Cultura traslada a los afectados que repensar¨¢ la uni¨®n del Real con la Zarzuela
Jos¨¦ Guirao se sienta con todas las partes para valorar el Real Decreto reci¨¦n aprobado por el PP y plantea suspenderlo durante un tiempo para renegociar
La uni¨®n que qued¨® cerrada entre el Teatro Real y el de la Zarzuela vuelve a abrirse. Tal y c¨®mo asegur¨® en la entrevista que ofreci¨® ayer EL PA?S, Jos¨¦ Guirao, nuevo ministro de Cultura, quiere volver a pensar varios aspectos de la misma pra llegar a ella con las m¨¢ximas garant¨ªas. Concretamente, Guirao utiliz¨® un verbo: ¡°Sosegar¡±. Quiz¨¢s porque en su toma de posesi¨®n se encontr¨® una manifestaci¨®n en la puerta. La de los trabajadores de la Zarzuela exigiendo volver a su estatus dentro del ministerio de Cultura y no en el marco de una fundaci¨®n.
Estas fueron sus palabras: ¡°Voy a sosegar el tema del Teatro Real y la Zarzuela. Creo que hay que madurarlo m¨¢s¡±. A la pregunta de si se planteaba revertir el decreto afirm¨®: ¡°Si hace falta, s¨ª. Creo que se merece una reflexi¨®n¡±. Y eso ha sido justamente lo que les ha trasladado ayer en su reni¨®n a los sindicatos.
Por ahora quiere enterarse y recibir a todas las partes, algo que llevar¨¢ a acabo hasta el mi¨¦rcoles de la semana que viene. Justo dos meses antes, el pasado 20 de abril, el Gobierno anunciaba la aprobaci¨®n de la norma. El teatro dependiente del Instituto Nacional de Artes Esc¨¦nicas y de la M¨²sica (Inaem), del ministerio de Cultura, pasaba a la plataforma que gestiona el Real y que con la nueva incorporaci¨®n cambiaba de nombre: Fundaci¨®n Nacional del Teatro Real y del Teatro de la Zarzuela.
Caso reabierto
El pasado 10 de marzo salt¨® a los medios. El Gobierno del PP pretend¨ªa unir en un gran proyecto l¨ªrico al Teatro Real con el de la Zarzuela. Las conversaciones se hab¨ªan llevado a cabo entre la secretar¨ªa de Estado y los responsables del Real sin apenas participaci¨®n del Instituto Nacional de Artes Esc¨¦nicas y de la M¨²sica (Inaem) ni del director de la Zarzuela, Daniel Bianco. Desde el Real pretend¨ªan volver al planteamiento inicial de 1995, con ambos teatros bajo la misma gesti¨®n. Cuando los sindicatos se enteraron, poco despu¨¦s de que le fuera comunicada la intenci¨®n a Bianco, montaron paros y movilizaciones en todo el Inaem. Su lema se redujo a algo muy simple, a medio camino entre la verdad y la mentira: que la zarzuela siguiera siendo p¨²blica. Lo iba a ser de todas maneras, pero bajo la categor¨ªa de fundaci¨®n y no exclusivamente al amparo del ministerio. Pero la campa?a cal¨® y las partes promotoras se dieron prisa para acallar las protestas que iban en aumento. Los artistas tambi¨¦n se movilizaron y se produjo entre cantantes, actores, m¨²sicos, directores de escena un debate. Finalmente el Real Decreto fue aprobado un mes despu¨¦s y las movilizaciones empezaron a decaer. Hasta que el cambio de Gobierno reactiv¨® las reivindicaciones sindicales que han propiciado una renegociaci¨®n de la norma. El convenio laboral es lo m¨¢s peliagudo. La promoci¨®n y el vigor del g¨¦nero, importa menos.
Antes de la aprobaci¨®n, los trabajadores dependientes del Inaem mantuvieron paros y manifestaciones durante un mes. La reivindicaci¨®n de mantener la titularidad p¨²blica cal¨® en varios aficionados y marc¨® un inicio de primavera de tensi¨®n. Con el cambio de Gobierno, las movilizaciones han regresado. Parece que con efecto inmediato. En su segundo d¨ªa de despacho, Guirao los recibi¨® y a la salida se mostraban muy contentos con el tono y el recibimiento inmediato. "Ha sido un encuentro muy cordial", dijo Jes¨²s ?lvarez, de CC OO. Este miembro del comit¨¦ cont¨® que le hab¨ªan planteado directamente la anulaci¨®n del Real Decreto y que ¨¦l se encontraba ante dos posibilidades. Bien lo que plantean los sindicatos o suspender su aplicaci¨®n durante un plazo para volver a negociar.
El lunes, el ministro tiene previsto reunirse con Gregorio Mara?¨®n, impulsor de la uni¨®n y presidente de la Fundaci¨®n, que se mostraba ayer a favor de reconducir algunos aspectos y negociar para que todo el mundo se sienta c¨®modo. Guirao tambi¨¦n escuchar¨¢ la opini¨®n de Montserrat Iglesias, directora del Inaem, que le dar¨¢ un preciso informe elaborado a ra¨ªz del conflicto. Desde el patronato, Mara?¨®n esgrime que no se ha hecho m¨¢s que volver al punto de partida: ¡°A la idea inicial con la que se cre¨® la fundaci¨®n en 1995, antes de la inauguraci¨®n del Real en 1997¡±. En los estatutos se contemplaba la uni¨®n de ambos teatros. Pero la Zarzuela regres¨® al ministerio poco despu¨¦s, con la llegada de Aznar al poder, por deseo expreso del entonces secretario de Estado de Cultura, Miguel ?ngel Cort¨¦s.
El caso concreto del conglomerado l¨ªrico puede que sirva para otro general. Un nuevo plan de viabilidad para el Inaem. La gesti¨®n de sus unidades sufre unas rigideces insoportables que ahogan muchas oportunidades de giras, contrataciones o retransmisiones audiovisuales. Los convenios convierten a los teatros, compa?¨ªas de danza y la Orquesta Nacional en enjambres m¨¢s burocr¨¢ticos que art¨ªsticos. Todos los directores de unidades claman por m¨¢s flexibilidad y un modelo de gesti¨®n tan p¨²blica como aut¨®noma, con posibilidades de patrocinios y otro tipo de contratos.
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