Leonardo Hern¨¢ndez cort¨® cuatro orejas y triunf¨® de verdad El Capea
El ganadero lidi¨® cuatro toros extraordinarios y uno de ellos fue premiado con la vuelta
Leonardo Hern¨¢ndez cort¨® cuatro orejas, sali¨® a hombros y nadie le va a negar la ¨ªntima satisfacci¨®n de alcanzar un triunfo tan importante en la feria de San Ferm¨ªn.
Es un buen rejoneador y hace tiempo que lo ha demostrado, posee una buena cuadra y cuenta con una cualidad esencial: conecta con facilidad con los tendidos, gesticula exageradamente con manos y brazos a la salida de cada suerte, dirige el caballo hacia las tablas a galope tendido mientras el p¨²blico, puesto en pie, lo jalea como si acabara de presenciar una maravilla.
Estuvo bien Hern¨¢ndez en Pamplona si por ello se entiende que divirti¨® a los tendidos. Pues, s¨ª, estuvo bien. Templ¨® con torer¨ªa a lomos de Enamorado ante su primer toro, un animal bobo y borrachuzo, y alcanz¨® su punto culminante al clavar tres banderillas cortas al viol¨ªn y matar de un rejonazo fulminante.
EL CAPEA/HERMOSO, HERN?NDEZ, ARMEND?RIZ
Toros despuntados para rejoneo de El Capea, bien presentados, muy blandos los dos primeros, y encastados, codiciosos y nobles los dem¨¢s; al quinto se le concedi¨® la vuelta al ruedo.
Hermoso de Mendoza: dos pinchazos y rej¨®n trasero (silencio); pinchazo y rejonazo (oreja).
Leonardo Hern¨¢ndez: rejonazo fulminante (dos orejas); rejonazo contrario (dos orejas). Sali¨® a hombros.
Roberto Armend¨¢riz: rejonazo trasero y dos descabellos (silencio); tres pinchazos y rejonazo ca¨ªdo (silencio).
Plaza de Pamplona. 6 de julio. Espect¨¢culo de rejoneo. Segundo festejo de San Ferm¨ªn. Casi lleno.
Un toro de bandera fue el quinto, y Hern¨¢ndez alcanz¨®, por momentos, la altura de su oponente. Se luci¨® en banderillas con Calimocho, y de nuevo enloqueci¨® al p¨²blico con otras tres banderillas cortas al viol¨ªn, pero esta vez el rej¨®n de muerte cay¨® contrario, lo que no fue impedimento para que volviera a pasear dos orejas, en esta ocasi¨®n acompa?ado por el mayoral de la ganader¨ªa.
?Fue una actuaci¨®n redonda la de Hern¨¢ndez en sus dos toros? No. No mereci¨® el doble trofeo en su primer toro, inv¨¢lido y tonto, ante el que solo pudo destacar en el tramo final. Y mejor¨® sensiblemente ante el quinto, de menos a m¨¢s, correcto casi siempre, pero clavando a la grupa, defecto importante y habitual en el rejoneo moderno.
A?¨¢dase un dato fundamental: esta plaza de Pamplona es una t¨®mbola que concede trofeos si se encandila a los tendidos de sol y se mata con rapidez. Y algo m¨¢s: la presidencia es de broma. En dos palabras, la exigencia, condici¨®n fundamental en plaza de primera, no la conocen por estos lares.
En veterano maestro estuvo Hermoso de Mendoza ante el cuarto, encastado y codicioso, y ofreci¨® toda una lecci¨®n de temple con Disparate, torero de verdad, y se luci¨® en banderillas con Arsenio, y en un par de las cortas a dos manos con Pirata, pero como no acert¨® a la primera, se qued¨® sin puerta grande, aunque sea paisano. El primero fue un toro mec¨¢nico, un juguete, un aut¨®mata, parado y moribundo de salida.
El mejor toro de la tarde le toc¨® a Roberto Armend¨¢riz. Fue el tercero, que embisti¨® con br¨ªo, alegr¨ªa y calidad durante toda la faena, pero el caballero no est¨¢ preparado para triunfar ante un oponente tan serio. Le sobra ¨¢nimo y disposici¨®n, pero carece de la t¨¦cnica que, se supone, se gana con la experiencia. Mejor ante el sexto, otro buen toro, en especial con las banderillas, montando a Farruco, pero tampoco acert¨® con el rej¨®n final.
Total, que el triunfador de ley fue El Capea, que lidi¨® cuatro toros extraordinarios.
La corrida de hoy. Toros de Puerto de San Lorenzo, para Emilio de Justo, L¨®pez Sim¨®n, y Gin¨¦s Mar¨ªn.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.