El padre de la ¡®bossa nova¡¯ gana un pleito millonario por sus derechos de autor

D¨¦cadas despu¨¦s de alumbrar la bossa nova, el brasile?o Jo?o Gilberto acaba de obtener otra victoria en el viejo pleito sobre los derechos de autor de sus primeros discos. Un tribunal de R¨ªo de Janeiro ha dado la raz¨®n esta semana al cantante y guitarrista en su batalla judicial contra la discogr¨¢fica Universal Music. La sentencia, un¨¢nime, obliga a la empresa a devolver a Gilberto los royalties impagados desde nada menos que 1964 adem¨¢s de da?os morales. Es un dineral que fue estimado en unos 173 millones de reales (casi 40 millones de euros) aunque esta no es probablemente la ¨²ltima palabra sobre el tema porque el fallo puede ser recurrido ante el Tribunal Supremo de Brasil.

Gilberto es un octogenario carcomido por unas deudas que en 2018 -cuando la bossa nova cumpl¨ªa 60 a?os¡ª le obligaron a abandonar su apartamento en Leblon, un coqueto barrio de R¨ªo de Janeiro junto a las playas de Ipanema y Copacabana, para mudarse a un piso prestado. Hace ya a?os que no da entrevistas ni act¨²a.

El pleito viene de bien lejos, dos d¨¦cadas. Y est¨¢ relacionado a los derechos de autor de Chega de saudade (1959), O amor, o sorriso e a flor (1960), y Jo?o Gilberto (1961), los tres primeros discos que EMI, su discogr¨¢fica original, public¨®. Son obras con las que la fusi¨®n de samba y jazz dio sus primeros pasos en los sesenta en las colinas y los garitos de R¨ªo. Gilberto gan¨® el juicio inicial contra EMI, que para entonces hab¨ªa sido absorbida por Universal, firma que, seg¨²n los jueces, deb¨ªa asumir el pago de los derechos adeudados. Los abogados de Gilberto acusaron a EMI de haber aprovechado la reorganizaci¨®n para desprenderse del patrimonio para evitar que Universal tuviera que heredar las deudas. Comenzaba una nueva fase del pulso entre el artista y las discogr¨¢ficas.

El embrollo judicial es considerable, mientras aquellos gloriosos sesenta del nacimiento de la bossa nova vuelven a estar de actualidad de la mano de Coisa mais linda, una serie de producci¨®n brasile?a estrenada tambi¨¦n esta semana en Netflix. Ninguno de los artistas originales que alumbraron el fen¨®meno (Gilberto, Tom Jobim, Vinicius de Moraes) aparece como tal pero el personaje de Chico es una combinaci¨®n de Gilberto y de Chico Buarque.

Si alg¨²n d¨ªa gana definitivamente la batalla por los derechos generados por aquellas primeras canciones y la discogr¨¢fica los paga, Gilberto solo se llevar¨¢ una parte. El resto ir¨¢ a manos del Banco Opportunity por un acuerdo que firmaron hace seis a?os: la entidad le pag¨® al cantante 10 millones de reales (ser¨ªan hoy 2,2 millones de euros) a cambio de tomar las riendas del pleito y quedarse con la mitad de los royalties que se recuperaran.