Los herederos del acad¨¦mico que custodiaba la correspondencia entre Gald¨®s y Pardo Baz¨¢n denuncian la desaparici¨®n de las cartas

El enigma en torno al paradero de las cartas que Benito P¨¦rez Gald¨®s envi¨® a Emilia Pardo Baz¨¢n tiene un nuevo cap¨ªtulo. Los herederos de Agust¨ªn Gonz¨¢lez de Amez¨²a y Mayo, miembro de la Real Academia de la Lengua (RAE) desde 1929 hasta su fallecimiento en 1956, que custodi¨® la correspondencia entre los dos escritores espa?oles del siglo XIX, han denunciado ante la Polic¨ªa la desaparici¨®n de estas misivas, seg¨²n han confirmado a EL PA?S fuentes conocedoras de este procedimiento. Tras la muerte del acad¨¦mico, due?o de una de las bibliotecas m¨¢s importantes de Espa?a (con gran cantidad de documentos de Lope de Vega, Men¨¦ndez Pelayo y la Inquisici¨®n), su patrimonio se dividi¨® entre sus tres hijos. Clara Mar¨ªa Gonz¨¢lez de Amez¨²a, la ¨²nica hija que sigue viva, asegur¨® a este diario que hab¨ªa visto las cartas despu¨¦s de que la pista sobre este intercambio epistolar reapareciera a finales de 2020, cuando un librero de Madrid afirm¨® haberlas visto en una casa de la capital hac¨ªa ¡°unos 30 a?os¡±. Hasta ahora se cre¨ªa que hab¨ªan sido destruidas por la que fue esposa del dictador Francisco Franco, Carmen Polo, o en el incendio del pazo de Meir¨¢s en 1978. No existen datos de su paradero entre el 56, a?o de la muerte de Amez¨²a, y el 78, cuando pudieron ser eliminadas.

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Uno de los d¨ªas de Pascua, en Madrid, la familia de Amez¨²a decidi¨® interponer la denuncia, seg¨²n cuentan esas mismas fuentes. El inter¨¦s de los herederos es cumplir con lo que Clara Mar¨ªa Gonz¨¢lez de Amez¨²a considera que era el deseo de su padre, que ¡°estuvieran en la RAE¡±. ¡°No hay ¨¢nimo lucrativo¡±, aseguran las fuentes consultadas, que explican que la denuncia se ha puesto en este momento despu¨¦s de que la heredera, de 91 a?os y premio Nacional de Gastronom¨ªa en 2015, lo meditara y debatiera con sus familiares durante estos meses, desde que saltara la noticia a finales de 2020.

El objetivo de los herederos es que, si aparecen las cartas, se guarden con las de Gald¨®s que formaban parte del material hist¨®rico y literario que el acad¨¦mico don¨® a la RAE en 1953. Seg¨²n la informaci¨®n que aparece en la p¨¢gina en internet de la instituci¨®n, entre toda la documentaci¨®n hay 38 cartas que Pardo Baz¨¢n envi¨® a P¨¦rez Gald¨®s bajo el t¨ªtulo: Correspondencia amorosa de ¡°una c¨¦lebre escritora con otro famoso novelista¡±. Esta colecci¨®n se difundir¨ªa posteriormente en libros como Miqui?o m¨ªo y ensayos biogr¨¢ficos sobre la escritora.

Clara Mar¨ªa Gonz¨¢lez de Amez¨²a contaba a EL PA?S por tel¨¦fono en diciembre de 2020 que vio las cartas. En su momento, no fue consciente de la importancia de estos documentos. En la conversaci¨®n asegur¨® no recordar el momento con precisi¨®n, pero cre¨ªa que esta correspondencia fue robada de la biblioteca de su padre. Relataba que debi¨® de ser en un descuido: ¡°Tal vez las dej¨® en una mesa y alguien entr¨® y se las llev¨®¡±.

Tras la muerte de Gonz¨¢lez de Amez¨²a, el patrimonio se dividi¨® en tres partes, y cada una fue a parar a uno de los tres hijos que a¨²n viv¨ªan. Dos de los familiares que han custodiado la parte que Clara Mar¨ªa Gonz¨¢lez de Amez¨²a y su hermana Mar¨ªa del Buen Consejo Gonz¨¢lez de Amez¨²a, Maruja, heredaron aseguraron a este diario que ninguna de ellas recibi¨® las cartas de Benito P¨¦rez Gald¨®s. La tercera parte de la herencia fue para los herederos de Ram¨®n Gonz¨¢lez de Amez¨²a, el que fuera director de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando en 1991, que falleci¨® en 2015.

La denuncia abre un proceso de investigaci¨®n que, seg¨²n ha podido saber EL PA?S, puede durar a?os, ya que no hay pistas concretas sobre el paradero de las cartas o si estos documentos a¨²n existen.

Acad¨¦mico de la letra Z, adem¨¢s de colaborador en medios como ABC y La Vanguardia, Gonz¨¢lez de Amez¨²a entreg¨® tambi¨¦n a la RAE antes de morir sus memorias, Epistolario sentimental, que no podr¨¢n leerse hasta 2026, cuando se cumplan 70 a?os de su muerte, seg¨²n qued¨® establecido en su testamento. Un documento que dar¨¢ m¨¢s pistas sobre la correspondencia entre P¨¦rez Gald¨®s y Baz¨¢n.