Los Himbas, los ¨²ltimos n¨®madas del siglo XXI
La fot¨®grafa mexicana Daniela C¨®rdova presenta una exposici¨®n sobre esta tribu africana
Una mujer con la piel cobriza se asoma en el horizonte de una des¨¦rtica regi¨®n del norte de Namibia, en ?frica. Porta un adorno sobre la cabeza, un taparrabos de tela y vistosos collares. Un peque?o ni?o con una indumentaria similar sigue sus pasos. Ambos han aprendido a caminar sobre el inh¨®spito terreno como sus ancestros, los Himbas, una tribu semin¨®mada que ha conservado un estilo de vida sustentado en la caza y la recolecci¨®n. Silente, casi imperceptible, la fot¨®grafa mexicana Daniela C¨®rdova inmortaliza su andar. La escena es forma parte de la exposici¨®n: The Himbas: Nomads Of The Arid Eden que se presenta del 20 al 22 de abril en Casa Maauad,en la Ciudad de M¨¦xico.
Hace dos a?os, un par de art¨ªculos en Internet y un documental sobre esta tribu bastaron para cautivar a la artista de 32 a?os. Los Himbas, son una aldea que sobrevivi¨® al genocidio alem¨¢n a principios de 1904. Enclavados en la regi¨®n des¨¦rtica de?Kunene, untan su piel con una mezcla de mantequilla, grasa y ocre rojo para protegerse de los insectos y del intenso sol. Viven en casas de hojas de palma, esti¨¦rcol de ganado y barro.?En un entorno donde los hombres habitualmente se alejan para cazar y pastorear al ganado, las mujeres est¨¢n a cargo de casi todas las tareas dom¨¦sticas y del trabajo en la aldea: atienden a los ni?os, orde?an vacas, acarrean agua y construyen sus hogares.
A medida que avanzaba en sus indagaciones C¨®rdova sent¨ªa cada vez m¨¢s atracci¨®n por ser testigo, en primera l¨ªnea de esta comunidad africana.?Todo el trabajo previo fue recompensado cuando logr¨® a estar a metros de esas mujeres y de esos ni?os que tambi¨¦n la ve¨ªan a ella con curiosidad. Aunque el gobierno local solo le permiti¨® permanecer unas horas con la tribu, ese tiempo fue suficiente para capturar el papel preponderante de las mujeres Himba en la conservaci¨®n de sus tradiciones.¡°Me impactaron las miradas. Hasta de las ni?as tienen miradas muy fuertes, ves mujeres muy fuertes, muy luchonas¡±, recuerda la fot¨®grafa.
Estas miradas desafiantes se asoman continuamente en el trabajo de C¨®rdova. ¡°No me gusta dirigir, me gusta alejarme, observar, y de lejos, capturar su vida diaria, no quer¨ªa hacer retratos de ellas, perfectos¡±, explica la artista sobre su trabajo. Durante su jornada constat¨® que la uni¨®n entre las mujeres de la tribu?les permit¨ªa conservar su legado, un mensaje, que a su parecer deber¨ªa replicarse en M¨¦xico.?¡°Todas las mujeres somos sostenedoras de las ra¨ªces, es un instinto que tenemos, sea cualquier cultura, me gustar¨ªa transmitir el poder que tenemos las mujeres unidas¡±, a?ade.?
Para C¨®rdova esta traves¨ªa fue un viaje a otro tiempo y a otra concepci¨®n de la vida, donde el chaman o sacerdote de la comunidad decide el siguiente paso. Un choque desafiante a la modernidad. Un cisma profesional y personal para la fot¨®grafa. ¡°Aunque siempre he sido muy libre y mi trabajo lo refleja y soy alguien que le gusta la aventura, sent¨ªa que no estaba viviendo mi vida al 100 , y la verdad es que ver con cu¨¢nto orgullo esta tribu gu¨ªa a su manera me impuls¨® mucho en mi trabajo y mi vida personal¡±, confiesa C¨®rdova.
Su periplo en el continente africano se ha plasmado en un libro con 72 fotograf¨ªas donde la autora mezcla sus mejores im¨¢genes con poemas de?Sylvia Plath y frases de?Simone de Beauvoir. La exposici¨®n gratuita en la capital mexicana durante este fin de semana surge por la necesidad de la obra de acercar su obra.??¡°Es muy importante que en mis im¨¢genes se refleje ese orgullo de los Himbas y que lo tengamos nosotros en nuestras propias vidas y que no le tengamos miedo a lo diferente¡±, insiste.
Con cinco a?os de experiencia, la fot¨®grafa mexicana ya prepara su pr¨®ximo viaje durante a Mongolia. Las fotograf¨ªas son su veh¨ªculo para compartir, para mostrar a aquellos que no podr¨¢n viajar hasta ?frica otros estilos de vida. En un balance de este proyecto, C¨®rdova asegura que en un entorno donde predominan los juicios a lo distinto, el mostrar otras realidades, otras maneras de vivir pueden llevar a una mayor comuni¨®n y entendimiento?entre culturas y personas.
Babelia
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