¡®La historia de mi mujer¡¯: romanticismo viejuno

Ganadora en 2017 del Oso de Oro en Berl¨ªn por En cuerpo y alma, una extra?a historia de amor que surg¨ªa en los g¨¦lidos m¨¢rgenes de un matadero, la veterana cineasta h¨²ngara Ildik¨® Enyedi estrena La historia de mi mujer, su nueva historia de amor, esta vez impregnada de un romanticismo a?ejo que acaba resultando demasiado lejano.

Adaptaci¨®n de la novela hom¨®nima y mayor ¨¦xito del novelista h¨²ngaro Milan Fust, La historia de mi mujer parte de un improbable idilio entre un maduro marino mercante y una coqueta y conquistadora mujer a principios del siglo XX. Dos personajes que entablan una envenenada dial¨¦ctica de seducci¨®n y celos. El noble y algo boborr¨®n capit¨¢n holand¨¦s Jakob St?rr, a cuya virilidad hueca da vida el actor Gijs Naber, decide pisar tierra y pedirle matrimonio a la primera mujer que se cruce en su camino. Su suerte parece echada cuando una bella francesa, Lizzy, interpretada por L¨¦a Seydoux, acepta para sorpresa del propio afectado embarcarse en la aventura.

Durante casi tres horas de metraje, la pel¨ªcula no logra despegarse de la fuente literaria de estos dos personajes, aferrada a los gestos y equ¨ªvocos de un c¨ªrculo vicioso marcado por los zarandeos emocionales de una pareja sin forma en la que ninguno acaba de fiarse del otro, especialmente ¨¦l de ella. El ingenuo y enamorado lobo de mar frente a la mundana seductora que aqu¨ª ejerce de Pigmali¨®n de los rituales de seducci¨®n de un hombre que no entiende de cortejos mientras le piden comportarse ¡°como un canalla¡±, que parezca que ha ¡°arrasado con el gallinero¡±.

Con secuencias hermosas como la del rom¨¢ntico primer baile o las del puerto de Hamburgo, el filme encalla en su sobria propuesta, sin precisi¨®n melodram¨¢tica, demasiado r¨ªgida en el manejo de las emociones de una historia de amor imposible cuyo fondo tr¨¢gico nunca acaba de emerger.