Vivir con un mill¨®n de grillos en los o¨ªdos: la batalla de los m¨²sicos espa?oles contra la sordera
Miembros de Ska-P, Los Enemigos o Rufus T. Firefly exponen sus casos y reclaman que se tipifique como ¡°enfermedad laboral¡±
Son miles de grillos. Grillando a la vez dentro de los o¨ªdos. El concierto termin¨® hace un par de horas. Roberto Ga?¨¢n Pulpul, cantante y guitarrista de Ska-P, se encuentra en la habitaci¨®n del hotel, solo, intentando dormir, en posici¨®n fetal. No puede: el sonido de los insectos es inaguantable. Ingiere alg¨²n f¨¢rmaco. Consigue descansar algunas horas. Al d¨ªa siguiente act¨²a con su grupo en otra ciudad. Volver¨¢n a despertar los grillos.
El l¨ªder de Ska-P, 50 a?os, padece tinnitus (o ac¨²fenos): zumbidos o pitidos internos en los o¨ªdos. Los sufre entre el 15 y el 20% de la poblaci¨®n, aunque no es una molestia para la mayor¨ªa. Para muchos m¨²sicos, expuestos a decibelios intensos, s¨ª. La de Pulpul es una tinnitus severa. Tanto que tuvo que dejar la m¨²sica durante dos a?os exclusivamente para tratarse. ¡°Me asust¨¦ much¨ªsimo. Habl¨¦ con mis compa?eros de grupo y les dije: ¡®Chicos, no puedo m¨¢s. Tengo que parar. Necesito que esto pare¡¯. Esos grillos me est¨¢n matando¡±, explica. Se gast¨® ¡°mucho dinero¡± en tratamientos. Estaba desesperado: se agarraba a cualquiera que le propusiese una mejora. Viaj¨® a una cl¨ªnica de D¨¹sseldorf, en Alemania. ¡°Me met¨ªan en habitaciones con camas de agua, muy relajante todo. El doctor lo relacionaba con el estr¨¦s y la ansiedad, m¨¢s que con el hecho de tocar. Empez¨® a inyectarme b¨®tox por detr¨¢s de las orejas. Pero nada: segu¨ª con todos mis grillos. No faltaba ni uno¡±, apunta. Ya en Espa?a, rayos l¨¢ser, f¨¢rmacos, homeopat¨ªa, tratamiento psicol¨®gico¡ Mucha inversi¨®n y m¨ªnimo avance.
Muchas estrellas internacionales de la m¨²sica han expuesto p¨²blicamente sus problemas de sordera: Pete Townshend (The Who), Noel Gallagher (Oasis), James Hetfield (Metallica), Phil Collins, Ozzy Osbourne, Eric Clapton¡ Algunos tuvieron que dejarlo durante un tiempo, como Brian Johnson, voz de AC/DC. En Espa?a es una dolencia que afecta sobre todo a los m¨²sicos de ¡°la vieja escuela¡±, bandas que se formaron en los ochenta y noventa. ¡°Ensay¨¢bamos en un local peque?o y a un volumen inhumano. No me he puesto protecci¨®n hasta que era demasiado tarde¡±, apunta Josele Santiago, con carrera en solitario y voz y guitarra de Los Enemigos.
Santiago, 56 a?os, ha perdido frecuencia aguda en los dos o¨ªdos. ¡°No me f¨ªo de lo que escucho cuando se hacen las mezclas de los discos. Y cuando estoy en una conversaci¨®n con tres o cuatro personas me pierdo. Parezco un abuelo cebolleta. S¨ª, te entra miedo a perder el o¨ªdo, claro. Y en los peores momentos de molestia se te agria el car¨¢cter. Y no es manera eso de vivir todo el d¨ªa de mala leche¡±, se?ala. El l¨ªder de Los Enemigos dice que ¡°se ha acostumbrado a vivir con esos pitidos¡±. La doctora Mar¨ªa Teresa Heitzmann, especialista en ac¨²fenos que trabaja en la Cl¨ªnica Universidad de Navarra, lo explica: ¡°Actualmente no existe tratamiento farmacol¨®gico ni quir¨²rgico con ¨¦xito para tratar un ac¨²feno. Lo que hay es un tratamiento para rehabilitar esa v¨ªa que funciona mal y conseguir que funcione bien. De forma que ese ac¨²feno que llega al cerebro y es percibido con molestia deje de ser percibido y se ignore. Es lo que llamamos habituaci¨®n¡±. Habituarse a ello, ignorarlo, convivir con ¨¦l pero no prestarle atenci¨®n. ¡°Vamos: que te importe un pito¡±, apunta la especialista.
Al bajista y cantante de Boikot, Juan Carlos Cabano Juankar, 52 a?os, le diagnosticaron tinnitus hace 10 a?os. ¡°El problema es que cuando empezamos a tocar desconoc¨ªamos todo esto. No ten¨ªamos informaci¨®n. Cuando me dijeron lo que ten¨ªa, lo primero que intent¨¦ es que no fuese a m¨¢s. Desde hace mucho llevo tapones y ensayo alejado de la bater¨ªa¡±, se?ala. En los momentos m¨¢s duros Juankar intent¨® que parte del tratamiento lo cubriera la Seguridad Social, ¡°ya que se trata de una dolencia laboral¡±. No tuvo ¨¦xito. ¡°He tocado en pa¨ªses como Suiza, Francia o Alemania y existe una gran sensibilidad con este tema. Tienen en marcha un programa donde m¨²sicos veteranos visitan locales de ensayo para dar charlas y advertir a los j¨®venes de la importancia de proteger los o¨ªdos. Adem¨¢s, en la mayor¨ªa de las salas y los festivales existen dispensadores de tapones para el p¨²blico. En Espa?a no los he visto nunca¡±, afirma.
Manuel J. Pizarro, 54 a?os, bater¨ªa de Reincidentes, describe lo que escucha: ¡°Como una bandada de p¨¢jaros piando en mis o¨ªdos¡±. Cuando fue al otorrino hace 25 a?os, el m¨¦dico le recomend¨®: ¡°Solo hay una soluci¨®n: deje de tocar la bater¨ªa¡±. No lo hizo porque supon¨ªa abandonar su profesi¨®n. Desde hace tiempo, cuando act¨²a utiliza unos auriculares llamados in-ear, una herramienta por donde escucha su instrumento y los de sus compa?eros, pero muy matizados. ¡°Antes era terrible, porque ten¨ªa unos monitores de 8.000 vatios a un metro de mis orejas. Con los in-ear he reducido el sonido. Por ejemplo, le pego al platillo, pero no lo escucho¡±, explica.
Paco L¨®pez, director de ARTE (Asociaci¨®n de Representantes T¨¦cnicos del Espect¨¢culo), reclama que se tipifique como ¡°enfermedad profesional¡±. ¡°Artistas y t¨¦cnicos est¨¢n expuestos durante mucho tiempo a niveles muy altos de ruido, y ello provoca un deterioro gradual de la audici¨®n. Pedimos que se otorgue el tratamiento correspondiente que repercuta en el cuidado de la salud auditiva¡±. Guillem Arnedo, presidente de la Uni¨®n de M¨²sicos Profesionales, es de la misma opini¨®n: ¡°Est¨¢ claro que esta incapacidad debe ser cubierta y tener unas compensaciones econ¨®micas, como se hace en otros pa¨ªses de Europa. En los pr¨®ximos d¨ªas arrancar¨¢ la comisi¨®n interministerial para establecer el Estatuto del Artista y esta propuesta se encuentra sobre la mesa¡±.
¡°El estr¨¦s, la ansiedad, la falta de sue?o¡ Son situaciones que activan el ac¨²feno¡±, afirma la doctora Heitzmann. ¡°Y las personas expuestas a ruido o m¨²sica alta tienen m¨¢s posibilidades de tenerlos que el resto de la poblaci¨®n. El ruido fuerte o la m¨²sica intensa es lesiva para el o¨ªdo. Produce un trauma ac¨²stico¡±. Esto tambi¨¦n se extiende a los que escuchan m¨²sica a alto volumen. ¡°Aunque se va avanzando, creo que todav¨ªa no hay una educaci¨®n al respecto. Me pongo mala cuando me cruzo con un chico o chica que lleva la m¨²sica en los auriculares tan alta que la puedo escuchar hasta yo, que estoy a dos metros. Las consecuencias, como siga as¨ª, ser¨¢n importantes¡±, informa la especialista.
V¨ªctor Cabezuelo, guitarrista y cantante de Rufus T. Firefly, tiene 38 a?os. Por lo tanto, es de una generaci¨®n posterior a los antes citados. Sin embargo, acaba de empezar un tratamiento. ¡°Siempre que un m¨²sico joven me pide un consejo que le ayude a ser profesional de la m¨²sica, respondo: ¡®Prot¨¦gete los o¨ªdos¡¯. Es dif¨ªcil que alguien con 20 a?os se ponga tapones, pero hay que concienciar en este sentido. Yo hice barbaridades cuando ten¨ªa esa edad y ahora convivo con un pitido¡±. Y contin¨²a: ¡°Creo que existe un tab¨² con este tema. Como que si dices que tienes ese problema ya no van a grabar contigo porque eres sordo. No tiene sentido. Lo importante es la prevenci¨®n. Ojal¨¢ un m¨²sico veterano me lo hubiese advertido a m¨ª hace tiempo¡±.
Despu¨¦s de mucho tratamiento sin resultados, el cantante de Ska-P vio algo de luz. ¡°Di con una especialista que me ense?¨® a ignorarlo. Solucion¨¢rmelo no me lo ha solucionado, pero ha sido la que m¨¢s cerca ha estado de explic¨¢rmelo¡±, apunta el cantante. C¨®mo se lo razon¨®: ¡°Me dijo: ¡®Esto es como entrar en una habitaci¨®n con una televisi¨®n encendida a la que no tienes acceso. Te molesta much¨ªsimo y no puedes apagarla, por m¨¢s que lo intentas no puedes. Te puedes morir intent¨¢ndolo. Pero si te das la vuelta y coges un libro y te pones a leer, esa televisi¨®n encendida desaparece. Pues eso es lo que vamos a trabajar¡¯. Y me ha ido bien. Yo sigo con mis grillos y cuando cantan hago caso a lo que me dijo: mi cerebro se va a otro sitio y dejas de atender¡±.
Los afectados afirman que tienden a aislarse para evitar los ruidos y que algunas veces se encuentran tan sensibles que un sonido cotidiano los altera. ¡°El otro d¨ªa entr¨¦ en una cafeter¨ªa por la ma?ana y estaban preparando el desayuno. El simple sonido de una cucharilla tocando la taza fue como recibir un mont¨®n de patadas en mi cerebro. Me tuve que salir del bar¡±, cuenta el cantante de Boikot.
En 2022 todos volver¨¢n a salir de gira, enchufar¨¢n sus guitarras en los amplificadores y sentir¨¢n la adrenalina de un potente concierto. Todos llevar¨¢n sus tapones.
Babelia
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