Los informes del ¡®caravaggio¡¯ de Madrid: cuatro ¡°problemas¡± y ¡°alarmantes lagunas¡± sin pintura
EL PA?S accede a un estudio firmado por el director del Prado en 2021 que subraya la ¡°gran cantidad de retoques¡± y que la acumulaci¨®n de barnices imposibilita la visi¨®n del 40% de la obra
El eccehomo atribuido a Caravaggio que apareci¨® en una subasta en Madrid en marzo de 2021, y que iba a ser vendido por 1.500 euros, presenta ¡°dos importantes y alarmantes lagunas¡± sin pintura que dejan a la vista la tela del cuadro en la zona de la cara de Cristo, seg¨²n un informe firmado en abril del a?o pasado por el director del Museo del Prado, Miguel Falomir, al que ha tenido acceso EL PA?S.
Esa conclusi¨®n, basada en el examen de unas fotograf¨ªas de la pintura, fue ampliada un mes m¨¢s tarde, durante una inspecci¨®n presencial de la obra con el fin de declarar el cuadro Bien de Inter¨¦s Cultural (BIC). Al revisar el lienzo, los especialistas del Prado detectaron cuatro ¡°problemas¡±. Uno: la ¡°gran acumulaci¨®n de barnices hace imposible la visi¨®n de al menos un 40% de la superficie¡±. Dos: hay ¡°gran cantidad de repintes y retoques¡±. Tres: se observan ¡°desprendimientos de la capa pict¨®rica que han dejado la tela al descubierto¡±, un ¡°peligro¡± que ¡°amenaza¡± con reproducirse en otras zonas del cuadro. Y cuatro: el refuerzo de la parte posterior de la pintura ¡°ha perdido adherencia¡±.
Toda esta informaci¨®n sale ahora por primera vez.
11 de mayo de 2021. Coslada, Madrid. Dos especialistas del Museo del Prado, otros tantos de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, y uno de la direcci¨®n general de Patrimonio de la Comunidad de Madrid se desplazan para ver y analizar la pintura hasta unos almacenes especializados en la conservaci¨®n de obras de arte. Este es el lugar elegido por los P¨¦rez de Castro, propietarios del cuadro, para guardar el supuesto caravaggio por recomendaci¨®n del anticuario Jorge Coll, que act¨²a como portavoz de la familia. Los investigadores deben asumir un acuerdo de confidencialidad: las fotos de la pintura no podr¨¢n hacerse p¨²blicas. Un d¨ªa despu¨¦s, Falomir firma un an¨¢lisis escueto, pero contundente y revelador, del estado de una pieza que solo unos pocos han podido ver hasta ahora.
El informe, acompa?ado de abundante material fotogr¨¢fico, alerta de que hay partes del cuadro en las que se ha ca¨ªdo la pintura, en concreto ¡°junto a la nariz del Cristo y bajo su ojo izquierdo¡±, adem¨¢s de en la capa de Pilatos. Es decir, se ve la tela, peque?os c¨ªrculos blancos, seg¨²n las fotos obtenidas por este diario. Ese ¡°peligro de levantamiento y ca¨ªda de la pintura amenaza¡± con reproducirse en otras partes del cuadro ¡°especialmente las zonas de sombras, muy craqueladas y con aspecto inestable¡±, seg¨²n el informe firmado por el director del Prado. Adem¨¢s, hay barnices que ¡°han sido parcialmente eliminados en ¨¢reas muy concretas, actuaci¨®n que ha revelado particularidades de las figuras, sin afectar a la totalidad de la escena, que est¨¦ticamente est¨¢ muy descompensada¡±. Y se detecta un problema con la tela empleada para reforzar la parte posterior del cuadro: ¡°Ha perdido adherencia con la tela original en varios puntos¡±.
Aunque el representante de los propietarios de la obra considera al Museo del Prado parte interesada, y no objetiva, pues podr¨ªa querer comprar el cuadro, el estado del reentelado alarma tambi¨¦n al especialista enviado por la Comunidad de Madrid, que firma su informe sin ahorrarse adjetivos.
¡°La oxidaci¨®n del conjunto reentelado es muy importante¡±, advierte. ¡°Est¨¢ muy embotado de adhesivo, lo que hace que presente una rigidez que pone en peligro la obra ante cualquier presi¨®n¡±, subraya. ¡°La adhesi¨®n entre ambos tejidos est¨¢ desapareciendo en algunas zonas, produciendo bolsas en la parte trasera (...) A partir de la p¨¦rdida de adhesi¨®n empezar¨¢ a ser compartida la funci¨®n de sustentaci¨®n entre tejido y estrato pict¨®rico, que evidentemente va a producir una fractura y desprendimiento de este¡±, alerta. Y a?ade: ¡°(Ha habido) repintes invasivos sobre la superficie original. Limpiezas selectivas rompen la valoraci¨®n de figura y fondo y dificultan una buena lectura de la obra¡±.
A estas conclusiones se lleg¨® tras meses de grandes titulares en el mundo del arte, que vivi¨® con m¨¢xima expectaci¨®n la aparici¨®n de un posible lienzo de Caravaggio (1571-1610). La obra, atribuida en un primer momento al c¨ªrculo de Ribera, iba a haber salido a la venta por 1.500 euros en una subasta organizada en marzo de 2021. Durante casi dos semanas, el cuadro estuvo colgado en una sala de la casa de subastas Ansorena de Madrid, y por all¨ª desfil¨® una peregrinaci¨®n de expertos, anticuarios y curiosos del mundo entero atra¨ªdos por la aparici¨®n de lo que en el mundo del arte se conoce como un durmiente, es decir, una obra mal atribuida, con un precio de salida irrisorio, y a¨²n sin protecci¨®n legal, por lo que es susceptible de ser sacada de Espa?a y revendida cuantas veces haga falta.
Por eso, antes de la fecha fijada para la puja comienzan a llover las ofertas privadas y millonarias para adquirir la pieza. Esa fue la se?al de que en Madrid se hab¨ªa encontrado una rareza exquisita, un aut¨¦ntico mirlo blanco art¨ªstico, ya que el mito de Caravaggio se ha construido a partes iguales sobre la maestr¨ªa de sus pinceladas y la escasez de su obra.
Se perdieron dos de las tres pinturas con las que el genio del barroco regresaba desde N¨¢poles a Roma para emplearlas como pago para obtener el perd¨®n por un asesinato; otra desapareci¨® en un terremoto en N¨¢poles en 1798; tres fueron destruidas durante la II Guerra Mundial, y otra se esfum¨® en Palermo en los a?os sesenta del siglo XX, un robo que se atribuye a la mafia. Apenas hay 60 caravaggios atribuidos en todo el mundo, cuatro de los cuales est¨¢n en Espa?a. En consecuencia, el descubrimiento repentino de un cuadro del genio mal catalogado abre las puertas a un negocio multimillonario que depende de que pueda ser exportado: de confirmarse su autor¨ªa, y que puede salir de Espa?a, puede venderse por m¨¢s de 100 millones de euros en el extranjero.
El Ministerio de Cultura reaccion¨® un d¨ªa antes de que se celebrara la subasta. Prohibi¨® cautelarmente que el cuadro saliera de Espa?a. Solicit¨® que la Comunidad de Madrid lo declarase Bien de Inter¨¦s Cultural (BIC), lo que imped¨ªa que sus due?os, la familia del pol¨ªtico liberal Evaristo P¨¦rez de Castro, pudieran pedir al Gobierno central que reconsidere esa prohibici¨®n a la exportaci¨®n en el futuro. Con el descubrimiento estall¨® una pol¨¦mica hecha de dinero, arte y fama: las fotos de la obra volaban entre los chats de los expertos, se amontonaban las peticiones para verlo presencialmente, y empezaron a acumularse las opiniones cualificadas que coincid¨ªan en que por ese eccehomo hab¨ªa pasado la mano de Caravaggio.
Examen con rayos
Muchos de esos expertos tambi¨¦n est¨¢n de acuerdo en que el estado de conservaci¨®n de la obra es ¡°regular¡±, como lo califica la Comunidad de Madrid. De hecho, los privilegiados que en marzo de 2021 consiguieron entrar en la casa de subastas Ansorena de Madrid, y ver la tela, ya hab¨ªan advertido de que hab¨ªa sido reentelada, que ten¨ªa gran cantidad de barnices, que le faltaba el marco y que deb¨ªa ser limpiada.
Unas valoraciones que contrastan con la de Coll, el portavoz de la familia propietaria. ¡°El estado de conservaci¨®n es correcto. Necesita una conservaci¨®n normal para un ¨®leo barroco de hace cuatro siglos. Hay que quitar barnices, peque?as reintegraciones¡±, dijo el anticuario, tambi¨¦n contratado por los propietarios para investigar y restaurar el cuadro, en una entrevista con EL PA?S de 2021. Este diario contact¨® con Coll antes de la publicaci¨®n de este art¨ªculo, pero ha declinado hacer declaraciones.
Para aclarar la autor¨ªa de la obra y estudiar a fondo su estado, el Prado aconsej¨® un examen con macrofotograf¨ªas, lupas binoculares, Rayos X, luces ultravioletas, o reflectograf¨ªa infrarroja de alta resoluci¨®n. Esa investigaci¨®n, subray¨® la instituci¨®n a los propietarios, se podr¨ªa hacer sin coste en las instalaciones del museo (las m¨¢s punteras de Espa?a para el an¨¢lisis y restauraci¨®n de obras de arte), y durar¨ªa entre 48 y 72 horas.
¡°El estudio se realizar¨ªa en un plazo muy breve, por personal altamente cualificado en la materia y garantiz¨¢ndose en todo momento las necesarias medidas de seguridad y conservaci¨®n¡±, se lee en la misiva que envi¨® el Prado a los propietarios. ¡°Asimismo, ustedes podr¨ªan designar a un representante para que actuara como correo y supervisor de todas las actuaciones¡±, se a?ade. ¡°Al finalizar el estudio, se les entregar¨ªa copia de los resultados, los cuales contribuir¨¢n sin duda a incrementar el conocimiento y prestigio de la obra¡±.
Pero los due?os declinaron en junio de 2021 el ofrecimiento, aunque lo consideraron ¡°generoso¡± y ¡°¨²til¡±. Adem¨¢s, especificaron: ¡°Se est¨¢n llevando a cabo los contactos iniciales con los principales expertos a nivel nacional e internacional de la obra de Michelangelo Merisi da Caravaggio, a fin de recabar todos los puntos de vista sobre la obra y que, cabe decir, hasta la fecha han sido positivos¡±. Y detallaron: ¡°Estimamos que este proceso, de notable rigor, exigir¨¢ unos meses m¨¢s todav¨ªa debido, entre otras circunstancias, a las limitaciones que ha impuesto, e impone, la actual situaci¨®n de pandemia¡±.
Un a?o y varias olas del coronavirus despu¨¦s, el proceso parece no haber terminado. La Comunidad de Madrid asegura a trav¨¦s de un portavoz de la consejer¨ªa de Cultura que la administraci¨®n regional no ha recibido de los P¨¦rez de Castro, ni, por lo tanto, aprobado, un plan de restauraci¨®n para la obra, como marca la ley para todos los BIC. De eso se deduce que la pintura se mantiene en el mismo estado en el que lo encontraron los especialistas que la analizaron hace m¨¢s de un a?o en Coslada. Hasta all¨ª, por lo que ha podido confirmar EL PA?S, se trasladan expertos de todo el mundo para valorar la obra. De esas visitas saldr¨¢, presumiblemente, un informe de autor¨ªa. Mientras, el misterio del eccehomo atribuido a Caravaggio sigue sin resolverse.
Babelia
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