Alec Soth, desde la distancia
Dos libros y una exposici¨®n se adentran en el universo del fot¨®grafo, en sus planteamientos sobre el retrato como un explorador de la distancia social
La fotograf¨ªa ha estado siempre muy asociada a la separaci¨®n para Alec Soth (Minnesota, 1969). Cronista de la vida en los m¨¢rgenes de Am¨¦rica que se describe a s¨ª mismo como ¡°un entendido en la distancia social¡±. De igual forma, se ha referido al acto de retratar como ¡°capturar el espacio que existe entre ¨¦l mismo y su sujeto¡±. Sin embargo, su quehacer art¨ªstico se vio afectado significativamente en 2016, cuando durante un viaje a Helsinki sufri¨® una experiencia m¨ªstica que le llev¨® a percibir una conexi¨®n entre todos los elementos del universo. Esto le supuso un a?o de reclusi¨®n e introspecci¨®n, durante el cual profundiz¨® en el significado de fotografiar a extra?os. Algo que llevaba haciendo a?os. Desde que un d¨ªa se lanz¨® a buscar su propia voz siguiendo los meandros de un r¨ªo, y en 2004 salt¨® a la fama con Sleeping By the Mississippi (MACK), una publicaci¨®n, hoy de referencia, que le consolid¨® como una de las figuras m¨¢s destacadas de la fotograf¨ªa documental contempor¨¢nea.
Su retorno a la fotograf¨ªa tuvo como resultado I Know How Furiously Your Heart is Beating, una serie compuesta por 35 im¨¢genes que qued¨® reunida en un monogr¨¢fico publicado por MACK y que puede verse en la actualidad en una exposici¨®n celebrada en la sede de FOAM , en ?msterdam, bajo t¨ªtulo hom¨®nimo. El autor ha querido dedicar m¨¢s tiempo a observar a sus modelos y, as¨ª, ¡°con suerte, entrever de forma sucinta su vida interior¡±. Consciente del componente predatorio que implica el acto de retratar, y de la din¨¢mica de poder que se establece entre el fot¨®grafo y su sujeto, ha procurado prescindir de parte del control que suele ejercer. En esta ocasi¨®n en vez de poner el foco en un lugar, en una comunidad o en una demograf¨ªa, se ha centrado en el individuo; en personajes elegidos al azar por distintas geograf¨ªas. ¡±Opt¨¦ por fotografiar en lugares cerrados buscando m¨¢s intimidad y la sensaci¨®n de protecci¨®n del exterior; el espacio habitado por el sujeto para hacerle sentir m¨¢s c¨®modo¡±. En ocasiones el autor se reprimir¨¢, evitando manipular la situaci¨®n en busca de una imagen m¨¢s poderosa. As¨ª sus retratos se han vuelto a¨²n m¨¢s silenciosos y reservados. Conducido por su curiosidad, habr¨¢ posado tambi¨¦n su mirada en los rincones de las distintas moradas, buscando reflejar la naturaleza de aquellos que las habitan.
Nancy es el hermoso retrato de la fot¨®grafa Nancy Rexroth cuya melanc¨®lica mirada entra en juego con la de su gato, parapetado tras el cuerpo de su due?a. Se trata de la imagen m¨¢s significativa para el artista, tal y como recuerda el encuentro: ¡°Fue una experiencia muy poderosa. No nos conoc¨ªamos en persona. Ella era vulnerable y yo tambi¨¦n. Compart¨ªamos esa fragilidad. Este trabajo trata fundamentalmente sobre el ser humano. De permitir a otra persona que te vea, no solo de la forma que uno se presenta al mundo habitualmente, o en las redes sociales, sino mostr¨¢ndose con la guardia baja pero tambi¨¦n con dignidad. Sin la armadura que todos llevamos¡±.
El t¨ªtulo la serie fotogr¨¢fica, I Know How Furiously Your Heart is Beating viene de un poema del estadounidense Steven Wallace: Gray Room (Habitaci¨®n gris), cuyo t¨ªtulo, a su vez, resulta ir¨®nico dada la borrachera de color que viene a destapar. Un fest¨ªn de color que el fot¨®grafo ha querido reflejar en sus im¨¢genes.¡±Quer¨ªa salvar la belleza¡±, destaca Soth, ¡°la belleza que se encuentra en la superficie de las cosas. Al fin y al cabo de esto trata en parte la fotograf¨ªa; de una luz que se refleja tras golpear una superficie produciendo un momento de gran belleza visual. He querido permitirme este banquete de color¡±.
La obra de Wallace gira en torno al conflicto entre la realidad y c¨®mo la procesamos a trav¨¦s de nuestra imaginaci¨®n. ¡°Parte de mi atracci¨®n por la poes¨ªa radica en que trata sobre nuestra consciencia y percepci¨®n. Hay todo un universo ah¨ª fuera y ah¨ª est¨¢n nuestros sue?os para procesarlo. Pero como fot¨®grafo parto de que se ha generalizado la sensaci¨®n de que la fotograf¨ªa es realidad, y no lo es: es una construcci¨®n. As¨ª, a la hora de hacer un retrato nos encontramos con mucha informaci¨®n visual pero nos vemos confrontados con una dualidad: estamos hambrientos por conectar pero al mismo tiempo no podemos, estamos limitados. De ah¨ª que trato de aceptar la belleza y tambi¨¦n la distancia¡±.
Las im¨¢genes reflejan la rom¨¢ntica melancol¨ªa a la que nos tiene acostumbrado, pero se observa una mayor contenci¨®n a la hora de proporcionar datos narrativos al espectador, un car¨¢cter m¨¢s simplificado o minimalista. ¡°La fotograf¨ªa puede ser muy frustrante porque puede ser muy fr¨ªa¡±, a?ade el autor. Se trata de una disciplina art¨ªstica que proviene de la ciencia, de una maquinaria. De manera que siempre procuro reflejar este conflicto en mi obra¡±.
La editorial MACK acaba de lanzar la ¨²ltima publicaci¨®n del autor,The Parameters of Our Cage (Los par¨¢metros de nuestra jaula), El libro surgi¨® de forma tan inesperada como oportuna, y recoge la correspondencia mantenida a lo largo de nueve meses entre C. Fausto Cabrera, un preso de la c¨¢rcel de Rush City, Minnesota, y el fot¨®grafo. Un rico y profundo di¨¢logo que tiene como fondo la actual pandemia, el movimiento Black Lives Matter y la inestabilidad que experimenta nuestro mundo. Sin premeditaci¨®n, Soth ha construido un retrato de su remitente en forma de epistolario. ¡°En cierto sentido, resulta lo opuesto a I Know How Furiously Your Heart is Beating, ya que la herramienta es la palabra¡±, destaca el fot¨®grafo, que confiesa no tener ning¨²n deseo por retratar a Cabrera con su c¨¢mara. Algo que suele ocurrirle con su familia y amigos cercanos, de quienes conoce todos los gestos, hecho que condiciona su imaginaci¨®n. ¡°Fausto y yo no hemos llegado a conocernos, nunca hemos compartido un espacio f¨ªsico, por lo que no acabo de entender esta falta de deseo¡±, explica.
Las correspondencia ha servido a Soth para profundizar en su inter¨¦s en la relaci¨®n entre fotograf¨ªa y la falta de libertad, una reflexi¨®n que viene muy a cuento en tiempos de confinamiento. ¡°Ahora podr¨ªa resultar premonitorio que mientras trabajaba en I Know How Furiously Your Heart is Beating part¨ªa de la met¨¢fora de observar a los modelos como p¨¢jaros enjaulados¡±, apunta el fot¨®grafo. ¡°El t¨ªtulo The Parameters of Our Cage viene de una frase escrita por Fausto, pero hay algo sobre el hecho de ver la vida humana contenida en un espacio que me ha resultado siempre hermoso¡±. De ah¨ª la presencia de los marcos, ventanas y espejos en su obra, algo que nos habla del tipo de anhelo que le llev¨® a la fotograf¨ªa. Al fin y al cabo, Soth siempre quiso ser como James Stewart en La Ventana Indiscreta, ¡°S¨ª, siempre, aunque no me veo a mi mismo como el fotoperiodista que ama el riego y la aventura, pero me atrae aquello que est¨¢ borroso. M¨¢s que el acto en s¨ª de la conexi¨®n, me atrae la distancia, el anhelo de conectar¡±.
Alec Soth. I Know How Furiouly Your Heart is Beating. Foam Fotografiemuseum. ?msterdam. Hasta el 6 de diciembre.
I Know How Furiouly Your Heart is Beating. Alec Soth. MACK Books. 55,07 euros.
The Parameters of Our Cage. C Fausto Cabrera & Alec Soth. MACK Books. 8,23 euros.
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