Kleber Mendon?a Filho: ¡°Estados Unidos ha tenido suerte con Trump en comparaci¨®n con Bolsonaro¡±

Cuando empezaron Kleber Mendon?a Filho y Juliano Dornelles a escribir el guion de Bacurau, solo pensaban en rodar un w¨¦stern dist¨®pico con notas de realismo m¨¢gico. Su Brasil del Sert¨®n ¨Cla zona des¨¦rtica del noreste que alberg¨® el mejor cine de Glauber Rocha¨C, su descripci¨®n de un peque?o poblado que se defiende de un ataque exterior en esa zona perdida anclada en un no tiempo, se fue acercando al Sert¨®n aut¨¦ntico cuando Jair Bolsonaro accedi¨® a la presidencia de su pa¨ªs en enero de 2019. Ese mayo, Dornelles y Mendon?a Filho defendieron Bacurau en el Festival de Cannes: la horquilla ficci¨®n-realidad se hab¨ªa estrechado, Bolsonaro compon¨ªa en Brasil una oda ultraderechista. En el certamen franc¨¦s ganaron el Premio del Jurado. En la taquilla brasile?a, dieron la campanada. Y, en 2020, el futuro devino en presente: ¡°T¨² escribes un guion violento y absurdo¡­. Y llega la realidad y lo ridiculiza¡±. Desde su confinamiento en su ciudad natal, la capital del Estado de Pernambuco, Mendon?a Filho (Recife, 51 a?os), ex cr¨ªtico de cine que vir¨® a director y se ha ganado el respeto con pel¨ªculas como Sonidos de barrio (2012) y Do?a Clara (Aquarius) (2016), suena a veces derrotado y otras indignado. ¡°Sufrimos el golpe de Estado contra Dilma Rousseff, y eso se impregn¨® en la historia¡±, afirmaba el director en conversaci¨®n telef¨®nica el lunes pasado.

Mendon?a arranc¨® su Bacurau como un w¨¦stern repleto de homenajes al cine de los setenta que lideraron John Carpenter (la escuela del pueblo del filme se llama Jo?o Carpinteiro), David Cronenberg, George A. Romero o Brian De Palma. Los creadores que llevaron el explotation de los cines de barrio a los festivales de clase A. ¡°Es muy extra?o c¨®mo algunas locuras mostradas en la pel¨ªcula se han convertido en algo normalizado en el mundo actual¡±, reflexiona el director. ¡°En el ¨²ltimo lustro Brasil ha convertido lo absurdo en lo diario. Comentas bromas, chistes con los amigos, y de repente los ves en la calle¡±. Mendon?a Filho advierte que los brasile?os siguen encontrando conexiones entre lo mostrado en la pantalla y su vida estos meses. ¡°Con su lanzamiento internacional y con el inicio de la pandemia, esas sensaciones se han prolongado en el p¨²blico mundial¡±, y pregunta por la situaci¨®n en Espa?a, donde su pel¨ªcula se ha estrenado esta semana en plataformas digitales. ¡°Con la reacci¨®n del capitalismo a la crisis de la covid-19 en sitios como Estados Unidos, con esos elementos absurdo-cotidianos brasile?os, Bacurau ha mutado en una cr¨®nica interesante de lo que vivimos en estos momentos¡±.

Para el director, su pel¨ªcula naci¨® del miedo, un sentimiento algo abstracto que fue concret¨¢ndose en una persona: Jair Bolsonaro. ¡°Lo intuimos, est¨¢bamos atentos Juliano y yo a lo que manaba desde la sociedad y la cultura de mi pa¨ªs. Ya estaba en Do?a Clara, que era una pel¨ªcula mucho m¨¢s pol¨ªtica que esta. Y Bacurau ha seguido la misma regla: la acci¨®n surge de la historia, no forzamos ni predecimos lo que ocurrir¨¢ en el futuro¡­ porque probablemente ya sabemos que ha ocurrido en el pasado una y otra vez, tanto en Latinoam¨¦rica como en el resto del mundo. Nosotros pensamos mucho en la Guerra de Vietnam en la redacci¨®n del guion. El p¨²blico cree que juegas a adivinar cuando en realidad reflejas el pasado. Es la Historia la que tiende a repetirse, el futuro no es m¨¢s que repeticiones de errores anteriores. Y vale para cualquier pa¨ªs¡±.

A ese pueblo llamado Bacurau ¨Cmarcado de por s¨ª por unos extra?os acontecimientos y curiosos habitantes¨C llega un grupo de cazadores internacionales. No hay mucha posible actividad cineg¨¦tica en la zona, as¨ª que queda claro que las presas son ser¨¢n animales, sino seres humanos. ¡°No es una pel¨ªcula antiamericana, cuidado, sino antiimperialista. Cierto que EE UU no ayuda con muchas de sus posturas en conflictos exteriores, pero la sociedad estadounidense es un c¨®ctel de diversos elementos, muchos bell¨ªsimos. Sin embargo, si ruedas una historia de invasiones, e incluyes actos violentos, todo huele a Estados Unidos. Nosotros optamos por la v¨ªa de la exageraci¨®n, que creativamente te permite filosofar sobre la condici¨®n humana e ir m¨¢s lejos que en una mera plasmaci¨®n de hechos hist¨®ricos¡±. Y acaba subrayando: ¡°De ah¨ª la importancia del cine de g¨¦nero, que permite hablar de las sociedades, de la gente, sin hacer cine social¡±.

Brasil tiene una historia tan larga en revoluciones y resistencia como vida en comunidad, las dos columnas que sostienen el comportamiento de los habitantes de Bacurau. ¡°La vida en las favelas, las comunidades que habitan en el interior, en el Sert¨®n¡­ Todos son ejemplos de poder llevar una existencia digna en lugares donde el Gobierno nunca llegar¨¢. Y no llegar¨¢ por pura incompetencia o porque las empresas, los mercados, han decidido que no son interesantes para el negocio. Y sin embargo, sobreviven. Por eso me fascinan: son sitios donde la gente coopera entre s¨ª para salir adelante. Me parec¨ªa una idea conmovedora y que necesitaba reflejar en esa imagen del inicio, cuando la chica llega al pueblo, abre su maleta y no solo lleva sus cosas, sino objetos para toda la comunidad. ?C¨®mo las ha conseguido? No lo contamos, y no importa. Si vives en las favelas, conseguir¨¢s lo que necesitas como puedas. Eso es resistencia, mejor, es reorganizar la vida para lograr que funcione cuando el poder econ¨®mico y gubernamental han dimitido¡±, reflexiona el cineasta.

En la actualidad, el arte y la cultura brasile?a est¨¢n recibiendo un ¡°furibundo ataque¡± desde el Gobierno que preside Bolsonaro. Con?Do?a Clara, Mendon?a Filho ya sac¨® pancartas en la alfombra roja de Cannes alertando ante el golpe de Estado que habr¨ªa sufrido Rousseff. ¡°Y ha ido a peor. ?Sabes que me preocupa? El silencio actual de los artistas. No lo entiendo. Esa actitud [busca la palabra]¡­ pasiva. No es que el Gobierno no apoye la cultura, es que adem¨¢s hay una absoluta falta de respeto por el arte¡±. Y con tono dolido, prosigue: ¡°La secuencia hist¨®rica ha ido a peor. Y ese comportamiento del poder federal se ha repetido con la pandemia. Considerar a Bolsonaro un Trump brasile?o es simplista, aunque se parezcan. Creo que los estadounidenses tienen suerte con Trump en comparaci¨®n a lo nuestro. Y con eso queda claro en qu¨¦ situaci¨®n estamos. Las cifras de la pandemia de ambos pa¨ªses son similares y reflejan, en su dolor, lo que opinan sus gobiernos de sus sociedades. Es incre¨ªblemente triste¡±.

Bacurau. Kleber Mendon?a Filho y Juliano Dornelles. Disponible en Filmin, Movistar +, Rakuten TV, Vodafone y Orange.