Atrapada en el ¡®slasher¡¯

Algunas pel¨ªculas parecen ser la materializaci¨®n de una ocurrencia de cafeter¨ªa, a la hora del recreo, en una Escuela de Cine de Los ?ngeles: la versi¨®n posadolescente de eso que los ejecutivos del Hollywood de los 80 llamaban high concept y que consist¨ªa en ce?ir la naturaleza de un proyecto en una sola idea que cupiera en la frase m¨¢s concisa posible. La suma de Atrapado en el tiempo (1993) y la arquet¨ªpica escena de todo slasher en la que un psic¨®pata asesina a una chica rubia es la f¨®rmula b¨¢sica que sostiene Feliz d¨ªa de tu muerte, tal y como la propia pel¨ªcula tiene el noble gesto de reconocer en su pen¨²ltima secuencia. La buena noticia es que tan precario origen no invalida el poder de seducci¨®n de este cuarto largometraje de Christopher Landon. La mala noticia es que quien busque algo m¨¢s que mero ingenio tendr¨¢ que buscar en otro lado.

Ser¨ªa mucho pedir que el cineasta hubiese convertido este proyecto en la versi¨®n Halloween de los Ejercicios de estilo de Raymond Queneau, pero hubiese sido una petici¨®n algo m¨¢s realista que intentara no limitarse a seguir el arco dram¨¢tico de toma de conciencia (del propio narcisismo) y redenci¨®n que recorr¨ªa el personaje de Bill Murray en la comedia de Harold Ramis. Aqu¨ª, la protagonista concilia su personal camino de perfecci¨®n con la din¨¢mica del whodunit con inevitable sorpresa final.

La obra resultante se integra con dignidad, pero sin brillantez, ni excesivo ¨ªmpetu cuestionador, en la l¨ªnea vocacionalmente autorreflexiva de Scream (1996) y The Final Girls (2015). El experimento no le sirve a Landon para interrogarse sobre los modos de representaci¨®n del g¨¦nero, pero su viaje en el Tren de la Bruja, con recorrido en forma de constante loop, luce, por lo menos, un en¨¦rgico sentido del espect¨¢culo.