Medio siglo en la cama por la paz

Un Rolls-Royce blanco, lentes redondos hechos de flores e im¨¢genes capturadas por el fot¨®grafo Gerry Deiter decoran estos d¨ªas el vest¨ªbulo del hotel Queen Elizabeth de Montreal. Es parte de la celebraci¨®n de los 50 a?os de la ¡°encamada por la paz¡± que John Lennon y Yoko Ono protagonizaron en este recinto. La pareja hab¨ªa realizado una acci¨®n parecida en el hotel Hilton de ?msterdam, aprovechando su luna de miel para protestar contra la guerra de Vietnam. Sin embargo, la cita en Montreal sirvi¨® tambi¨¦n para engendrar un tema m¨ªtico: Give Peace a Chance. Lennon ya hab¨ªa declarado ¡ªenfundado en pijama¡ª que el ¡°sistema¡± no sab¨ªa actuar frente a la no violencia y el humor. La canci¨®n contiene ambos ingredientes.

La pareja deseaba repetir el evento de ?msterdam en Nueva York, pero los l¨ªos de Lennon con la justicia por posesi¨®n de marihuana no le permitieron entrar a suelo estadounidense. Decidieron entonces viajar a las Bahamas. Sin embargo, pensaron que no era aquel el sitio id¨®neo. As¨ª, el 26 de mayo llegaron a Montreal y se instalaron en la suite 1.742 del hotel Queen Elizabeth. El remolino de periodistas fue considerable, pulularon los curiosos. Asimismo, otros iconos contraculturales ¡ªcomo el poeta Allen Ginsberg y Timothy Leary, ferviente defensor del LSD¡ª acudieron a la cita. ¡°Parec¨ªa un circo. Hab¨ªa un ambiente especial y la seguridad era muy relajada¡±, explica a EL PA?S Andr¨¦ Perry.

Perry (Montreal, 1937) estaba all¨ª. Lennon expres¨® a su c¨ªrculo cercano que quer¨ªa grabar un tema con la colaboraci¨®n de todos los asistentes. Perry no cant¨®, porque fue el encargado de la grabaci¨®n de Give Peace a Chance el 1 de junio de 1969. ¡°Me llam¨® Pierre Dubord, responsable de las relaciones con los artistas de Capitol, el sello que distribu¨ªa los discos de Apple. Me dijo que Lennon deseaba grabar dentro de unas horas¡±, afirma.

Al llegar, Perry se dio cuenta r¨¢pidamente de que las condiciones de grabaci¨®n iban a ser muy dif¨ªciles. ¡°La suite era de tama?o modesto, hab¨ªa unos hare krishna cantando sin parar, otros participantes golpeaban las puertas¡±, recuerda. El t¨¦cnico, que ya hab¨ªa trabajado con cantantes de renombre, decidi¨® poner especial atenci¨®n en la voz de Lennon y en las guitarras que tocaban el brit¨¢nico y el estadounidense Tommy Smothers. ¡°Las grab¨¦ en pistas separadas¡±, precisa.

Perry escuch¨® la cinta en su estudio y confirm¨® sus sospechas: reinaba la cacofon¨ªa. Fue entonces cuando llam¨® a varios amigos (uno de ellos era Robert Charlebois, estrella de la m¨²sica de Quebec) para grabar algunos coros que remplazar¨ªan a la mayor¨ªa de las voces de la toma original. Tambi¨¦n a?adi¨® una percusi¨®n sui generis. ¡°Me puse a golpear un cubo de basura de caucho y me agrad¨® el sonido que hac¨ªa¡±, cuenta entre risas. ¡°John y Yoko quedaron muy satisfechos con las modificaciones. Confiaron mucho en m¨ª¡±, a?ade.

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Durante su estancia en Montreal, la pareja tambi¨¦n grab¨® con Perry Remember Love, canci¨®n que apareci¨® como cara B de Give Peace a Chance cuando el sencillo sali¨® a la venta unas semanas despu¨¦s. En poco tiempo, el tema pacifista se volvi¨® imprescindible en las manifestaciones contra la politica estadounidense en Vietnam, teniendo su punto m¨¢ximo cuando fue entonada el 15 de noviembre del mismo a?o por unas 500.000 personas en Washington, bajo la gu¨ªa de Pete Seeger. La revista Newsweek conclu¨ªa: ¡°El movimiento por la paz ha encontrado un himno¡±.

Yoko Ono y el todav¨ªa miembro de The Beatles viajaron el 2 de junio a Ottawa. Un d¨ªa despu¨¦s, participaron en un encuentro con estudiantes universitarios. ¡°Lennon era inteligente y generoso. Muchas personas dec¨ªan que su forma de protestar era ingenua, pero siempre se necesita que alguien empu?e la bandera. ?Seguimos hablando medio siglo despu¨¦s de lo que hizo en esos d¨ªas!¡±, dice Perry, quien obtuvo un gran ¨¦xito con el estudio de grabaci¨®n que abri¨® despu¨¦s junto a su esposa, Ya?l Brandeis. Durante sus casi 30 a?os de funcionamiento, Le Studio Morin Heights aloj¨® a figuras como David Bowie, Cat Stevens y The Police.

Desde el 1 de junio y hasta el 31 de diciembre, el hotel Queen Elizabeth ofrece la m¨ªtica suite 1.742 ¡ªrenovada en 2017¡ª a cambio de 3.000 d¨®lares canadienses por noche (unos 2.000 euros). ¡°Tenemos reservas de Canad¨¢ y de otros pa¨ªses¡±, asegura Joanne Papineau, portavoz del establecimiento. El paquete incluye desayunos, un libro de recuerdo, una moneda conmemorativa, una r¨¦plica del manuscrito original de Give Peace a Chance y, por supuesto, pijamas.