Futbolistas o astronautas
Cuando vi el tuit de Casillas cuestionando la llegada del hombre a la Luna pens¨¦ que se trataba de una broma
Confieso que cuando vi por primera vez el tuit de Iker Casillas cuestionando la llegada del hombre a la Luna pens¨¦ que se trataba de una broma. Como broma me hizo much¨ªsima gracia. Imaginar que el tipo se hab¨ªa bebido unas copas con sus amigos, hab¨ªan comenzado a desparramar, que si la Luna de Sangre, los eclipses, que si el ministro astronauta, y hab¨ªan decidido compartir el cachondeo et¨ªlico con los casi nueve millones de seguidores del portero, me cuadraba con su talante de hombre simp¨¢tico y jovial. Y le re¨ª la ocurrencia. Pens¨¦ que si bien Twitter acoge a diario el tono vil y carro?ero, tambi¨¦n ha creado un g¨¦nero humor¨ªstico propio, agudo y r¨¢pido con el que a menudo pasamos muy buenos ratos. Qu¨¦ inocente fui: Casillas hablaba en serio. Quer¨ªa ¡°elevar¡± el debate, transmitir sus dudas a la hinchada: ?Vota, pueblo, vota, este es el momento! En un principio me pareci¨® desproporcionado que le reconviniera Pedro Duque, el ministro de Ciencia, pero luego comprend¨ª que qui¨¦n mejor que ¨¦l en su calidad de astronauta para darle un tir¨®n de orejas a quien goza de una presencia p¨²blica y posee, lo quiera o no, poder de influencia.
No s¨¦ si Casillas tendr¨¢ intenci¨®n de contarles a sus ni?os, cuando crezcan un poco, las dudas que le asaltan sobre el ¨¦xito de aquellos astronautas del 69. Ya se sabe que los padres hablan sin control en las sobremesas. Si es amante de las teor¨ªas conspiranoicas, tal vez a?ada el renovado cuento de los extraterrestres, porque si bien yo pensaba, inocente sin remedio, que los marcianos hab¨ªan perdido la popularidad de la que gozaban cuando era ni?a, resulta que han regresado con m¨¢s fuerza que nunca. En mi casa se segu¨ªa con gran pasi¨®n a Erich von D?niken, pionero en difundir la idea de que la Tierra fue visitada en la antig¨¹edad por los extraterrestres y que a estos les debemos hasta la construcci¨®n de las pir¨¢mides. Si tu padre te cuenta esta historia una noche de verano y a?ade adem¨¢s que ser¨ªa muy mezquino por nuestra parte creernos los ¨²nicos habitantes de un universo infinito, si tu padre se recrea en esas fantas¨ªas, provoca en una mente inmadura una mezcla de desasosiego y excitaci¨®n. Estoy convencida de que Spielberg, a trav¨¦s de E.T. dese¨® hacer realidad un recurrente deseo infantil muy setentero: el de entablar una amistad clandestina con un ser de otro planeta.
El a?o que viene se cumplen 50 a?os (supuestamente) que el hombre pis¨® la Luna. Estoy en una cena con amigos... discutiendo sobre ello. Elevo la tertulia a p¨²blico! Cre¨¦is que se pis¨®? Yo no!
— Iker Casillas (@IkerCasillas) July 23, 2018
Como cuento es magn¨ªfico, sin duda, pero de los cuentos y de la adolescencia tambi¨¦n se sale, a no ser que tengas una tendencia a dejarte embaucar por teor¨ªas fantasiosas. Yo pens¨¦ que Von D?niken hab¨ªa desaparecido, yo qu¨¦ s¨¦, porque lo hubieran abducido en un platillo volante, siendo esta la manera m¨¢s l¨®gica de irse de este mundo de un ap¨®stol de la marcianada. Pero no. No solo vive entre nosotros, sino que este mismo mes estuvo en California en un congreso de Extraterrestres de la Antig¨¹edad promovido por un programa, Ancient Aliens, de History Channel, al que acudieron 10.000 personas. 10.000 almas llegadas de todas partes del mundo para, previo pago de su entrada, escuchar conferencias sobre c¨®mo influyeron los aliens en nuestra idea de la belleza, c¨®mo extinguieron a los dinosaurios o c¨®mo la tecnolog¨ªa extraterrestre ayud¨® a Hitler a trazar su plan de apoderamiento del planeta. Entre el p¨²blico hab¨ªa padres y madres que aseguraban estar ah¨ª para luego, en casa, actuar en consecuencia, educando a sus hijos en el esp¨ªritu cr¨ªtico para que no se dejaran enga?ar por lo que vende la televisi¨®n, cosas del tipo ¡°el hombre ha pisado la Luna¡±.
Fue precisamente aquel ¡°peque?o paso para un hombre pero un gran salto para la Humanidad¡± el punto de inflexi¨®n de todas estas teor¨ªas seudocient¨ªficas; la inauguraci¨®n de la gran desconfianza hacia lo que los medios contaban masivamente. Y esta ¨¦poca presente es el h¨¢bitat ideal en el que fluyen las teor¨ªas conspiranoicas. Internet bulle de p¨¢ginas que nos alientan a pensar que la Tierra es plana y no absurdamente redonda, como han tratado de hacernos creer. Tambi¨¦n este asunto se abord¨® en el congreso californiano. Ser¨ªa de risa si no fuera porque la irracionalidad es un boyante negocio para los charlatanes y puede provocar un tremendo da?o psicol¨®gico en quien est¨¦ dispuesto a creer, por ejemplo, que con este eclipse lunar que a punto est¨¢ de producirse (mientras escribo este art¨ªculo) se acaba el mundo. Sea por acabamiento del mundo o por tratarse del ¨²ltimo domingo de julio, esta que escribe se va de vacaciones.
Los hechos no cambian opine la gente lo que opine. Los aparatos que llevaron, las huellas, los reflectores l¨¢ser seguir¨¢n estando all¨ª. La foto que despert¨® el sentimiento de conservaci¨®n de la Tierra sigue existiendo. https://t.co/uErsTOHkbh https://t.co/rlBMqfUwcm
— Pedro Duque (@astro_duque) July 24, 2018
Con estos asuntos podemos bromear pero no son banales. Suponen un ataque serio a la salud mental de personas desprotegidas ps¨ªquicamente que pueden llevar muy lejos sus obsesiones y miedos. En 1977, el astrof¨ªsico Carl Sagan realiz¨® un documental para desmentir las fantas¨ªas extraterrestres de D?niken y compa?¨ªa y les ret¨® con la c¨¦lebre frase: ¡°El que se atreve a exponer una teor¨ªa extraordinaria tiene que ofrecer tambi¨¦n una explicaci¨®n extraordinaria¡±. As¨ª que Pedro Duque hizo lo que deb¨ªa, afirmar que lo de Armstrong fue un alunizaje y lo de Casillas un alucinaje.
Por cierto, que los ni?os hoy prefieren ser futbolistas a astronautas. Les sale m¨¢s a cuenta.
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