El rescate del tesoro de la raya
Cientos de pueblos en la frontera entre Portugal y Espa?a guardan una riqueza ling¨¹¨ªstica y cultural mestiza que un grupo de investigadores trata de conservar antes de que desaparezca
En el peque?o pueblo portugu¨¦s de Barrancos dicen ¡°ansina¡± en vez de ¡°as¨ª¡±; o ¡°proprio¡± en vez de ¡°propio¡±. Y no cuando hablan en portugu¨¦s; ni siquiera cuando lo hacen en barranque?o (la lengua local, fuertemente influenciada por los habitantes de Huelva y Badajoz que viven a unos pocos kil¨®metros, al otro lado de la frontera), sino cuando hablan en espa?ol, pues la variante de este idioma que all¨ª sabe utilizar casi todo el mundo guarda todav¨ªa palabras antiguas del castellano, ya casi desaparecidas en cualquier otra parte. Es algo as¨ª como una reserva natural del idioma.
Esto supone una riqueza cultural que se suma a otras particularidades del municipio, como ese dialecto barranque?o que emplea palabras portuguesas con estructuras gramaticales espa?olas y suena con acento que recuerda al andaluz y el extreme?o (por ejemplo, al aspirar las eses finales). En las calles de este municipio de 1.700 habitantes, con sus casas encaladas con franjas de color albero, en los numerosos bares o en el centro cultural donde un grupo de mujeres jubiladas hace manualidades, se escucha saltar naturalmente de un idioma a otro, seg¨²n el interlocutor.
Antonia Navarro, de 77 a?os, e Isabel Caeiro (74) explican que el castellano cada vez se usa menos de forma cotidiana ¡ª¡°sobre todo lo hablamos entre los mayores¡±¡ª, pero que se mantienen fuertemente arraigadas muchas tradiciones procedentes del otro lado de la frontera, a unos escasos cientos de metros en l¨ªnea recta. Curan un jam¨®n serrano con denominaci¨®n de origen ib¨¦rico, las corridas de toros se hacen con muerte del animal (es el ¨²nico lugar de Portugal donde todav¨ªa se permite) y los romances, canciones y villancicos en castellano alternan con las m¨²sicas alentejanas en todas las celebraciones populares.
Despoblaci¨®n
Hay en Barrancos un tesoro, en fin, ling¨¹¨ªstico y cultural, propio de la mezcla en territorios de frontera, que se repite con multitud de variantes en centenares de pueblos a lo largo de los m¨¢s de 1.200 kil¨®metros de raya que separa Espa?a y Portugal, uno de los confines interestatales m¨¢s antiguos y estables de la historia. Y que un nutrido grupo de ling¨¹istas ¡ªliderados por investigador de la Universidad de Alcal¨¢ Xos¨¦ Afonso ?lvarez P¨¦rez¡ª est¨¢ tratando de estudiar y registrar antes de que sea tarde. La homogeneizaci¨®n cultural que traen consigo avances como la escolarizaci¨®n universal y las mejoras de las comunicaciones, sumada a la creciente despoblaci¨®n, hacen que se vayan perdiendo a toda velocidad todas esas particularidades. .
En una primera fase, el proyecto Frontera Espa?a-Portugal: documentaci¨®n ling¨¹¨ªstica y bibliogr¨¢fica ha hecho ¡°catas¡± en 64 localidades a lo largo de toda la raya, lo que se traduce en entrevistas grabadas en audio y v¨ªdeo en las que los lugare?os charlan sobre su vida y costumbres (el contrabando tiene su apartado propio) y que sirven para capturar las singularidades de la lengua. Tres ejemplos: trascu?ar significa quedarse traspuesto, medio dormido; talejar, comer, masticar; y a trastes¨®n es de vez en cuando.??La web del proyecto va colgando todo ese material (van m¨¢s de 2.100 registros), la bibliograf¨ªa y un diccionario (el Tesoro l¨¦xico de la frontera hispano-portuguesa) con mapas para ubicar cada palabra.
Para una segunda fase, hasta 2022, los investigadores han conseguido 70.000 euros de financiaci¨®n del Ministerio de Ciencia. Lo usar¨¢n para profundizar en dos ¨¢reas peque?as entre Portugal y las provincias de Zamora y Ourense. Tambi¨¦n en los pueblos m¨¢s peculiares, como Olivenza, en Espa?a, o en Barrancos. Un caso especialmente singular, este ¨²ltimo, ya que ¡°es probablemente el ¨²nico caso que conocemos de dos lenguas rom¨¢nicas que den lugar a una tercera, el barranque?o¡±, asegura la profesora de Filolog¨ªa Rom¨¢nica de la Complutense de Madrid Mar¨ªa Victoria Navas.
El Ayuntamiento de este ¨²ltimo est¨¢ a punto de firmar un convenio con la Universidad de ?vora para darle al barranque?o, ahora puramente oral, una estructura ling¨¹¨ªstica s¨®lida y escrita. explica el alcalde, Jo?o Serranito Nunes. De momento, Carla Pica, asesora municipal y profesora de Lengua, espera sacar tiempo en alg¨²n momento para seguir con sus estudios sobre literatura oral en barranque?o.
Recuerda los cuentos que le contaba su abuela ¡ª¡°en uno usaban al final los huesos de la villana para hacer una silla¡±¡ª y se entusiasma al explicar que en su casa, durante las comidas familiares, se usan alegremente a la vez las tres lenguas en una misma misma conversaci¨®n: ¡°Mis padres hablan en espa?ol entre ellos; en barranque?o con mis hermanos y conmigo, y mi t¨ªa, que es del norte, responde en portugu¨¦s¡±. Admite que, como lengua cotidiana, solo los mayores siguen usando castellano, pero a?ade que todo el mundo lo conoce y usa cuando hace falta. La tele se suele ver en ese idioma; para cualquier necesidad, el pueblo m¨¢s cercano, a 14 kil¨®metros, es Encionasola, en Huelva; siguen produci¨¦ndose muchos matrimonios interfronterizos...
En el casino del pueblo, Manuel, de 72 a?os, a?ade con resignaci¨®n: ¡°?Qu¨¦ remedio! Ustedes los espa?oles son muy vagos y nunca van a hablar en portugu¨¦s¡±.
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