en Manchester (Reino Unido) y cuya familia se traslad¨® a Australia cuando ella ten¨ªa ocho a?os, se vio sorprendida (que no arrollada tal y como se apresura en aclarar), por el ¨¦xito de su primera novela, ya traducida a 20 idiomas y que ha gozado de una gran acogida de lectores y cr¨ªticos en Estados Unidos. ¡°Nunca pens¨¦ ni siquiera que iba a ser publicada en Australia. Es extra?o y surrealista. Esto era un sue?o que empez¨® con un premio que gan¨¦ en un curso de correspondencia ¡±, cuenta con enga?oso candor.

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Parece que hay un alma inocente que se divierte con todo esto, como si fuera un juego al que mirar de lado, un premio. Sin embargo, tras el idilio inicial con ese curso de escritura la novela se estanc¨®. ¡°En el primer borrador ten¨ªamos a los personajes hablando y hablando. Era muy plano, con mucha informaci¨®n de segunda mano, mucho di¨¢logo que no iba a ninguna parte. Fue entonces cuando inclu¨ª flashbacks¡±. Gracias a este recurso, la autora pudo tambi¨¦n abordar otra de sus grandes obsesiones: el fardo que suponen nuestros errores pasados. ¡°Antes cre¨ªa que se pod¨ªan superar, estaba segura. Ahora ya no tanto. Veo que aunque cambiemos mucho, aunque nuestra vida vaya a otro extremo, tendemos a volver sobre nuestros pasos¡±.

La novela tiene una fuerza, un tremendismo, del que la autora no fue consciente mientras escrib¨ªa. ¡°No tuve miedo de ser demasiado oscura, pero mirando hacia atr¨¢s s¨ª me siento m¨¢s emotiva al respecto, veo que es m¨¢s triste. No la he vuelto a leer, aunque quiz¨¢s deber¨ªa hacerlo¡±, relata esta periodista con gusto por la escritura directa.

Harper tiene que partir, presionada por la agenda estajanovista que marca el mayor festival de novela negra Europa, pero tiene tiempo para a?adir, sin sonrisas, una advertencia: ¡°Si hay un sitio donde el cambio clim¨¢tico ya afecta a la vida de la gente, donde realmente ha cambiado ya y todo el mundo puede ver sus efectos ese es Australia¡±.

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Autor:?Jane Harper.?

Editorial: Salamandra (2017).

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