Fortes, torero heroico, joven, maduro, mil veces ca¨ªdo y m¨¢s vivo que nunca
El diestro malague?o inicia la temporada 2018 con los toros de Victorino en Las Ventas
Tiene m¨¦rito Sa¨²l Jim¨¦nez Fortes (M¨¢laga, 1990), torero de cuna, hijo de una torera y un banderillero. M¨¦rito por ser torero valiente, por haber flirteado m¨¢s de una vez con la muerte y hacerle un gui?o a la vida, por haber superado adversidades solo reservadas para los h¨¦roes de pel¨ªcula, por tener agallas para levantarse de nuevo y seguir intent¨¢ndolo.
Este Fortes ¨Cas¨ª se anuncia en los carteles¨C tiene solo 28 a?os, pero parece un hombre hecho y derecho, maduro y veterano, curtido en mil batallas y con la experiencia de una corta existencia, vivida a miles de revoluciones. Serio, reflexivo, t¨ªmido, tez morena, mirada penetrante, semblante duro y cara de cowboy del oeste, con un espacio corto para la sonrisa, pero marcado el rostro por lo que parecen cicatrices del alma. Su voz es grave, se detiene para pensar lo que dice y analiza su trayectoria con un responsable y sorprendente sentido de la autocr¨ªtica. Y habla con naturalidad de una enfermedad compa?era, la epilepsia, que le obliga a una continua medicaci¨®n y a un estricto orden de vida. Las crisis, que a veces le toman por sorpresa, le afectan, y mucho, a su concentraci¨®n torera.
Surgi¨® de su tierra natal con fundamento para liderar una pr¨®xima generaci¨®n de figuras. Tras una prometedora carrera como novillero, tom¨® la alternativa en agosto de 2011 en Bilbao junto a El Juli y Talavante, y dos a?os m¨¢s tarde, la confirm¨® en Madrid con Morante y Manzanares. Aliados y c¨®mplices todos para la consagraci¨®n, pero el libreto de su curr¨ªculum le ten¨ªa preparadas sorpresas inesperadas. Se sucedieron volteretas que no figuraban en el guion, heridas y parones siempre inoportunos, dos grav¨ªsimas cornadas en el cuello el 14 de mayo de 2015 en la plaza de Las Ventas que, seg¨²n sus palabras, lo emparentaron con San Pedro. Tres meses despu¨¦s, el 16 de agosto, en la localidad salmantina de Vitigudino otro toro lo empiton¨® en la misma zona con claras intenciones de firmar el acta de defunci¨®n.
Pero ah¨ª sigue Fortes, contra todo pron¨®stico, con la firme decisi¨®n de ser un buen torero. Volvi¨® a enfundarse el traje de luces, reapareci¨® en Vistalegre en febrero de 2016, y en ello continua con encomiable decisi¨®n.
¡°Estoy en el lugar que merezco; podr¨ªa decir lo contrario, pero no¡±
Quiere ser un buen torero y no olvida lo que ¨¦l llama ¡°enriquecimiento personal e intelectual¡±. Tiene aparcados los estudios de ingenier¨ªa industrial, quiere perfeccionar su ingl¨¦s, le gusta la novela y estudia por afici¨®n f¨ªsica, qu¨ªmica y matem¨¢ticas.
Ha cambiado de apoderado ¨Cahora dirige su carrera Nacho de La Serna, un joven y buen periodista, de familia taurina¨C, ha cambiado su residencia a Madrid y ah¨ª, junto a Las Ventas, aguarda Fortes el inicio de un a?o especial ¨Cotro m¨¢s¨C, henchido de ilusi¨®n, no exento de incertidumbre.
Esta tarde, Domingo de Ramos, inaugura su temporada en Madrid ante una corrida de Victorino Mart¨ªn. Volver¨¢ el 11 de mayo en plena Feria de San Isidro y el 17 de junio pisar¨¢ de nuevo la arena madrile?a para cerrar un ciclo cargado de responsabilidad.
Tiene Fortes las espadas en todo lo alto. Ser o no ser. ¡°Iniciar el a?o con victorinos es un reto que me apetece mucho¡±, confiesa. ¡°S¨¦ que voy a pasar mucho miedo, que es un compromiso muy dif¨ªcil, pero tambi¨¦n una suerte¡±. ¡°No tengo en la agenda m¨¢s que Madrid, y a partir de ah¨ª se deben abrir todas las puertas¡±, insiste.
Guarda silencio antes de analizar su carrera como torero, pero parece tenerlo claro.
¡°Miro hacia atr¨¢s y me siento en parte orgulloso de lo conseguido, aunque no pleno ni satisfecho; he superado cornadas fuertes y muchos desenga?os, me he visto perdido sicol¨®gica y econ¨®micamente; y sigo adelante a pesar de las cogidas y de la epilepsia, que forma parte de m¨ª y me condiciona. Por todo ello estoy orgulloso¡±.
¡°Me acuesto y me levanto con los victorinos; parece como si el toreo fuera de color c¨¢rdeno¡±
- ?Tanto le ha hecho sufrir la profesi¨®n?
- La profesi¨®n, no; la he elegido yo y, adem¨¢s, no quiero analizarla desde una perspectiva victimista. He apostado por personas que me han ayudado mucho, pero que tambi¨¦n me han desenga?ado. Pero es mi responsabilidad y la asumo. Y digo m¨¢s: no cambiar¨ªa pr¨¢cticamente nada de mi carrera, me pongo en el lugar de cualquier figura del toreo y no me cambio por nadie¡±.
¡°Tambi¨¦n me he mantenido fiel a mi pensamiento, a mi toreo¡±, insiste. ¡°A pesar de algunos momentos en los que solo busqu¨¦ resultados y perd¨ª calidad, mantengo la inocencia delante del toro¡±.
Sorprende por inusual la sinceridad del torero cuando analiza el lugar que ocupa en el toreo, lejos de sus previsiones, cuando inicia su octava temporada como matador de toros.
¡°S¨ª, estoy en el lugar que merezco¡±, suelta sin remilgos. ¡°Podr¨ªa decir lo contrario, pero no. Distinto es lo que creo que conseguir¨¦ o lo que pudiera haber conseguido si hubiera dado los pasos necesarios. Al final, creo que el toro pone a cada uno en su sitio. No ser¨ªa justo, por ejemplo, que me quejara de que no tenga 30 corridas firmadas para 2018, porque he apostado por enriquecer mi toreo, que es lo que necesito. En otras palabras, ocupo el puesto que merezco, el que yo he elegido, aunque es cierto que en algunos momentos me he visto perjudicado por las circunstancias¡±.
-?Ha tenido alguna vez la tentaci¨®n de abandonar?
-S¨ª, en varias ocasiones. Cuando uno se ve fracasado en la plaza, no se siente realizado y concluye que no sirve el esfuerzo de toda una vida, te asalta el des¨¢nimo. Hubo una ¨¦poca en que la que casi ca¨ª en una depresi¨®n porque personalmente estaba mal, sufr¨ª un palo econ¨®mico brutal y ve¨ªa que aquello se me iba¡
-S¨ª, ocurri¨® despu¨¦s de la cornada de Vitigudino, antes de tomar la decisi¨®n de reaparecer. Recuerdo que me preguntaba much¨ªsimas cosas. Pero era algo evidente, claro¡
-Ciertamente, fueron dos cornadas en el cuello muy graves y seguidas¡
-Cuesta mucho sobreponerse, la verdad. Todos sabemos que ir a la plaza es un riesgo vital, pero lo asumes desde otro plano. Pero cuando has visto el sufrimiento de los que te quieren, ponerte de nuevo delante del toro es una emoci¨®n muy intensa, cuando haces el pase¨ªllo se te agolpan demasiadas sensaciones.
Fortes recuerda como uno de los d¨ªas m¨¢s emotivos de su vida aquel en que decidi¨® probarse en el campo tras la segunda cornada.
-S¨ª, el ¨²nico reto era quedarme quieto porque el instinto de conservaci¨®n es muy fuerte.
Despu¨¦s, en febrero de 2016, reapareci¨® con bien en la plaza de Vistalegre, y en San Isidro volvi¨® a Las Ventas. Y, llegado este punto, el torero se pone a¨²n m¨¢s serio y musita¡
-La ¨²ltima vez que hab¨ªa salido andando de la plaza de Madrid fue en 2013. El Domingo de Resurrecci¨®n de 2014 sufr¨ª una cogida y otra en la feria, la tarde de la grav¨ªsima cornada a David Mora, en 2015, la del cuello¡ Vamos que vestirte de luces y plantarte en la puerta de cuadrillas a sabiendas de que has ido a la enfermer¨ªa en las dos ¨²ltimas ocasiones es un trago.
Fortes afirma que la vida le ha ense?ado a pasar p¨¢gina con rapidez y transformar la adversidad en algo positivo.
-He aprendido muy joven que la vida se te puede ir en cualquier momento, y eso es una suerte. Cuando ves tan cerca a San Pedro, y de pronto te dan la oportunidad de seguir, la existencia se ve de otra manera, y eso es una suerte, realmente.
-?Hay un torero nuevo despu¨¦s de tantos contratiempos?
-Sin duda, porque soy una persona nueva. Comprend¨ª que no me sent¨ªa orgulloso de lo realizado, y si tan alto era el precio que deb¨ªa pagar para seguir toreando, decid¨ª ser el torero que quiero ser. S¨ª, hubo un cambio de mentalidad, un salto cualitativo importante. Mi meta es torear mejor, sin dejar de ser un torero valiente; quiero que se me reconozca como un buen torero.
-Y, encima, la enfermedad¡
-Mi cuerpo es como es. La epilepsia me ha obligado a potenciar la velocidad de reacci¨®n, los reflejos y la coordinaci¨®n; y a ser muy disciplinado con los horarios, la comida, el sue?o¡
-Pero el tratamiento no impedir¨¢ que sue?e estos d¨ªas con los victorinos¡
-Los tengo muy interiorizados. Me acuesto y me levanto con ellos, parece como si el toreo fuera de color c¨¢rdeno¡
S¨ªguenos en Twitter
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.